Abren al público cuatro nuevas áreas en Teotihuacán
Arturo Jiménez y Alejandra Gudiño Ramírez, corresponsal, Teotihuacán, Méx., 17 de diciembre n Con la apertura al público de cuatro nuevas áreas en la zona arqueológica de Teotihuacán, se desmienten las denuncias acerca de la destrucción de este patrimonio, señaló la directora del Instituto Nacional de Antropología e Historia, María Teresa Franco, quien agregó: ``ya no hay misterio y todos podrán comprobarlo''.
Franco había hecho una pausa durante el recorrido que inició en el museo de sitio del lugar donde, con Rafael Tovar, presidente del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes, y el gobernador del estado de México, César Camacho, había firmado un convenio para preservar la zona arqueológica.
El recorrido, guiado por el arqueólogo Rubén Cabrera, había continuado por el Museo Comunitario de San Francisco Mazapa -ubicado en una secundaria- y los conjuntos de Zacuala, Zacuala Patios y Atetelco. En uno de los recién restaurados patios de este último, Franco advirtió:
``Seguramente tendremos en La Ventilla (punto final del recorrido) a manifestantes pidiendo que no se abra esa zona arqueológica, lo cual es un absurdo. Hoy es muy relevante para Teotihuacán porque van a quedar todos los intereses a la vista, incluidos problemas de divisionismo entre los compañeros sindicalizados''.
Y agregó: ``Esta bellísima mañana de diciembre nos permitirá a los mexicanos disfrutar otras maravillas del lugar y ver en vivo y a todo color a los actores que representan intereses comerciales o políticos en el llamado problema Teotihuacán''.
Sin embargo, ni comerciantes locales ni trabajadores del INAH impidieron la entrada a La Ventilla, y sólo estos últimos planteaban en pancartas el pago de prestaciones sociales y, en alguna, denuncias de daño arqueológico.
Ofreció que la ``moderna construcción'' que se destinaría para locales comerciales desaparecerá en cuanto se adquiera el terreno particular en que se ubica La Ventilla, a fin de que se incorpore sin problema a la zona arqueológica.
Acerca de la adecuación de la zona de El Corzo, Franco señaló que se ``abatió la altura'' de construcciones antes planeadas con fines comerciales -con lo que ya no habrá un ``impacto visual negativo''- y que ahora serán sede del Museo de la Pintura Teotihuacana.
Tovar consideró ``sin precedente'' el convenio firmado con el gobierno del estado de México y agregó que es un punto de partida para acuerdos similares.
Dijo que además habían acordado con el gobernador Camacho la publicación del catálogo de monumentos históricos coloniales del estado de México.
Con el acuerdo se creará un consejo consultivo que opinará sobre el manejo de la zona y un consejo de patrimonio arqueológico, como órgano técnico asesor, y un patronato para allegarse recursos.
Atetelco, muestra del sistema urbano
Zacuala y Zacuala Patios, en el barrio de la Purificación y separados por un angosto callejón prehispánico, son de lo más sobrios y elegantes de la metrópoli teotihuacana, pero debido a su lejanía del centro ceremonial no se les daba mantenimiento, lo cual causó su deterioro.
Allí se conservan fragmentos de murales que representan a Tláloc, símbolos cósmicos y otros.
Atetelco es muestra del sistema urbano y habitacional de la antigua urbe, integrada por numerosos conjuntos habitacionales. Como otros del lugar, estaba delimitado por calles y encerrado con muros de protección.
La principal sección arquitectónica, llamada Patio pintado, es considerada una de las más bellas por su magistral diseño. En la parte central hay un altar reconstruido y coronado con un pequeño templo. Otros patios son el blanco y el rojo.
La Ventilla, la más grande de las nuevas áreas, comprende una parte recién explorada de 13 mil metros cuadrados, donde se integran varios conjuntos arquitectónicos.