n Presentará en México sus dos obras más recientes
La de Seamus Heaney, una poesía revestida de metafísica
Angélica Abelleyra n Primero recorrerá la ciudad de Oaxaca y hará una visita a la zona arqueológica de Yagul, donde los cactos se hermanan con la piedra añeja, y el sonido del viento tiene mucho de la música contenida en su poesía. Allá presentará por vez primera La luz de las hojas (The light of the leaves), un trabajo al alimón con el artista gráfico Jan Hendrix, en el cual Seamus Heaney continúa con su complicidad amorosa de palabra e imagen. Luego, el también ensayista y traductor de 59 años vendrá a la ciudad de México. Aquí dará a conocer su poemario Viendo visiones (Seeing Things), un cúmulo de metáforas y de musicalidades del lenguaje que han sellado el trabajo del premio Nobel irlandés, oriundo del condado de Derry.
Tras 17 años de ausencia en nuestro país, una obra literaria menos desconocida en español, y con el peso de la fama por la obtención en 1995 del máximo galardón literario, Seamus Heaney pisará tierra mexicana el sábado 13 de febrero para iniciar una apretada agenda de seis días, durante los cuales hará lecturas de poesía y convivirá con antiguos y nuevos amigos, como los que dejó aquí, cuando participó en el Festival Internacional de Poesía de 1981, en Morelia.
Hacia un esperado encuentro con Toledo
El Instituto de Artes Gráficas de Oaxaca (IAGO) será la sede para el primer encuentro público de Heaney y sus lectores. En la capital oaxaqueña, el creador de Muerte de un naturalista lanzará al mundo, el domingo 14 por la noche, La luz de las hojas, libro de arte trilingüe (holandés, inglés, español) con un tiraje limitado que representa la continuación de su labor creativa de mano de Jan Hendrix, con quien Heaney había dado origen en 1990 a La rama dorada (The golden bough), unión del poema Seeing things y cinco serigrafías en hoja de oro hechas por el artista holandés. Esta vez, para La luz de las hojas, el paisaje de Yagul que tanto apasiona a Hendrix será trasladado a 14 serigrafías como escenario para diez poemas del continuador de W.B. Yeats y Samuel Beckett.
Posteriormente, Heaney visitará Yagul, de las zonas menos turísticas y por lo mismo más entrañables del paisaje arqueológico de Oaxaca, para encontrarse también con Francisco Toledo, el pintor que se encargó de publicar por primera vez en español al todavía poco difundido irlandés con su poemario Isla de las estaciones (Station island), lanzado por Ediciones Toledo en 1991, con prólogo y traducción de Pura López Colomé . "Heaney y Toledo están muy emocionados por la oportunidad que tendrán de conocerse en persona, ya que se admiran y respetan profundamente", dijo Hendrix, amigo de ambos creadores.
Después de su estancia en el sur mexicano, Heaney vendrá al DF a fin de presentar, el martes 16 en el Teatro de las Artes, del Centro Nacional de las Artes (CNA), la edición en español de Viendo visiones, a cargo de la Dirección General de Publicaciones del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes, traducida por Pura López Colomé para la colección Cien del Mundo.
Como portada, una obra del pintor Phil Kelly, Sin título, pero que puede ser la imagen de una barca primitiva color de oro, o bien una frágil nuez partida, o tal vez un recipiente volátil al que se le puede bautizar con cualquier nombre, nos abre a la presencia de Heaney en Viendo visiones, cuyo título original en inglés editó la casa londinense Faber & Faber Ltd., hace siete años.
En su presentación, López Colomé establece el sitio pionero que México ha tenido en la difusión de la obra poética del Nobel 1995. Recuerda que fue Homero Aridjis ųquien junto con ella, en su calidad de traductora, acompañarán al catedrático de Harvard en el CNAų el primero en editar una selección de poemas, traducidos por Verónica Volkow, tras la conclusión del Festival Internacional de Poesía 1981 que organizó en Morelia con la presencia, no sólo de Heaney, sino de autores tan notables como Jorge Luis Borges, Günther Grass y Vasco Popa, por citar algunos. Luego vino la publicación a cargo de Ediciones Toledo y, ahora, la institucional del CNCA en la que Heaney "se abandona por completo al poder de la metáfora, sin preocuparse demasiado por el peso intelectualmente calculado del contenido; a la música, como "prueba de la existencia de Dios", anota López Colomé.
Más adelante, trae a la memoria una reflexión de Heaney diez años atrás, durante una lectura en la Universidad de Harvard: "Comentó que siempre había deseado que el poema trascendiera la memoria autobiográfica, transformándose en memoria significativa. Al entrecerrar los ojos y dejar que la imagen borrosa le permitiera percibir estos significados, comenzó a ver visiones. En todos sentidos. La pluralidad que brota de este prisma, aunque en un principio hubiera sido unicidad, se instala en nuestra mirada interior, incorporándonos a una vida que es nuestra también. La realidad y el recuerdo de sus padres, cuando él corre las cortinas de la pupila, surgen despojados de connotación y, en cambio, revestidos de hondura metafórica y metafísica".
Historia, religión y lengua
López Colomé añade que historia, religión y lengua son vehículos que se unifican y pluralizan en la gran metáfora del poema que da título al volumen: "La falta de garantía ųese fluir y flotar y navegar, mezclada con obras de la voluntadų constituye el centro de todo acto humano. Habrá que extraer fe del agua ųparece decirnos Heaneyų, líquido amniótico de todos los seres, elemento bautismal que a todos redime y purifica, fría naturaleza atlántica (gaélica-inglesa) que se une a la nuestra, cálida (mexicana-española), gracias a las corrientes del Golfo de México".
Además de Isla de las estaciones y Viendo visiones, otros títulos heaneynianos traducidos al español son Norte (North) y Muerte de un naturalista (Death of a naturalist), traducidas por Margarita Ardanaz para la española Ediciones Hiperión, en 1992 y 1996, respectivamente.
Si es que no se realizan ajustes en su itinerario mexicano, tras las lecturas que encabezará, Heaney abandonará territorio nacional el jueves 18, con una estela de poesía tras de sí y una deseable promoción constante de su escritura entre los lectores mexicanos actuales y futuros.
Cuadraturas (un fragmento)*
ƑTodo ido al mundo de la luz?
Tal vez
Al leer el verso, meras formas
pueblan
El vestíbulo rutilante. De otro
modo
No lo consiguen. La lucidez
sobreviviente se blanquea
Como gusanos en hilos de
pescar que yo alzaba,
Insatisfecho aunque siempre
bien preparado
Para la nada ésa, que era sólo
eso que estaba ahí.
Aunque en realidad es un hilo
atrapado dando el latigazo,
Ese momento de la admisión
del Todo ido,
Cuando el cabo de la caña pierde
contacto y la punta babea
Y los remolinos empujan una
hoja seca por allá en silencio
Más ligeramente (parece) que
el propio paso del agua.
* De su libro Viendo Visiones