n Amalia García califica de errónea la pretensión gubernamental

El PRD se movilizará contra la privatización

Ciro Pérez, Georgina Saldierna n Dirigentes del PRD manifestaron ayer su rechazo a la propuesta gubernamental de abrir el sector eléctrico a la iniciativa privada y anunciaron movilizaciones para impedir la privatización.

El coordinador perredista en la Cámara de Diputados, Porfirio Muñoz Ledo, afirmó que tras la propuesta del Ejecutivo están las presiones de empresarios estadunidenses y el interés del gobierno del presidente Ernesto Zedillo por obtener a cambio la certificación en la lucha contra el narcotráfico.

Muñoz Ledo aseguró que el interés de abrir el sector eléctrico y presentar una iniciativa antes de la visita del presidente de Estados Unidos a México "es como una ofrenda de Moctezuma al hombre barbado y sus hombres a caballo", lo cual, dijo, es "muy denigrante".

Adelantó que su partido se opondrá absolutamente a la alteración del carácter de servicio público del sector y consideró que si se requieren inversiones adicionales, habría que encontrar las formas de financiamiento más adecuadas. "No hay ese faltante de energía eléctrica, hay algunas empresas estadunidenses que quieren invertir en electricidad y seguramente se quiere abrir a esas empresas para una inversión que no es necesaria a cambio, yo no sé de qué, de que certifiquen a México".

El legislador condenó el aparato publicitario que ocupa el gobierno federal para promover su propuesta "por la información tan errática y equivocada" y propuso que se escuche la opinión del ex titular de la Comisión Federal de Electricidad, Rogelio Gasca Neri, "a quien corrieron por no estar de acuerdo con la iniciativa presidencial, que no era perredista, sino funcionario del gobierno de Zedillo".

Por su lado, la senadora Amalia García calificó como una decisión errónea la pretensión de abrir a la inversión privada la generación y distribución de la energía eléctrica, luego de recordar que ninguna de las privatizaciones que se ha registrado ha dado buenos resultados. Puso como ejemplo el caso de Teléfonos de México, que sigue sin mejorar su servicio.

La legisladora estimó que si hubiera eficiencia y honestidad en la Comisión Federal de Electricidad, no habría necesidad de inversión privada. Propuso una reforma integral en el sector económico para evitar esta medida.

En tanto, la diputada Laura Itzel Castillo dijo que este partido no se opone a que la IP participe en la industria eléctrica, pero sí a que se modifiquen los artículos 27 y 28 de la Constitución, como propone el presidente Ernesto Zedillo, porque es "un pretexto neoliberal para privatizar lo poco que queda de la soberanía nacional".

Para capitalizar el sector eléctrico es necesario buscar otras alternativas que no impliquen cambios en la Carta Magna, manifestó, luego de señalar: "No entendemos ese afán de querer llevar a cabo este proceso de privatización planteándolo al futuro, cuando en el año 2000 se llevará a cabo la elección del presidente de la República y quien (resulte elegido) de ninguna manera podría quedar atado de manos con una iniciativa como esta".

Sobre el tema, consideró que la salida de Rogelio Gasca Neri de la CFE se debe a que no cumplió con los tiempos marcados por el secretario de Energía, Luis Téllez, para la privatización de la industria eléctrica.

Además, sostuvo Castillo Juárez que la iniciativa del Ejecutivo federal obedece a los compromisos adquiridos por Zedillo en el Tratado de Libre Comercio, por lo que una vez que se inicie el proceso de desregulación del sector eléctrico, las empresas de Estados Unidos y Canadá podrán demandar su participación al ciento por ciento.

Anunció que el PRD convocará a todos los mexicanos a la constitución de un Frente de Defensa de los Recursos Nacionales y a la realización de un gran foro para analizar el tema en busca de propuestas alternativas; por lo pronto, dijo que el próximo 11 de febrero los perredistas protestarán frente a la CFE. Desestimó asimismo que la iniciativa presidencial pueda ser aprobada por el PRI y el PAN: "Sabemos que existe una gran alianza entre esos partidos, pero también existe una gran alianza entre el PRD y el pueblo de México. Lo importante es que dentro de esta gran alianza podamos defender lo que es nuestro, y yo he dicho, a manera de broma, que es más fácil que Téllez entre al reino de los cielos a que dejemos que efectivamente la industria eléctrica se puede privatizar".

