La Ley de Herodes
Fernando Figueroa * Junto con el fin de año llegó la carta de renuncia en la que, básicamente, Raúl Velasco le recrimina falta de chamba a Emilio Azcárraga Jean. Lo único que le propusieron, luego de su trasplante de hígado, fue un programa mensual sin goce de sueldo. EL 24 DE noviembre de 1969, Velasco envió a Joaquín Vargas, entonces director general de Televisión Independiente de México (TIM), una carta de renuncia en la que expresaba su inconformidad por la "pública y notoria falta de confianza de diversos directivos del canal 8 para con el suscrito y sus constantes reproches a mi forma de trabajo". En un suplemento biográfico titulado Confesiones humanas de Raúl Velasco, editado en 1983, el conductor celayense recuerda que "a las juntas directivas de canal 8 se había colado un argentino apellidado Domenech, quien pensaba modificar el formato de mi programa Domingos espectaculares; quería incluir juegos de concurso con premios en efectivo. Me opuse rotundamente haciéndoles ver un principio de la estrategia del beisbol, juego de mi infancia: si vamos ganando, no se puede cambiar el orden al bat". CHUCHO SALINAS suplió a Velasco y el rating del programa se vino abajo. Joaquín Vargas quiso reinstalar a Velasco, pero Raúl no aceptó. De ahí pasó a Telesistema Mexicano, donde creó Siempre en domingo, programa que estuvo al aire durante 28 años. En su carta de renuncia dirigida a Azcárraga Jean, que le envió por fax ya que tenía un mes pidiendo inútilmente una entrevista personal, Velasco escribe: "Mi enfoque y el de los colaboradores cercanos al presidente de la empresa son totalmente diferentes e irreconciliables". LA VERDAD ES que Televisa vive la peor época financiera de su historia y una falta de liquidez que asusta. Hay áreas en donde no hay lana esp-cerdo cuando llega la quincena y les pagan dos o tres días después. Emilio III heredó un emporio con deudas y está tratando de capotear el temporal como Dios le da a entender. En su "nueva Televisa" (como la llama Raulito), no hay lugar fijo para periodistas como Guillermo Ochoa o conductores muy vistos como el guanajuatense. HACE 30 AÑOS, cuando Raúl Velasco le pidió chamba por vez primera a Azcárraga Milmo, el Tigre le dijo: "Me caes muy bien, pero tú no estás hecho para la televisión. ƑCómo va a tener éxito en la pantalla un muchacho de lentes, güerito y con cara de intelectual?" Luego cambió de opinión al ver el éxito de Velasco en el canal 8 y desde entonces le ofreció para siempre una libertad irrestricta... hasta que murió. Toda la vida Raúl ha sido un hombre pragmático, que en sus inicios televisivos la hizo de payaso y al final de mesías. Al principio defendió a Jodorowsky y al final vetó a Lucha Villa por pintarse el pelo de verde. A Lupita D'Alessio la impulsó y luego la marginó por cuestiones morales. A Pati Chapoy la promovió como asistente y terminó sacrificándola para conservar a un anunciante. A Juan Gabriel lo programó cuando éste aún no era nadie y lo desapareció del mapa cuando Juanga tuvo problemas con una trasnacional del disco. Algo parecido hizo Raúl cuando Vicente Fernández no quiso bailar al son del Fidel Velázquez del espectáculo. A Lucía Méndez la promovió por órdenes superiores y al final la negó tres veces sin que cantara ningún gallo. Ahora las vibraciones cósmicas le indican que le conviene crear una empresa de nombre Organización Raúl Velasco, que servirá para asesorar programas televisivos. Seguramente su primer cliente será Domingo azteca, emisión de Tv 13 que conduce Karina, el orgullo de su nepotismo. SOBRINO POLITICO DE Miguel Alemán Valdés, amigo y socio de Emilio Azcárraga Milmo, Raúl Velasco sabrá ahora que tiene menos amigos y más enemigos de los que creía.