La Jornada 23 de septiembre de 1998

Corren ``ríos de oro'' de la delincuencia organizada y el narco, afirma

Mireya Cuéllar y Ciro Pérez Silva Ť El procurador Jorge Madrazo Cuéllar advirtió ayer a los diputados que la delincuencia organizada, y en especial el narcotráfico, siguen penetrando en las procuradurías de la República y estatales, y en la Policía Judicial Federal ``por los ríos de oro que maneja'', lo que genera una enorme capacidad de corrupción.

Recordó que en agosto de 1996 un grupo de 830 elementos de la Policía Judicial Federal -instituto al que describió como históricamente ineficiente- fueron separados de sus cargos por diversas irregularidades; sin embargo, dijo, ``por las imprecisiones legislativas'' , hoy 339 ``están ya de regreso y a muchos de ellos se les tuvo que pagar incluso salarios caídos''. Ante esta situación, pidió a los legisladores revisar el marco jurídico ``para que esto no vuelva a ocurrir''.

En medio de enconados reproches por la situación de inseguridad que se vive en el país, la oposición se refirió ayer en San Lázaro a la situación de secuestros, robos violentos y asesinatos de que se habla todos los días. El procurador presentó su propio balance: ``sin duda, se han dado avances, pero éstos no son todavía tan importantes como para revertir la realidad delictiva y para reconquistar la confianza social''.

Expresó que la corrupción es un grave problema que las procuradurías y las corporaciones policiacas han padecido a lo largo de los años, misma que impide la impartición de justicia. Sin embargo, señaló que él la ha combatido desde su arribo a la Procuraduría General de la República y ofreció como prueba de ello que a lo largo de 22 meses han sido destituidos 474 elementos de esa dependencia, 299 fueron inhabilitados y que las sanciones administrativas suman ya mil 488, además de que se ha ejercido acción penal contra 213 agentes de la Policía Judicial Federal y 75 del Ministerio Público.

También describió ``el alto grado de ineficacia que históricamente ha tenido la Policía Judicial Federal''. Explicó que tienen pendientes 35 mil 696 órdenes de aprehensión y 14 mil 644 de reaprehensión.

Reconoció que el secuestro se ha vuelto uno de los delitos más graves que se cometen en el país y dijo que en materia de narcotráfico es necesario ``profundizar en el área de prevención'' porque muchas organizaciones criminales trasnacionales están pagando a sus colaboradores mexicanos ya no en dólares, sino ``en especie'', es decir, con droga, comprometiéndolos a que se consuma en el país, ``lo cual para nosotros representa una extraordinaria preocupación''.

Para responder a la ecologista Verónica Velasco, quien le reprochó la inseguridad en que viven todos los ciudadanos, salvo los funcionarios que como él disponen de un fuerte equipo de seguridad, Madrazo soltó un ``¡déjeme decirle que si de amenazas se trata, yo puedo contarle un rato!''

Cuando los legisladores Juan Carlos Gutiérrez Fragoso, del PAN, y Benito Mirón Lince, del PRD usaron el termino ``fracaso'' para definir su actuación, el procurador pareció desesperarse y pidió comprensión porque ``hay cosas que no se pueden resolver en un plazo inmediato...me gustaría que la formación de los nuevos policías fuera en un abrir y cerrar de ojos, pero... los cursos, en el menor de los casos son de 12 meses''.

Añadió que sería ``hacer pura demagogia, señor diputado, si yo le dijera que estos resultados se van a tener en el cortísimo plazo; creo que hemos tenido fallas, tropiezos, pero estoy seguro que si seguimos trabajando en esta estrategia, no vamos a fracasar''.

Frente a las críticas, fue muy poco lo que Madrazo pudo abonar en su favor: la detención de la banda de los Amezcua Contreras, por ejemplo. Y es que, de acuerdo con los argumentos del funcionario, los grandes crímenes que se han registrado en el país, en los últimos años, siguen siendo expedientes abiertos. A preguntas expresas sobre los casos Colosio o Acteal, se limitó a señalar: ``se está investigando''.

