De vuelta a la fase 1
La Comisión Ambiental Metropolitana determinó ayer aplicar la Fase 1 del Plan de Contingencia Ambiental para la ciudad de México debido a que el Imeca, con respecto a las partículas suspendidas (PM-10), superó los niveles permisibles. A partir de hoy dejarán de circular los vehículos con holograma de verificación vehicular 2, terminación de placa en número par y permisos.
Además, se suspende la circulación de 50 por ciento de los vehículos oficiales; se reduce 30 por ciento la actividad industrial y 50 por ciento en las termoeléctricas ubicadas en el valle de México, y deberán suspenderse los trabajos de purgas y desfogues en las terminales de distribución de gas, así como las obras de construcción, mantenimiento y pavimentación.
De las seis ocasiones este año en que se ha declarado emergencia ambiental, ésta es la segunda vez que se aplica por los altos índices de partículas suspendidas. La primera fue el 15 de mayo, cuando la infición superó los 230 puntos Imeca; en esa ocasión, el secretario del Medio Ambiente del Distrito Federal, Alejandro Encinas, informó que los altos niveles de contaminación habían sido provocados por los incendios forestales, y advirtió del aumento de las partículas suspendidas, aunque aún no se había diferenciado el criterio para aplicar las medidas emergentes ante la contaminación provocada por éstas y por el ozono.
Más conocidas como PM-10, las partículas suspendidas son moléculas menores a 10 micras (milésima parte de un milímetro), que resultan de la combustión de materias orgánicas e inorgánicas generadas principalmente por incendios forestales y combustibles fósiles. Su tamaño es tan diminuto, que llegan a alojarse en las partes interiores de las vías respiratorias provocando infección, irritación, inflamación y hasta desequilibrio en el sistema inmunológico; incluso, puede provocar que los metales entren a la sangre y, en el largo plazo, originar cáncer, por lo que los especialistas han advertido que son mucho más dañinas que el ozono.
Descartan influencia del Popo
A pesar de que durante el día de ayer se especuló en torno a una posible relación del aumento de los niveles de PM-10 con la actividad que en los últimos días se ha registrado en el volcán Popocatépetl, los responsables de la Comisión Ambiental Metro- politana descartaron esta posibilidad al asegurar que ``ha habido otras exhalaciones fuertes en el Popo y no ha pasado nada''.
En cambio, explicaron que con la salida de los vacacionistas ha habido una indiscriminada quema de diesel, que es la causa más probable de la generación de las partículas. Otras causas pueden ser, según explicaron los expertos, por el uso de chimeneas, la quema de madera, carbón y llantas en esta época.
El 29 de mayo pasado, luego de que la ciudad enfrentó una emergencia ambiental de cinco días, la Comisión Ambiental Metropolitana reforzó las medidas para aplicar el Plan de Contingencia y rectificó los criterios para aplicar dichas acciones, dependiendo de las causas.
Así, se estableció que cuando la contaminación se deba sólo al ozono, el plan se aplicaría al alcanzar los 240 Imeca, mientras que cuando sea causada por PM-10, entraría en vigor al superar los 175 puntos. En el caso de que se presenten ambos elementos, las medidas se aplicarían al rebasar los 225 puntos de ozono y 125 de PM-10.
Ayer, las autoridades determinaron aplicar la Fase 1 luego de que a las 9:00 se registraron 206 puntos Imeca por partículas suspendidas; sin embargo, los niveles siguieron subiendo hasta las 15:00, cuando se registró el nivel más alto del día, con 230 puntos. Por la noche, los niveles continuaban en 226 puntos y, de acuerdo con las previsiones de la Comisión Ambiental Metropolitana, la tendencia era ascendente. (Josefina Quintero y Daniela Pastrana)