¡EUREKA!

Nueva fuente de energía

Los días de la abundancia de las fuentes de petróleo y gas están contados. Ahora, la inquietud de los investigadores recae en encontrar nuevas fuentes de energía para que las ruedas del desarrollo continúen girando.

La respuesta podría estar en una sustancia congelada que se localiza bajo el suelo oceánico, llamada hidrato de metano. Es una combinación cristalina de gas natural y agua, contenida en un elemento que parece hielo pero que arde con facilidad.

Los geólogos predicen que las reservas de petróleo escasearán en los siguientes 15 años, por lo que las investigaciones sobre esa nueva sustancia representan un gran potencial para todos los países del mundo.

De acuerdo con las primeras estimaciones, el hidrato de metano alojado solamente en las aguas de Estados Unidos contiene alrededor de 200 trillones de pies cúbicos de gas natural, lo que resultaría suficiente para cubrir todas las necesidades de energía de esa nación por más de 2 mil años, tomando como referencia los índices de uso actual.

Sin embargo, en este momento ninguna compañía o gobierno ha demostrado cómo extraer el gas natural de esos depósitos sin invertir enormes cantidades de dinero en el intento.

El metano de la mayoría de los depósitos viene originalmente de una bacteria que vive debajo del suelo marino. Al consumir los residuos de plantas y animales del sedimento, las bacterias excretan metano. Cuando las condiciones son frías y la temperatura alta, el gas bacteriano queda atrapado dentro de los hidratos. En algunos depósitos las fuentes de gas provienen de sedimentos calentados por la alta temperatura interna de la Tierra.

Japón, que debido a la escasez de sus recursos de energía ha tomado la delantera en la exploración de ese compuesto, tiene programado un proyecto de 10 años de investigación, cuyo propósito principal es la caracterización del producto, es decir, determinar cuánto hay y dónde están localizados los depósitos más ricos para asegurar su producción comercial. (Mirna Servín)