n Damnificados del sismo se enfrentaron con agentes de la policía


"Comida, no balas", piden cientos de hambrientos sobrevivientes

n Prevalece el caos a dos días del sismo en el oeste colombiano n Pobladores saquean supermercados

Reuters, Ap, Afp, Dpa y Xinhua, Armenia, 27 de enero n "Dennos comida, no plomo", gritaban cientos de hambrientos sobrevivientes del terremoto que el lunes pasado estremeció la región occidental de Colombia, al enfrentarse hoy con agentes de seguridad que con disparos al aire intentaban dispersarlos cuando saqueaban un supermercado de esta ciudad, una de las más castigadas por el sismo.

Al caos prevaleciente dos días después del sismo, que devastó ésta y otras muchas localidades del llamado ejefe cafetalero colombiano, se sumaron este miércoles saqueos y disturbios ante la incapacidad de las autoridades por distribuir la ayuda humanitaria a los miles de damnificados.

Según la Defensa Civil, se recuperaron ya 714 cadáveres, pero otras versiones dan cuenta de 879 cuerpos. Las cifras oficiales reportan 3 mil 300 heridos, pero otras fuentes refieren 3 mil 420 muertos, en tanto que el número de damnificados podría oscilar entre los 300 mil y 500 mil.

El presidente Andrés Pastrana decidió trasladar su despacho a esta ciudad, capital del departamento de Quindío, a fin de coordinar personalmente las labores de rescate y la atención a los damnificados.

El gobernante adoptó esa decisión luego de que la televisión transmitió dramáticas imágenes en las que cientos de damnificados saqueaban supermercados, muchos de ellos en edificios a punto de colapsarse.

Agentes del Departamento Administrativo de Seguridad (policía política) lanzaron disparos al aire para dispersar a los hambrientos pobladores de Armenia, que al grito de "dennos comida, no plomo", respondieron arrojando piedras que encontraban entre los escombros.

Oficialmente no se informó sobre heridos o detenidos, pero Ap dio cuenta de que seis personas, entre ellas el periodistas Orlando Guerrero, resultaron heridos.

Los saqueos comenzaron en los populosos barrios de la zona sur de Armenia, y se extendieron luego a la parte del centro, en donde el terremoto destruyó prácticamente todas las edificaciones; la parte norte de la ciudad, ubicada a 170 kilómetros al oeste de Santafé de Bogotá, quedó casi intacta.

El alcalde armenio, Alvaro Patiño, ordenó la militarización de la ciudad para evitar la repetición de saqueos, aunque poco antes había dicho que "la situación se volvió incontrolable y la gente tiene hambre", y agregó que las unidades de la policía y el ejército sólo alcanzaban para brindar ayuda humanitaria.

Y es que en los saqueos participaron por igual miles de mujeres, niños y hombres que, dijeron a periodistas, no habían comido y bebido agua en los dos últimos días. Algunos indicaron que lograron beber agua de la lluvia que cayó anoche en la ciudad.

Pero si la situación era dramática en Armenia y Pereira, capital de Risaralda, en las poblaciones rurales el panomara era mucho peor: una destrucción casi total de viviendas, carreteras bloqueadas por derrumbes de tierra y rocas, escasez de agua y víveres y miles de damnificados, confirmaban el cuadro desolador de esos poblados, virtualmente abandonados a su suerte.

A las poblaciones de Calarcá, Barcelona, Pijao, Genova, La Tebaida y Montenegro, habitadas por pobres recolectores de café, el socorro no había llegado todavía.

En medio del drama se vivieron momentos emotivos cuando un grupo de rescatistas logró sacar con vida al joven David Andrés Acevedo, de 16 años, vigilante en un edificio que se derrumbó.

La misma suerte corrió Jorge Lieser Gómez, de 65 años, quien quedó atrapado en el edificio que vivía tras haber logrado sacar a siete personas de su familia.

La ayuda internacional y las promesas de fondos para la reconstrucción siguen fluyendo: Estados Unidos anunció la concesión de 2 millones de dólares, Alemania liberó recursos por más de un millón de dólares, y Australia por 500 mil dólares.

Mensajes solidarios y ofrecimientos de apoyo fueron hechos también por Cuba, Nicaragua, Ecuador y Perú, al tiempo que equipos de rescatistas de varias naciones, entre ellas México, se sumaron a las labores de socorro.

Al sismo de 6 grados Ritcher del lunes, que afectó los departamentos de Quindío, Risaralda, Valldel del Cauca, Tolima y Caldas, le han seguido 27 réplicas.

Saldo preliminar del terremoto

Ap, Santafé de Bogotá, 27 de enero n Dos días después del terremoto que el lunes pasado devastó la zona cafetalera del occidente de Colombia se habían recuperado 714 cadáveres, y la cifra de heridos ascendía a más de 3 mil 300, según informes de la Defensa Civil.

A continuación una lista de las víctimas por localidades, incluyendo datos sobre daños en algunas de ellas:

Armenia: 468 muertos, mil 248 heridos y 15 mil viviendas destruidas.

Calarcá: 109 muertos, 334 heridos y 2 mil viviendas destruidas.

Pereira: 39 muertos, 650 heridos y 3 mil viviendas dañadas.

La Tebaida: 35 muertos, 269 heridos y mil 170 viviendas destruidas.

Montenegro: 30 muertos, 250 heridos y 700 viviendas destruidas.

Circasia: ocho muertos y 42 heridos.

Barcelona (vereda del municipio de Calarcá): 14 muertos y 150 heridos.

Caicedonia: tres muertos y 65 heridos.

Pijao: tres muertos y 16 heridos.

Córdoba: dos muertos y 50 heridos.

Quimbaya: Un muerto y 45 heridos.

Cajamarca: Un muerto y 23 viviendas destruidas o dañadas.

Alcalá: Un muerto y 30 heridos.

Obando: cien heridos.

Dosquebradas: 62 heridos, 75 viviendas destruidas y 250 dañadas.

Finlandia: 28 heridos.

Salento: 19 heridos.