Puebla; los denunciantes, aún sin respuesta
José Galán Ť A pesar de que la Unión Campesina Independiente presentó a la Secretaría General de Gobierno de Puebla pruebas contra Antorcha Campesina en los homicidios de al menos siete de sus compañeros, no ha habido respuesta. Según Marcos Martínez Guerrero, asesor jurídico de la UCI, eso permitió el asesinato de Delfino Bonilla Santiago, el 7 de julio de 1998, entre Zapotitlán de Méndez y Huitzilán de Serdán, en la sierra poblana.
Amenazado de muerte por los antorchistas, Martínez Guerrero presentó pruebas de los asesinatos de Antonio Melchi Cipriano, Miguel Esteban Hernández, Manuel Peralta Cabañas, Manuel Peralta Velázquez, Martín Peralta Velázquez, Salvador Fuentes Gobierno, Juan Cabrera Pasión y José Martín Lobato.
"Estos son delitos que debe investigar la Procuraduría de Justicia poblana, pero no lo ha hecho", se afirma en una carta elaborada por el propio Martínez Guerrero y suscrita, además, por Bartolomé Melchi Santiago, representante de la UCI en Huitzilán de Serdán, Puebla.
"Las autoridades del estado de Puebla deben castigar a los verdaderos responsables, no a los inocentes o a los luchadores sociales, por el simple hecho de no pertenecer al PRI", afirman en el documento ambos miembros de la UCI.
Además, "queremos dejar bien claro que éstas no son ni mentiras ni calumnias, como afirma Omar Carreón Abud en el diario Unomásuno, pues sólo busca desprestigiar nuestra lucha y amenazar de muerte a todos aquéllos que se oponen a sus intereses y privilegios.
"Por eso, los antorchistas llevan a cabo un plantón en el Zócalo capitalino. Pero a nosotros no nos interesa. Ellos pueden estar allí un año o dos, mientras los mantienen los gobiernos priístas. ƑO quién creen que financia las marchas de los antorchos?", finaliza el escrito de los miembros de la UCI.