La Jornada 19 de enero de 1999

PRESENTAN PRUEBAS CONTRA PINOCHET

Afp, Ap y Reuters, Londres, 18 de enero Ť Al iniciar hoy la Cámara de los Lores un nuevo examen del caso Augusto Pinochet, la parte acusadora aseguró que muchos de los crímenes por los que España quiere juzgar al ex dictador chileno se cometieron antes de que se convirtiera en jefe de Estado, por lo que no puede gozar de inmunidad.

Entre tanto, una organización de derechos humanos presentó un recurso contra el gobierno del presidente chileno Eduardo Frei, por haber asumido la defensa de Pinochet, detenido desde el 16 de octubre pasado en la capital británica. El abogado Abil Berkovic, quien representa a la Agrupación de Familiares de Ejecutados Políticos, sostuvo que la actuación del mandatario ``es un acto reñido con las normas internacionales y afecta gravemente las garantías constitucionales de igualdad ante la ley y derecho a la justicia de los familiares de las víctimas de las violaciones a los derechos humanos''. El gobierno de Frei contrató a un equipo de abogados británicos para que se presente por primera vez, el próximo miércoles, ante la Cámara de los Lores británica, pero asegura que no defenderá la figura del ex dictador Pinochet, sino el principio de la ``territorialidad de la ley''.

La fiscalía británica, que representa a las autoridades españolas, fue la primera en declarar este lunes ante los lores, mientras que el juez español Baltasar Garzón, autor de la petición de extradición, asistió por primera vez a las audiencias y asesorará a la fiscalía.

El fiscal, Alun Jones, aseguró que existen evidencias de que Pinochet conspiró con otros altos jefes militares para planear una campaña contra sus enemigos políticos antes del golpe. Campos de futbol, barcos y otras instalaciones fueron identificados como lugares a los que fueron llevadas las víctimas inmediatamente tras la asonada militar. Según Jones, decenas de oficiales de la marina chilena que se oponían a Pinochet fueron torturados, por órdenes suyas, un mes antes del 11 de septiembre de 1973.

El abogado alegó asimismo que el gobierno chileno, en los documentos presentados ante la corte, admitió que Pinochet no se convirtió formalmente en jefe de Estado hasta nueve meses después del derrocamiento del presidente constitucional, SalvadorAllende.

También se refirió a crímenes que Pinochet habría ordenado fuera de Chile (Estados Unidos, Italia, Argentina, Paraguay, Uruguay y Bolivia), estimando que la soberanía nacional chilena para juzgar al ex dictador no puede aplicarse a estos casos.

En noviembre pasado, cinco magistrados de la Cámara de los Lores determinaron en una votación de tres a dos que Pinochet no disfrutaba de inmunidad como ex jefe de Estado, pero en diciembre el tribunal invalidó su resolución luego de que la defensa alegó que uno de los jueces tenía vínculos con Amnistía Internacional, una de las partes interesadas.

Entre las acusaciones contra Pinochet presentadas hoy, destacan el uso de lanzallamas contra sus opositores, rotura de huesos, violaciones, al igual que la desaparición de más de tres mil personas. ``La profunda depravación de las torturas alegadas, fruto de la instigación del demandado, hace imposibe argumentar que podrían ser cometidas dentro de las funciones de un jefe de Estado'', afirmó Jones.

El juez principal, lord Nicholas Browne--Wilkinson, dijo que si esas acusaciones resultan dignas de crédito, Pinochet no podrá reclamar inmunidad y ``todos podremos irnos a casa''. Sin embargo, trascendió que los jueces habrían desestimado el argumento de que Pinochet no fue reconocido inmediatamente como jefe de Estado después del golpe.

En los próximos días, los lores escucharán a representantes del gobierno chileno y abogados de organizaciones de defensa de los derechos humanos, reunidos en torno de Amnistía Internacional.

Partidarios y detractores

Afuera de la sede de la Cámara, unos 200 partidarios de Pinochet se manifestaron esta mañana, ante un grupo de 70 opositores al ex dictador, aunque no se registraron incidentes, salvo cuando dos hombres se insultaron. ``¡Liberen a Pinochet!'', gritaban los pinochetistas. Del otro lado de los policías que separaban a ambos grupos, carteles rezaban: ``Inmunidad es impunidad'', y los adversarios del general de 83 años pedían su extradición a España.

Los partidarios de Pinochet en Londres, apoyados por la ex primera ministra británica Margaret Thatcher, han emprendido una ofensiva que contempla la presentación, este martes, de un folleto en defensa del ex dictador, que será enviado a ``5 mil formadores de opinión''.

El texto justifica el golpe de 1973 en nombre de la lucha contra el comunismo, y califica a Pinochet como ``víctima de un secuestro político''. Pero por otro lado, unos 700 mil europeos firmaron una petición a favor de la extradición del ex dictador, redactada por el Comité Chile para la Justicia, organización con sede en Gran Bretaña.

En la capital chilena, el presidente Frei recibió, por primera vez en cinco años, a representantes de la Agrupación de Familiares de Detenidos Desaparecidos, quienes le pidieron que el gobierno no participe en la defensa de Pinochet, al tiempo que un grupo de 22 abogados chilenos emitió una declaración en la que dijeron que la soberanía nacional de Chile no es afectada por el caso Pinochet, sino por ``las sistemáticas violaciones de derechos humanos durante su dictadura''.

Por su parte, el Premio Nobel de la Paz 1987 y ex presidente de Costa Rica Oscar Arias, dijo estar a favor del proceso contra Pinochet, porque ``la impunidad es el mayor peligro para la humanidad''. En cambio, el ex presidente costarricense y candidato a la secretaría general de la Organización de Estados Americanos, Rafael Angel Calderón, aseguró que ese proceso ``es una afrenta para el continente''.