Se determina que Gutiérrez Rebollo se enriqueció de manera ilícita
Jesús Aranda Ť La Contraloría Interna de la Secretaría de la Defensa Nacional determinó la culpabilidad del general Jesús Gutiérrez Rebollo en el delito de enriquecimiento ilícito, e impuso al militar una sanción administrativa de 30 millones de pesos y su inhabilitación por 15 años para desempeñar cualquier cargo público.
El ex director del Instituto Nacional Contra las Drogas habría manejado ilícitamente 15 millones de pesos cuando estuvo adscrito a la zona castrense en San Luis Potosí, y después como comandante de la Quinta Región Militar (1986-1996).
Gutiérrez Rebollo, quien fue detenido en febrero de 1997 acusado de tener vínculos con el narcotráfico y sobre quien pesa ya una condena de 30 años por portación ilegal de arma de fuego, tendrá que pagar un total de 30 millones 534 mil 550 pesos con 12 centavos a la Federación.
La contraloría interna había comenzado en 1997 un proceso por enriquecimiento ilícito en contra del general, y fue hasta el pasado 23 de julio cuando el militar recibió la notificación correspondiente de los cargos por enriquecimiento ilícito.
Fue ayer cuando la contraloría interna concluyó que Gutiérrez Rebollo había incumplido sus obligaciones contenidas en la Ley de Responsabilidades de los Servidores Públicos, e impuso la sanción administrativa correspondiente.
Por otra parte, Gutiérrez Rebollo enfrenta procesos tanto en el ámbito federal como en el fuero de guerra.
El ex director del INCD está acusado por los delitos de narcotráfico -por sus presuntos vínculos con traficantes de enervantes, entre los que destaca Amado Carrillo-, así como por abuso de autoridad ante la justicia federal.
En tanto que, en el fuero de guerra, enfrenta procesos por los delitos de abuso de autoridad, uso indebido de deberes e insignias militares, ilícitos contra la salud en su modalidad de fomento al tráfico de cocaína, asociación delictuosa, cohecho, y acopio de armas. Por su parte, la hija del general, Teresa de Jesús Gutiérrez, rechazó en entrevista la imputación de las autoridades militares, y aseguró que hasta el momento la Secretaría de la Defensa Nacional no ha podido comprobar el presunto enriquecimiento ilícito de su padre: ``¿Dónde están los 500 millones de dólares que le achacaron había recibido ilegalmente?'', cuestionó.
Agregó que con tal de fincar la acusación, la Procuraduría Militar ha ``inventado'' posesiones al general Gutiérrez Rebollo, siendo que éstas son incluso de ``homónimos'' de ella misma, como fue el caso de una señora de Irapuato que se inconformó porque pretendían incautarle una propiedad, siendo que su único pecado era el de llamarse igual que la hija del general de división.
Teresa de Jesús cuestionó que también se hayan incluido, en la causa en contra de su padre, dos propiedades adquiridas antes de 1985 -esto cuando el proceso en contra del militar comprende de 1986 a 1996. Además, insistió en que está comprobado que las propiedades de su progenitor fueron adquiridas a través de préstamos otorgados por el Banco del Ejército y por el ISSSFAM.
Tras insistir en la inocencia del general Gutiérrez Rebollo, Teresa de Jesús afirmó que ``de todos los generales de su nivel, es decir, diplomados de estado mayor y con el grado de divisionario, el que menos tenía era él''.