Injusticia y miseria, causas del malestar castrense, replica el CPCP a Labastida
Detrás del movimiento del Comando Patriótico de Concientización del Pueblo (CPCP) están ``la injusticia, la miseria, el hambre, el abandono forzado de escuelas por parte de nuestros hijos, la pérdida de nuestros bienes materiales, la delincuencia forzada de nuestros hermanos militares para sobrevivir, la denigración de nuestros jefes diplomados del Estado Mayor, la soledad y el abandono de nuestros hogares y la prostitución obligada de nuestras esposas''.
De esa forma, mediante un comunicado enviado a este diario, el teniente coronel Hildegardo Bacilio Gómez y el capitán Alberto Enríquez del Valle responden al secretario de Gobernación, Francisco Labastida Ochoa, quien aseguró que los militares inconformes podrían estar ``manipulados''.
Los firmantes refieren que ``es una tristeza'' que ni el presidente Ernesto Zedillo ni el secretario de la Defensa, Enrique Cervantes Aguirre, ``realicen una investigación real y honesta, con base en las denuncias de injusticia, corrupción y miseria a que están sometidos los cerca de mil 500 militares libres bajo fianza e internos en las prisiones militares''.
Y agregan: ``Bajo un erróneo concepto de disciplina, son violados nuestros derechos ciudadanos más elementales, despojándonos de nuestra jerarquía, sueldo y todo tipo de derechos laborales, orillándonos a la desintegración familiar, como lo prueba 80 por ciento de divorcios de los militares que han caído en este absurdo e injustificado pantano judicial''.
En la respuesta se indica que Labastida ``no tiene la información suficiente del movimiento''. Incluso lo llaman a ``no verter opiniones superficiales''. Bacilio Gómez y Enríquez del Valle invitan al funcionario para que visite las cárceles militares ``y se compenetre de la forma tan irregular en que se desarrollan los juicios y procesos penales, en los que se priva de la libertad a militares profesionales que han servido con lealtad a México''.
En nombre del CPCP, aseguran que su movimiento no ha debilitado a las fuerzas armadas. ``Por el contrario, se nos han unido generales, jefes y oficiales en servicio activo que están encuadrados en las unidades y dependencias de la Secretaría de la Defensa Nacional''.
El documento exige al funcionario federal que ``no se engañe y no engañe a la sociedad de que no existe un cáncer en el Ejército, de que nuestro movimiento es sólo muy llamativo y de que no tiene la envergadura que se le ha querido dar. Por el momento hemos concentrado nuestras baterías sobre la problemática de los militares sujetos a proceso; muy pronto tocaremos temas mucho más delicados, que correrán por completo el telón de lo que sucede al interior de las fuerzas armadas.
``Le sugerimos reorientar sus declaraciones, no vaya a ser que nos esté subestimando. Funcionarios de Gobernación anteriores hicieron lo mismo con el movimiento indigenista de Marcos en Chiapas, y desgraciadamente así lo sigue informando usted, circunscribiendo el gran problema de la guerrilla de Chiapas y la guerra de baja intensidad que ahí se libra, a pequeñas diferencias entre la población, a un absurdo conflicto intercomunitario por un banco de grava que motivó la espeluznante masacre de Acteal.''
Los soldados inconformes señalan a Labastida que en el caso de Acteal se habla de pérdida de vidas humanas como si fuera dinero o animales, ``que se suman a los cientos de compatriotas muertos, provocados por la mala conducción del gobierno o inducidos y provocados a propósito por el mismo; recuerde que ninguna vida mexicana, por humilde que sea, justifica el botín político que se disputan partidos, funcionarios y ricos de este país''.
Corrupción, el alguien tras la protesta
Triunfo Elizalde Ť Benjamín Laureano Luna, presidente del Frente Mexicano Pro Derechos Humanos, censuró lo expresado por Francisco Labastida Ochoa, ``que quiere encontrar a alguien atrás de ese movimiento, cuando ese alguien está dentro de las fuerzas armadas y se llama corrupción y violaciones a los derechos humanos de los soldados.
``Es un mar de corrupción el alguien que impulsó a los militares a salir a las calles a protestar, porque violaciones a reglamentos que debieron ser motivo de arrestos administrativos se convirtieron en procesos penales para poder suspender el pago de diversas prestaciones que se les otorga a los militares en activo, y ese dinero misteriosamente ha desaparecido, lo que significa que los procesos que artificialmente se han creado en contra de las víctimas son toda una industria para obtener botín.''