Embargar las cuentas de Pinochet, ordena Garzón
Ap, Afp, Dpa y Reuters, Londres, 23 de octubre Ť En tanto que un diario británico atribuía al gobierno de Tony Blair haber dicho que podría liberar a Augusto Pinochet por ``compasión'', Scotland Yard entregó un nuevo mandato de arresto contra el ex dictador chileno retenido en una clínica desde hace una semana.
En paralelo, el juez español Baltasar Garzón ordenó un embargo urgente de las cuentas bancarias de Pinochet y su familia en Suiza y Luxemburgo, y el gobierno de España calificó de ``repugnante'' el episodio histórico de la dictadura pinochetista, como igualmente consideró condenables otras dictaduras que han existido o existen.
El diario The Daily Telegraph señaló que el gobierno británico sugirió, por primera vez, la posibilidad de permitir al anciano ex militar eludir la extradición solicitada por un juez español y deportarlo a su país ``por compasión'', cuya señal se habría dado luego de que George Carey, arzobispo de Canterbury, pidió compasión en este caso.
Si bien el periódico señala que el ministro del Interior, Jack Straw, reiteró que el affaire Pinochet es puramente judicial y no político o diplomático, desprendió su conclusión cuando el ministro dijo que entre los elementos a ser considerados se encuentran ``circunstancias que dependen de la compasión''.
Las agencias de prensa recordaron que la víspera el presidente chileno, Eduardo Frei, anunció que su gobierno se proponía a plantear el caso del ex comandante en jefe del ejército desde una perspectiva ``humanitaria'' debido a su delicado estado de salud, al tiempo que los defensores del ex dictador apelaron su detención preventiva.
Pero, al parecer ante esa apelación, la sección de Scotland Yard encargada de las extradiciones, entregó este día un nuevo mandato de arresto contra el acusado de genocidio, torturas y terrorismo.
La fiscalía del caso dijo que el nuevo mandato sustituye al que permitió efectuar la detención el viernes anterior; según esto, el nuevo libelo ``refleja mejor el pedido de extradición'' de la justicia española.
Al respecto, la policía británica se negó a brindar mayores detalles pero explicó que se está examinando la denuncia de los grupos de derechos humanos para que la propia justicia británica también comience investigaciones criminales del caso.
Por lo demás, en su comparecencia ante el Parlamento el ministro Straw sólo confirmó que si el juez Garzón no tiene preparado su expediente de extradición para el 25 de noviembre, fecha en que vence el plazo de 40 días con que cuenta después del arresto, ``el senador (vitalicio) Pinochet será autorizado a partir''.
El ministro del Exterior, Robin Cook, reafirmó que Gran Bretaña nunca discutió con España la visita del ex dictador antes de su llegada a Londres, y añadió que la policía británica le informó con anticipación a la cancillería que tenía planes para arrestar al visitante sudamericano.
Esta aclaración la hizo Cook en una carta enviada al líder del Exterior del opositor Partido Conservador, Michael Howard, y señaló que por lo general los conservadores defienden la legalidad, pero dijo que estaba sorprendido de que ponían en duda la ley cuando uno de sus amigos se pronunciaba en contra, en alusión al pedido de Margaret Thatcher para que liberen a Pinochet.
En ese marco se produjo la llegada hoy a Londres del subsecretario chileno del Exterior, Mariano Fernández, quien indicó que arribaba para hacer gestiones para la liberación de Pinochet, y que estaba en misión especial porque acudía a una invitación de la Royal Ordenance, una fábrica de armamentos, además de que en Chile había tribunales para enjuiciar a sus ciudadanos.
Pinochet ha sido demandado varias veces ante los tribunales chilenos, pero los jueces han desechado todos los requerimientos.
En Madrid, el juez Baltasar Garzón pidió a Suiza y Luxemburgo que adopten medidas urgentes para congelar tocas las cuentas bancarias del ex dictador chileno o sus familiares, para evitar que éstas sean escondidas en caso de que sea llevado a la justicia y se le orden pagar multas o daños.
En tanto que Garzón enviaba comisiones rogatorias a esos países y pedía que la orden se tome ``sin perjuicio de ampliar el catalogo de países'', el fiscal de la Audiencia Nacional, Eduardo Fungairiño, solicitó nuevamente al juez que desista de su empeño de extraditar al ex militar ya que el Convenio Europeo de Extradición no se aplica retroactivamente.
Sin embargo, la decisión final será tomado el próximo jueves cuando se reúna la Sala de lo Penal de dicho tribunal.
Mientras el vocero del gobierno español, Josep Piqué, calificaba de ``repugnante'' a la dictadura pinochetista y expresaba su ``enorme admiración'' a los esfuerzos de los demócratas chilenos por consolidar su democracia, el ex presidente del gobierno español Felipe González defendió el principio de territorialidad judicial pero expresó satisfacción por el arresto de Pinochet.
Por su parte, los abogados de la acusación en Madrid pidieron la extradición de Pinochet y expresaron su certidumbre de que España y Gran Bretaña cumplirán, pero acusaron al fiscal Fungairiño de actuar como defensor del ex dictador.