Luis Javier Valero Flores
Repudio unánime

En un hecho político sin precedentes en la historia de Chihuahua, 25 de los 33 legisladores integrantes del Congreso del estado y de todas las fracciones parlamentarias (PRI, PAN y PRD) acompañaron a los contingentes de las principales organizaciones sociales de la entidad y de todas las expresiones locales de El Barzón a una marcha, quizá la más grande de los últimos años en la capital, en rechazo a la propuesta de ingresos y egresos del gobierno federal para el año próximo.

Precedida de numerosas declaraciones de prácticamente todos los organismos empresariales, incluidas las agrupaciones ganaderas, y de un unánime repudio popular al aumento de la gasolina, la manifestación callejera del pasado miércoles 18 puede convertirse en el preludio de inesperadas reacciones políticas.

Una de ellas, quizá la más importante porque puede ser representativa de lo que generará la aprobación del paquete económico, es la declaración de los legisladores priístas locales: prometieron ``no rajarse',' en voz de Bernardo Ruiz Ceballos.

Tal conducta puede convertirse en un conflicto nacional al interior del priísmo. Al mismo tiempo que sus militantes chihuahuenses tomaban la calle para oponerse al presupuesto, el líder nacional de ese partido, Mariano Palacios Alcocer, exhortaba a los diputados federales de varias entidades, entre ellos a los chihuahuenses, a que aprobaran y defendieran la propuesta presidencial.

En medio de las consignas barzonistas, los priístas, encabezados por su vicecoordinador en el Congreso, caminaban ``del brazo y por la calle'' con el coordinador de los legisladores blanquiazules y la totalidad de los dirigentes barzonistas del estado.

La participación de miembros del PRI en tan insólita manifestación está precedida de inusuales acuerdos del Congreso local, donde tienen amplia mayoría.

Esta mayoría ha aprobado, por unanimidad, apoyar a los deudores de la banca; elevaron una petición a la Cámara de Diputados para que apruebe un programa de rescate a los caídos en cartera vencida; expresaron su solidaridad con los usuarios del servicio telefónico, los productores de frijol y maíz y los dueños de automóviles internados ilegalmente al país. Además, emitieron un voto de censura a la Suprema Corte de Justicia de la Nación por el fallo acerca de la capitalización de intereses.

Hasta elevaron su protesta ante la inminente desaparición de Conasupo. ¿Hasta donde llegarán?

Presionados a mantener una conducta política que le cierre espacios a la poderosa oposición social influida por el PRD, particularmente en el movimiento barzonista, los legisladores del PRI han intentado no quedarse atrás en abanderar todas y cada una de las manifestaciones sociales de rechazo a la política económica del gobierno federal.

El momento de la definición no tardará mucho, en el mitin realizado al finalizar la marcha, los asistentes acordaron citar a los diputados federales de todos los partidos a expresar públicamente la orientación de su voto en la aprobación del presupuesto federal para 1999.

Empujados por las circunstancias, o por sus propias convicciones políticas, los priístas chihuahuenses estarán obligados, en las próximas semanas, a mostrar congruencia con sus expresiones públicas.

Solos se metieron de nuevo, de lleno, a una novísima encrucijada. ¿Serán capaces de decirle no al señor presidente: ``se equivocó Zedillo, no eran unos cuantos los inconformes con su propuesta económica para 1999''?

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