La Jornada 7 de octubre de 1998

OTAN, lista para atacar en Kosovo

Reuters, Afp, Dpa y Ap, Washington, 6 de octubre Ť El presidente Bill Clinton advirtió hoy a Yugoslavia que la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) ``está lista'' para intervenir militarmente en la provincia serbia de Kosovo en caso de que el presidente yugoslavo, Slobodan Milosevic, no cumpla la resolución de la Organización de Naciones Unidas sobre el cese del fuego y el comienzo de pláticas de paz con los separatistas albaneses.

Rusia reiteró su rechazo a una acción armada por parte de la alianza atlántica, y anunció que utilizará su poder de veto ante el Consejo de Seguridad para evitar que la OTAN ponga en marcha sus planes.

El presidente Boris Yeltsin advirtió sobre ``graves consecuencias internacionales'' en caso de que las potencias occidentales decidan intervenir en Kosovo --donde 90 por ciento de la población es de origen albanés--, y reiteró que la salida al conflicto sólo debe ser diplomática.

El gobierno chino también se pronunció contra la intervención militar y sostuvo que deben agotarse las vías del diálogo ``porque las acciones militares no son necesarias para resolver la cuestión''.

El gobierno yugoslavo, en tanto, afirmó que las fuerzas serbias concluyeron su ofensiva contra el separatista Ejército de Liberación de Kosovo y ya comenzaron la retirada de la provincia separatista, mientras que Montenegro (que junto con Serbia integra la República Federal de Yugoslavia) pidió a la organización atlántica no aplicar sus planes militares.

Clinton afirmó que ``la OTAN está preparada para actuar si Milosevic no hace honor a las resoluciones de Naciones Unidas. Es el momento de poner fin a la violencia en Kosovo'', donde los combates entre las fuerzas serbias y los separatistas armados dejaron un saldo de casi mil muertos y 265 mil refugiados.

El mandatario también advirtió sobre una inminente catástrofe humanitaria, y responsabilizó a Milosevic de la crisis a la que se enfrentan los desplazados.

Clinton recibió el apoyo del primer ministro británico, Tony Blair --quien se encuentra en China--, sobre la necesidad de usar la fuerza para solucionar la crisis en la región balcánica.

Además, pidió el cese del fuego inmediato, la retirada de las tropas serbias, el libre acceso de todos los grupos a la ayuda humanitaria y el establecimiento de negociaciones directas con los albaneses separatistas, retomando los puntos de la resolución de Naciones Unidas.

El enviado estadunidense, Richard Holbrooke, se entrevistó hoy con Milosevic y con el líder político de los separatistas albaneses, Ibrahim Rugova, aunque no trascendieron detalles sobre la entrevista con el dirigente albanés.

El diplomático pidió al mandatario yugoslavo tomar en serio las amenazas de la OTAN, y recibió un informe ``sombrío'' sobre la crisis en Kosovo por parte de un grupo de observadores internacionales.

Por su parte, una fuente diplomática familiarizada con las deliberaciones sobre Kosovo dijo que se creía que Holbrooke volverá a reunirse con Milosevic este miércoles, con el objeto de impedir un ataque de la OTAN a Yugoslavia.

Según un despacho de la Ap, horas depués de que Holbrooke partió de Pristina rumbo a Belgrado, los periodistas observaron que un cenenar de vehículos militares yugoslavo abandonaban Kosovo, lo que demostraría el cumplimiento por parte de Milosevic de las demandas.

El jefe del Pentágono, William Cohen, declaró que los ataques de la OTAN provocarán daños significativos en la capacidad militar yugoslava, y exigió a Milosevic comprometerse a cumplir la resolución de Naciones Unidas; sin embargo, el funcionario resaltó que su gobierno se opone al envío de tropas terrestres a Kosovo.

La OTAN, a su vez, amenazó nuevamente con ataques aéreos contra posiciones serbias, mientras los cancilleres se preparan para analizar la crisis en la provincia serbia a partir de este jueves.

Según estimaciones de la alianza atlántica, se necesitan 26 mil soldados para lograr el cese del fuego en Kosovo.