Amparo a Tom Hansen; podrá volver a México
El ex director de la organización humanitaria Pastores por la Paz, Thomas Hansen, recibió ayer el amparo y la protección de la justicia mexicana contra la expulsión del país que le aplicó la Secretaría de Gobernación, en febrero de este año, instrumentada por el Instituto Nacional de Migración (INM). De este modo, y de acuerdo con el bufete Tierra y Libertad, que llevó el caso, el religioso ``podrá volver a territorio nacional cuando lo desee''.
Como argumento para la expulsión, el gobierno federal acusó a Hansen de participar en actividades ilícitas para un extranjero, consistentes en observar los diálogos de paz entre el EZLN y el gobierno federal y asistir al Encuentro Intercontinental contra el Neoliberalismo.
Sin embargo, el Poder Judicial, por medio de la juez octava de distrito en materia penal, Lilia Mónica López Benítez, estableció que la expulsión fue ilegal, ya que esos hechos ``de ninguna manera pueden considerarse ilícitos o deshonestos, puesto que no existe precepto legal alguno que así lo establezca''.
De igual forma, la juez asegura que ``aun cuando es cierto que a la Secretaría de Gobernación corresponde la vigilancia de la entrada y salida de los nacionales y extranjeros, así como la vigilancia del cumplimiento de las disposiciones que dicte respecto a la permanencia en el país y actividades de los inmigrantes y no inmigrantes, la expulsión decretada por las autoridades del Instituto Nacional de Migración, dependiente de la Secretaría de Gobernación, debe basarse en hechos ciertos que justifiquen la necesidad de tal medida, lo que no aconteció en la especie''.
El pasado 18 de febrero el ex director del grupo estadounidense Pastores por la Paz fue detenido en Altamirano, Chiapas, por dos agentes del Instituto Nacional de Migración. Fabio Meltis, observador internacional explicó que, cuando estaban cerca del hospital San Carlos de esa población, dos elementos de Migración se acercaron a Hansen y le pidieron que los acompañara para aclarar ``algunos papeles''.
Enseguida, lo subieron a un vehículo, pero ya no regresó. Al ser detenido, el religioso pidió a sus compañeros que, si en veinte minutos no regresaba, lo fueran a buscar al puesto de revisión que tiene el INM a la entrada de Altamirano.
Cuando los observadores llegaron, el puesto estaba cerrado, y esa misma noche supieron que Hansen se encontraba detenido en la delegación migratoria en San Cristóbal de las Casas.
El pastor y una delegación de diez estadounidenses y varios mexicanos se diri- gían a la comunidad Morelia para dar un taller sobre video y donar equipo de edición, cuando ocurrió su detención.
Ese mismo día, la Secretaría de Gobernación expresó a través de un comunicado que la expulsión de Hansen fue porque ``realizó actividades como observador internacional en los diálogos de paz entre el gobierno federal y el EZLN y en el Encuentro Internacional contra el Neo- liberalismo''. La dependencia gubernamental advirtió, además, que continuaría la vigilancia migratoria, ``con estricto apego al marco jurídico y a los derechos humanos''.
El día 19, el religioso fue expulsado de México por el Aeropuerto Internacional capitalino hacia Miami. Antes de abordar el avión aseguró que su presencia en Chiapas fue sólo para tratar de ayudar a la gente mexicana y que continuaría con su labor, aunque desconocía entonces si algún día pudiese volver.
Desde entonces, diversos organismos no gubernamentales de derechos humanos denunciaron la ilegalidad de la acción del gobierno, entre otras razones por violar el artículo primero de la Constitución, ``que otorga el derecho de audiencia a todo ciudadano en este país para acudir a una autoridad judicial''.
Asimismo, los activistas alertaban sobre el hecho de que la expulsión pudiese exacerbar un ambiente xenófobo, ya que la de Hansen era la tercera deportación de un extranjero en menos de dos meses.
La abogada Bárbara Zamora, del bufete jurídico Tierra y Libertad, comentó ayer que la resolución de la juez López Benítez quedó vertida en veinte hojas, en las cuales argumenta la improcedencia de la expulsión de Hansen, por lo que éste podrá retornar al país cuando así lo decida.
Francamente complacida al constatar que en México haya ``excepciones'' en el Poder Judicial, que actúan con estricto apego a derecho y que en este caso se expresa al rebocar un acto ``ilegal y autoritario del gobierno'', la litigante dijo también que están en curso otros amparos interpuestos por su despacho contra la expulsión de 21 italianos, que llegaron a México en mayo de este año para participar como observadores de la situación chiapaneca. Estos últimos se encuentran radicados en el juzgado tercero de distrito en materia penal.
La Secretaría de Gobernación evitó comentar esta resolución judicial, a pesar de que hace apenas unos días el subsecretario de Población y Servicios Migratorios, Fernando Solís Cámara, había declarado que ningún amparo contra expulsión de extranjeros había procedido. La dependencia tiene, sin embargo, la opción de apelar el dictamen del juez ante un tribunal colegiado de distrito. (Rosa Elvira Vargas y María Rivera)