La Jornada 15 de enero de 1999

Sigue en picada la bolsa brasileña

Afp, Dpa y Reuters, Brasilia, 14 de enero Ť Los mercados se hundieron nuevamente este jueves en Brasil tras la dimisión de otro directivo del Banco Central (BC), sumando más presión sobre la moneda local un día después de que fue devaluada, mientras el presidente Fernando Henrique Cardoso insistió en que el país realizó esos ajustes cambiarios en buenas condiciones.

Pero el mayor líder opositor, Luiz Inacio Lula da Silva, advirtió que el mandatario socialdemócrata corre el riesgo de terminar su segunda gestión ``siendo responsabilizado por haber quebrado la octava economía del mundo''.

Cuando comenzaron los rumores sobre la posible dimisión del director de Fiscalización del BC, Claudio Mauch, la Bolsa de Valores de Sao Paulo, la más importante de América Latina, que había abierto en alza, comenzó a perder. Cuando la renuncia fue anunciada oficialmente, la bolsa cayó en picada (10.3 por ciento), y fue activado por segunda vez en esta semana el mecanismo circuit breaker que interrumpe durante 30 minutos la sesión cuando los retrocesos superan los diez puntos. Finalmente, la jornada terminó con una baja de 9.96 por ciento.

En tanto, el Ministerio de Hacienda debió negar rumores sobre una eventual renuncia de su titular, Pedro Malán. La versión fue alimentada por la dimisión, la víspera, del presidente del BC, Gustavo Franco, un estrecho amigo del ministro.

A pesar de la jornada de pánico en la bolsa, y de la devaluación de facto de la moneda en 8 por ciento decidida la víspera por el nuevo titular del BC, Francisco Lopes, con el objetivo de reducir las tasas de interés y hacer frente a la especulación, responsables bancarios y agentes de cambio dijeron a la prensa que este jueves no se registró un aumento considerable en la compra-venta de dólares.

La fuga de divisas en los últimos meses ha provocado una caída de las reservas internacionales, desde 70 mil millones de dólares en agosto a unos 45 mil millones actuales. Y en este día, la salida de divisas del país había llegado en la noche a mil 144 millones de dólares, según fuentes extraoficiales.

Pese a la tensión reinante, el presidente Cardoso, que el primero de enero comenzó su segundo mandato, dijo que el nerviosismo de los mercados era ``exagerado'' y consideró que la ampliación de la banda cambiaria se realizó en buenas condiciones pues existe ``el colchón financiero'' del acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI), dijo su portavoz Sergio Amaral.

Brasil acordó con el organismo internacional un severo paquete de ajuste fiscal, que paulatinamente está siendo aprobado por el Congreso, para recibir una línea de créditos de 41 mil 500 millones de dólares.

La postura opositora

Lula da Silva sostuvo que la salida de Franco del BC es insuficiente para una modificación sustancial de la política económica, y pidió la renuncia del ministro de Hacienda, a quien calificó de ``lacayo del sistema financiero internacional''.

Cardoso ``necesita comprender que su modelo económico quebró'', dijo el ex obrero y ex candidato presidencial, quien comparó al mandatario con el ex presidente de la Unión Soviética, Mijail Gorbachov. Así, el líder del izquierdista Partido de los Trabajadores sostuvo que durante años el sistema financiero internacional vendió la figura de Gorbachov ``como la del hombre más importante del mundo, y después percibió que él había destruido la segunda potencia mundial''.

El senador petista Eduardo Suplicy admitió que una ``cuidadosa desvalorización (de la moneda) puede transformarse en estímulo para las exportaciones'', pero apuntó que es urgente ``crear condiciones para aumentar la producción y el empleo''.