Incesante violación de derechos en México: Human Rights Watch
Jim Cason, corresponsal, Washington, 3 de diciembre Ť El presidente Ernesto Zedillo no ha desarrollado una estrategia para solucionar graves problemas de derechos humanos en México, entre los que sobresalen tortura, violencia rural, abusos del Ejército y detenciones arbitrarias, afirmó hoy Human Rights Watch (HRW). Además, subrayó, el Ejecutivo elaboró iniciativas que socavaron las protecciones de las garantías individuales.
En su informe a nivel mundial, Human Rights Watch elogió al presidente Zedillo por reconocer, en términos generales, violaciones de los derechos humanos en México, pero señaló que ``los largamente fermentados'' abusos a tales garantías sólo fueron atendidos por las autoridades cuando se convirtieron en escándalos nacionales o internacionales.
``El gobierno federal simplemente no ha hecho lo suficiente para detener los abusos policiacos, una práctica persistente y sistemática'', declaró Kenneth Roth, director ejecutivo de Human Rights Watch. Roth se rehusó a calificar la situación de los derechos humanos en México como mejor o peor, pero afirmó que la impunidad sigue como un problema grave que contribuye a la violencia en el país.
Human Rights Watch sugirió en su informe que tanto las autoridades estatales como las federales ignoraron indicios que podrían haber evitado la masacre de Acteal en diciembre pasado.
En el informe se examinó los hechos en Acteal con cierto detalle, además de criticar al gobierno estatal por haber fracasado en abordar la violencia rural y por armar a grupos paramilitares.
Aunque la organización de derechos humanos sostiene que la violencia en Chiapas no proviene sólo de un lado de las partes en conflicto, sí acusó al gobierno estatal de promover casos criminales contra sus opositores, mientras protege a simpatizantes del PRI en la entidad.
La principal organización estadunidense de derechos humanos también criticó la represión gubernamental contra los municipios autónomos y la expulsión de los observadores de derechos humanos extranjeros.
Asimismo, advirtió que los problemas de derechos humanos en México se extienden más allá de Chiapas.
``En muchas partes del país continuaron ocurriendo violaciones graves a los derechos humanos, entre ellas tortura y detenciones ilegales, en incidentes relacionados con la lucha contra los insurgentes, las drogas y la delincuencia común'', opinó.
La organización también criticó en particular las reformas constitucionales destinadas a combatir la delincuencia por medio de la limitación de los derechos de los sospechosos.
El informe es crítico hacia las fuerzas armadas mexicanas por sus ``prácticas abusivas'', y mencionó en particular una matanza ocurrida en diciembre de 1997 perpetrada por tropas de los Grupos Aeromóviles de las Fuerzas Especiales.
El organismo también reprobó las ejecuciones extrajudiciales de 11 miembros del EPR en Guerrero, ocurridas en julio pasado, y los ataques contra grupos independientes de derechos humanos en el país. Más adelante, destacó declaraciones de Zedillo en donde el mandatario critica a este tipo de grupos en Chiapas, por invitar a la entidad a observadores internacionales.
Human Rights Watch incluyó en su sección sobre México una critica detallada de la política estadunidense hacia el país vecino, por su falta de presión para promover una mejora de la situación de los derechos humanos.
Condenó los programas estadunidenses de capacitación antinarcóticos por carecer de capacidad para monitorear asuntos de derechos humanos relacionados con estas actividades.
``Durante el año, se mantuvieron las preocupaciones en materia de derechos humanos en torno a la capacitación estadunidense'', subrayó.
Después de registrar importantes cambios políticos destinados a que la oposición sea actualmente mayoría en la Cámara de Diputados, Human Rights Watch advirtió que estas transformaciones no condujeron a una mejora en la situación de los derechos humanos en México.
``Continuaron ocurriendo en todo el país graves problemas de derechos humanos, entre ellos la tortura, la detención arbitraria, y un sistema de justicia poco receptivo ante los abusos'', se afirma en la sección del informe destinada a México.