Incluso, en lo referente a la operación Casablanca, a la que calificó de ``herida'' en la relación con Estados Unidos y de ``balde de agua fría'', sólo añadió: ``se viene integrando la averiguación''.

Sobre las acusaciones provenientes de Suiza contra Raúl Salinas de Gortari por narcotráfico y lavado de dinero y tan ventiladas por la prensa los últimos días, apuntó: ``muy pronto, el mes próximo... pudiésemos reunirnos para darles a conocer qué es lo que sabemos y qué estamos haciendo''.

El informe de Madrazo le pareció tan descolorido al perredista Mirón Lince, que le dijo: ``no se vale que después de un año más de fracasos se vengan a decir las mismas cosas (...) este recinto no es una iglesia o confesionario... necesitamos funcionarios capaces, que resuelvan, no que vengan aquí a lavar sus culpas''. Y se le fue encima también con el caso de Acteal: ``¿dónde están los verdaderos autores de esta matanza? Y ¿Aguas Blancas?, o ¿El Bosque? ¿Qué pasó con El Charco?

Para cerrar su intervención, quizá sólo para clavar la estocada final, el diputado hizo referencia a un oficio del director de la Policía Judicial Federal al jefe del Estado Mayor de la Secretaría de la Defensa Nacional, en el que le solicita autorización para cambiar titulares en algunas plazas: ``¿está usted seguro que es usted quien manda en la Procuraduría?''

El procurador pretendió esquivar el castigo diciendo que mejorar la seguridad publica es responsabilidad de los tres poderes.

Se refirió al caso Acteal: ``hemos hecho 126 consignaciones y no se trata sólo de alfiles, como usted decía''. Respecto de El Charco, dijo: ``estoy en la mejor disposición de conversar con usted...'' y finalmente también respondió: ``Yo estoy seguro que mando en la Procuraduría General de la República, y asumo esta declaración con toda la responsabilidad y con todos sus efectos señor diputado''.

Benito Mirón fue de los pocos que hizo uso de su derecho de réplica, sólo para decirle a Madrazo ``que reconozco lo difícil de su trabajo, el gran empeño que ha puesto en el cargo y aunque admito su buena fe y voluntad, no estoy aquí para alabarlo, sino para decirle que si una golondrina no hace verano, un Arizmendi tampoco lo hace''.

En el papel de cuetero que le toco representar ayer, Madrazo Cuéllar no trató de imponer optimismo al definir la situación del país: ``la recta, pronta y eficaz procuración de justicia en México es todavía una asignatura pendiente, sin embargo se están dando los pasos correctos para remediar la situación''.

Quinto en la pasarela de las comparecencias ante la Cámara de Diputados, Madrazo Cuéllar tuvo más quorum que su antecesora en este desfile, Rosario Green. Como el viernes pasado, también ayer hubo diputados que, medrosos, se ahorraron no sólo los aplausos, sino también la réplica. Solamente un par de perredistas abandonaron la modorra para colocar un cartelón a los pies de la tribuna con la leyenda: ``De Mérida a Ensenada y Madrazo como si nada''.

Aunque según el pase de lista, asistieron a San Lázaro 317 diputados, en el salón nunca se pudieron contar más de 250, de 500 que son en total. El receso o intermedio al que llamaban ``recreo'' en tono burlón los legisladores- ayer fue suspendido, pues éste era un buen momento para abandonar el salón y no volver más por ahí. El propio secretario de Hacienda -cuya comparecencia era de las más esperadas- concluyó el miércoles pasado su visita con alrededor de 100 expectadores.

Y es que con frecuencia a los diputados les resulta más interesante lo que ocurre fuera del salón de sesiones. Ayer, los perredistas andaban en la sede de su partido afinando la postura frente al Fobaproa para la reunión de la tarde, y los panistas discutían lo mismo, pero en el restaurante más cercano al recinto legislativo.