La Jornada 21 de octubre de 1998

YANQUIS, CAMPEON

Agencias, San Diego, 21 de octubre Ť Yanquis de Nueva York respondió a su legendaria tradición y aniquiló en cuatro juegos consecutivos a Padres de San Diego para apuntarse su 24 título de la Serie Mundial desde 1923, luego de cerrar el juego 3-0 con pitcheo del zurdo Andy Pettitte y el tercer salvamento en la serie del panameño Mariano Rivera.

Scott Brosius, el antesalista que liquidó en la inicial al bateador emergente Mark Sweeney para concluir la contienda de esta noche, fue designado el Jugador Más Valioso de la Serie. Brosius conectó un sencillo en la octava produciendo una carrera que afianzó el triunfo neoyorquino.

Yanquis es ahora la franquicia que más títulos ha conseguido en los circuitos profesionales del deporte estadunidense. Con este campeonato supera a Canadians de Montreal de la Liga Nacional de Hockey (NHL), que lleva 23 coronas en su haber en la Copa Stanley. El máximo ganador de la Liga Nacional de Futbol Americano (NFL) es el equipo de Gigantes de Nueva York con 16, misma cantidad que llevan en la Liga Nacional de Basquetbol (NBA) Celtics de Boston. La última Serie Mundial que Yanquis había ganado fue hace dos años, en 1996, cuando superaron a Bravos de Atlanta por 4-2.

Pettitte y Kevin Brown, este último lanzador derecho de San Diego, se enfrascaron en emotivo duelo de serpentinas, que se mantuvo sin anotación durante cinco entradas, y al abrir la sexta, Derek Jetter se embasó con una rola dentro del cuadro. Paul O'Neill lo avanzó con doblete y Bernie Williams lo remolcó con batazo de botes altos y lentos al pítcher.

Padres volvió a carecer de bateo oportuno. En la segunda entrada dejó las almohadillas repletas. Brown dio una rola al pítcher para cerrar el episodio. En la sexta entrada con uno en base Caminiti roleteó para segunda y terminó la entrada con la primera doble matanza de los neoyorquinos.

Ya con la pizarra 3-0 se produjo la mayor amenaza de Padres en el octavo, cuando Quilvio Veras recibió la base. Tony Gwynn dio imparable al central para expulsar del montículo a Pettitte. Entró al relevo Jeff Nelson, quien ponchó a Greg Vaughn y enseguida el panameño Mariano Rivera tomó el montículo y Ken Caminiti lo recibió con imparable al derecho para llenar los cojines, pero Jim Leyritz elevó al central y las esperanzas de los carmelitas se diluyeron.

Brown abanicó a ocho yanquis durante su estancia de ocho entradas y cuando dominó por esta vía a Andy Pettitte llegó a 42 chocolates en esta postemporada para establecer un récord. La marca anterior era de Mike Mussina, de Orioles en 1997. La nueva marca quedó en 46.

En el largo historial de triunfos de Yanquis esta fue la séptima serie que obtiene por limpia. Antes lo hizo ante Pittsburgh en 1927; San Luis 1928; Chicago 1932 y 1938; Cincinnati 1939 y Filadelfia 1950.

Por otra parte, para los frailes fue su séptima derrota consecutiva en una Serie Mundial, en 1984, Tigres de Detroit lo derrotó 4-1.