La Jornada 6 de diciembre de 1998

Exito rotundo de El gran Lebowski en el festival de cine de La Haban

Pl, Afp y Reuters, La Habana, 5 de diciembre. Ť Un éxito rotundo, sin lugar a duda, dentro de la quinta jornada del 20 Festival del Nuevo Cine Latinoamericano, tuvo la película estadunidense El gran Lebowski, de los hermanos Cohen. Invitados a La Habana para presentar su trabajo, los cineastas fueron largamente ovacionados en la popular sala Yara, en la que -hecho inusual- hubo reventa de boletos y puestos en las filas de entrada.

Esta es la segunda ocasión en que estos directores visitan la isla: ``Salimos muy impresionados en la primera visita, y regresamos porque acabamos de terminar un guión para la Universal, sobre un tema cubano''. Su historia, explicaron, trata sobre un ``vaquero que trae armas a los cubanos a fines de la guerra de 1898'', pero dijeron desconocer los detalles de la filmación.

Los Cohen forman parte de una delegación invitada por el Instituto Sundance, que dirige Robert Redford, que trajo una muestra de diez obras estadunidenses, entre ellas la conocida Mad City, dirigida por Costa Gavras, y Wild man blues, una especie de documental, de Bárbara Kopple, sobre Woody Allen.

Homenajeado en la Unión de Escritores y Artistas de Cuba (UNEAC), Gavras informó que actualmente trabaja en un guión sobre John Perifoy, ex embajador de Estados Unidos en Guatemala, durante el periodo de Jacobo Arbenz, ya que, indicó, la acción de Perifoy le recuerda la conspiración contra el gobierno de la unidad popular de Salvador Allende, en Chile, en 1973. Para asesorarse contó con la ayuda del fallecido poeta guatemalteco Luis Cardoza y Aragón, a quien definió como una persona ``inteligente y agradable''. El documental sobre Allen versa, sobre todo acerca de su afición por el clarinete. La realizadora se concentra en la psicología del director, un hombre muy parecido a sus personajes, y mediante la puesta al descubierto del Allen real, enhebra una cinta que adolece de unas sabias tijeras, que habrían ahorrado aburrimiento. Pero Wild man blues se salva, sin embargo, por esos trozos de reflexión del artista, su fantástica y atractiva locuacidad y el humor presente en todo.

En la sección oficial, la largamente esperada cinta de Arturo Ripstein, El evangelio de las maravillas, no despertó demasiado entusiasmo entre el público y la crítica, aunque mostró a un director conocedor a fondo del oficio, en una cinta de reflexiones sobre la vida, la evasión del individuo frente al peso de las circunstancias, impregnada con ese barroquismo ya característico de su filmografía. La apuesta mexicana continuará hoy con la proyección de las cintas El cometa, de Marissa Sistach y José Buil, y La primera noche, de Alejandro Gamboa, aunque sin duda la atracción del día lo será el filme del colombiano Víctor Gaviria, La vendedora de rosas.

La jornada del viernes fue de altibajos. Una cinta que resultó estimulante fue la española Los amantes del círculo polar, de Julio Medem, una pieza sobre la ternura del amor y la vida de los solitarios. Con ella se abrió el ciclo de cine español, integrado por Abre los ojos, de Alejandro Amenábar; Los años bárbaros, de Fernando Colombo; Barrio, de Fernando León de Aranoa, y Caricias, de Ventura Pons, entre otras.