Ť Las turbulencias de la economía continuarán en el corto plazo: Lamaziere


Desmiente Brasilia que pretenda adoptar un control de capitales

Ť No habrá segundo plan económico, aclara la presidencia Ť Supuesto "apuntalamiento" del real

Reuters, Afp, Dpa y Ap, Brasilia, 22 de enero Ť El gobierno de Brasil no piensa adoptar un control de capitales ni un segundo plan económico tras la persistente devaluación del real, aunque el Ministerio de Hacienda estima que las turbulencias de la economía nacional continuarán en el corto plazo.

No se está estudiando ningún nuevo plan económico porque lo que debía ser modificado ya se hizo y las líneas de acción están "muy claras" y han sido definidas por el Banco Central de Brasil, afirmó el vocero adjunto de la presidencia, Georges Lamaziere, quien indicó que dependerá del mercado el aumento de las tasas de interés.

Así el funcionario desmintió que el Fondo Monetario Internacional (FMI) --que recién prestó a Brasil 41 mil 500 millones de dólares-- vaya a imponer nuevas metas de ajuste fiscal al país, no obstante que el actual programa --que busca abatir el déficit fiscal del casi 8 por ciento del producto interno bruto (PIB)-- se ha convertido en el talón de Aquiles.

En relación con una propuesta de Argentina de crear una asociación monetaria con Estados Unidos que proteja al peso, atado al dólar desde 1991, Lamaziere dijo que la eventual dolarización del peso "es una decisión de cuño interno" y no tiene necesariamente un impacto negativo en el Mercado Común del Sur (Mercosur).

Por su parte, el Banco Central negó que haya intervenido en el mercado de cambios para sostener la moneda brasileña, al salir al paso a versiones de que debió optar en defensa del real ante una persistente devaluación que pudiera aumentar los temores de un peligroso contagio en los mercados emergentes del mundo.

En un reporte indicó que la institución rectora "no se ha manifestado" desde su último comunicado del 18 de enero, cuando anunció que dejaría flotar el real y tras la salida de más de 300 millones de dólares de los mercados de cambio, pues la elevación de su tasa de interés en 41 por ciento fracasó en su intento de evitar tal salida.

En las primeras cotizaciones de este viernes el real cayó nuevamente al situarse en 1.75 por dólar en comparación con 1.70 de la víspera.

Pese a todo, la cotización al cierre de la jornada fue 1.72, similar a la de ayer, y fue a raíz de esto que se habló de un "apuntalamiento" del Banco Central y que ese organismo desmintió.

En cuanto a las acciones brasileñas, cerraron con baja de 1.8 por ciento en lo que significa una caída por segundo día consecutivo ante la continua fuga de capitales.

Operadores bursátiles dijeron que si bien se consideran las fluctuaciones del tipo de cambio, el verdadero temor se concentra en torno a la cantidad de dinero que sale del país sudamericano.

El ministro de Hacienda, Pedro Malán, reconoció que las turbulencias que se abaten sobre la economía brasileña se mantendrán en el corto plazo, por algún tiempo, quizá semanas, y explicó que esto significa que Brasil tendrá que depender de la conducción de las políticas monetaria y fiscal de manera intensa.

Incluso el ministro alertó desde la víspera a los organismos financieros internacionales sobre el riesgo de morosidad de los estados de Minas Gerais y Río Grande do Sul y dio su aval para la suspensión de desembolsos y cancelación de contratos, aunque insistió en que Brasil "honrará integramente" sus compromisos internaciona- les con sus acreedores.

En tanto que el liderazgo de la Cámara de Diputados calificaba de razonable el plazo de 90 días para que las medidas del gobierno den resultados, el cogobernante Partido Movimiento Democrático Brasileño negó que dicho plazo constituya un ultimátum al gobierno del presidente Fernando Henrique Cardoso.

Mientras, todo indica que la industria automotriz se encamina hacia una depresión, ante la crisis económica y huelgas en las plantas ensambladoras.

La Ford prevé una drástica caída en sus ventas y no ha alcanzado un entendimiento con los sindicatos sobre el despido de 2 mil 800 trabajadores, entre otros casos de las compañías del ramo.

Se prevé además que el precio de los combustibles suba 8 por ciento a partir de febrero, y las acciones de las compañías españolas con inversiones cuantiosas en América Latina cayeron bruscamente ante la situación brasileña.

En Nueva York se estima que el real seguirá bajo fuertes presiones en las próximas semanas, y el economista estadunidense Jeffrey Sachs criticó al FMI por lo que consideró como sus "políticas desastrosas", pues sus cinco últimos paquetes de ayuda han fracasado.