La Jornada 29 de septiembre de 1998

Expectación y esperanza por el encuentro anual entre FMI y BM

Reuters, Ap y Dpa, Londres, 29 de septiembre Ť Los próximos 10 días podrían ser cruciales para calcular cuánto más le queda de vida al contagio de la crisis de los mercados emergentes. El Banco de la Reserva Federal de Estados Unidos se reúne este martes, Brasil efectuará elecciones el domingo y los líderes financieros del mundo se preparan para una semana de reuniones durante y al margen del encuentro anual del Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Mundial (BM).

Todos estos acontecimientos tendrán un efecto tranquilizador en los atribulados mercados, pero los inversionistas, atemorizados por más de un año de falsos amaneceres, probablemente querrán mucho más de lo que obtendrán, dijeron analistas. ``En las próximas dos semanas las cosas probablemente serán más positivas que negativas: un buen resultado electoral en Brasil, reconocimiento de la comunidad internacional de los riesgos por delante, y un recorte de las tasas en Estados Unidos'', previó el jefe de economistas de mercados emergentes de Donaldson, Lufkin and Jenrette.

Luego de 15 meses de devaluaciones monetarias que parecían no tener fin y derrumbes de los mercados accionarios desde Asia hasta América Latina, los líderes mundiales han visto que la volatilidad se ha comenzado a filtrar a las mayores economías del mundo y están tratando de frenar esa tendencia. Detener la descomposición en Brasil se ha vuelto esencial.

Además, el cambio en Alemania incidirá en la asamblea del FMI que comenzará el viernes con reuniones entre los representantes del mundo en desarrollo y las diez principales potencias industriales. Alemania forma parte del Grupo de los Diez, que preside este año el ministro de Hacienda de Gran Bretaña, Gordon Brown.

El canciller electo, Gerhard Schroeder, tiene 30 días para formar gobierno tras su victoria electoral del domingo, pero será llamado a ejecutar las decisiones que adopte el G-10 esta semana. El único que adelantó una opinión fue el viceprimer ministro italiano, Walter Veltroni, al expresar en Roma que en el futuro las decisiones ``serán más fáciles'' por la afinidad del nuevo líder socialdemócrata alemán con el gobierno laborista inglés de Anthony Blair y el del socialista francés, Lionel Jospin.

Alemania y Japón son los dos socios más fuertes del FMI después de Estados Unidos, con 5.53 por ciento de los votos. Washington tiene 17.78 por ciento de los sufragios, que se miden en relación con sus contribuciones a los fondos del organismo multilateral.

América Latina, que en conjunto tiene 9.09 por ciento de los votos del FMI, examinará la situación con su propio Grupo de los Ocho, creado por los ministros de Hacienda de Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Ecuador, México, Perú y Venezuela. Canadá y Estados Unidos participan en las labores del G-10 y en el G-8.

América Latina participa también en el G-24, que eleva a la asamblea anual conjunta del FMI y el BM los puntos de vista del mundo en desarrollo. Los ocho latinoamericanos en el G-24 (hay ocho de Asia y otros ocho de Africa) son Perú, Brasil, Argentina, México, Guatemala, Trinidad, Colombia y Venezuela.

Por último, Gordon Brown, pidió hoy una amplia reforma del sistema financiero mundial, cuyo esquema ``está agotado''. En la conferencia anual del gobernante Partido Laborista, el funcionario pidió al FMI y al BM crear herramientas con las cuales en el futuro se puedan abordar mejor los problemas que afectan a los mercados financieros internacionales.