n Promueve el Presidente ante notarios su iniciativa para el sector eléctrico

Minimizan priístas riesgo de perder soberanía

n Los panistas ven ''con simpatía'' la propuesta del Ejecutivo, dicen

Sami David y Pérez Jácome n Descartan una nueva concertacesión

La dirigencia nacional del Partido Revolucionario Institucional informó que, a través de sus legisladores en el Congreso de la Unión, ese instituto político analizará ''cuidadosamente'' la iniciativa presidencial que plantea la inversión privada en el sector eléctrico, y desde ahora los senadores Sami David David y Dionisio Pérez Jácome adelantaron que los panistas ''ven con simpatía'', e incluso ''apoyan'' la propuesta del Ejecutivo, que, subrayaron, no implica ningún riesgo de ceder soberanía, pues el Estado seguirá teniendo la rectoría en esa materia.

De inmediato, el secretario de Gestión Social del tricolor, Marcos Bucio, negó que la idea original de privatizar algunas áreas fundamentales del sector eléctrico sea del Partido Acción Nacional y negó que, aun cuando panistas aceptarían votar a favor de la iniciativa presidencial, como en el Fobaproa y en la negociación del presupuesto para 1999, el PRI vaya a concertacesionar con el panismo.

Senadores y diputados priístas aclararon ayer que la propuesta de reforma al artículo 27 constitucional no implicará pérdida de soberanía o que se despojará --esta garantía es ''sólo por ahora''-- al Estado de la infraestructura para generar energía, pues la intención es que los particulares aprovechen la infraestructura existente para vender energía ''y eso no afecta, en lo más mínimo, la soberanía nacional''.

Bucio señaló que en la discusión del documento se buscará que queden claras las reglas para otorgar las concesiones y que se preserve, ''en caso de emergencia nacional'', la rectoría del Estado en ese sector.

Por su parte, Pérez Jácome explicó que con dicha reforma se transparentará el subsidio del Estado a los consumidores, pues éste seguirá existiendo ''para quienes lo necesiten'' y subrayó que no operará como hasta ahora, que prácticamente se otorga a todos los usuarios, ''tengan o no niveles de ingreso que justifiquen su entrega''.

A su vez, David apuntó que la idea es que ese sector debe servir a los que menos tienen y dijo: ''creo que eso podrá hacerse en tanto que no se grave a sectores que tienen una condición económica de mayor fragilidad''.

Añadió que podrán participar tanto capitales nacionales como extranjeros, pues se requieren 250 mil millones de pesos en los próximos seis años ųesa idea la vendió al Comité Ejecutivo Nacional del PRI el secretario de Energía, Luis Téllez, desde el 24 de agosto pasado-- para modernizar el sector. ''Si no los tenemos, tendremos que obtenerlos de endeudamiento externo o de sectores adicionales''.

''No comemos de los tabúes''

En conferencia de prensa, Bucio Mújica dijo que el Partido Revolucionario Institucional buscará ''cuidar'' que el Estado no pierda el control del sector y que se fortalezca la planta laboral. ''La rectoría del Estado no choca con la modernidad'', enfatizó el dirigente priísta.

--En esa lógica, sólo les faltaría privatizar Pemex --deslizó un reportero.

--No, porque son conceptos diferentes. El petróleo es un recurso que está en el subsuelo nacional y tiene un carácter social diferente. Pero hay que ir rompiendo tabúes.

--Perdón, diputado, pero esos tabúes los crearon ustedes mismos, los gobiernos priístas.

--Sí, pero los tabúes hay que quitarlos y hay que apostarle al desarrollo productivo de México. No vamos a comer de los tabúes. El PRI tiene una nueva cara, moderna, y tiene que coadyuvar al desarrollo nacional --sostuvo.

Por su parte, el coordinador de los diputados priístas, Arturo Núñez Jiménez, calificó el planteamiento presidencial como ''responsable, oportuno y previsor'' para que el país no sufra en el futuro mediato carencias en el abasto de energía eléctrica.

Afirmó que no se trata de un retiro del Estado del sector, sino de una reforma de largo aliento que busca atender las necesidades futuras del país.

En el mismo sentido, diputados priístas del grupo Reflexión advirtieron que no habrá ''ni línea ni dogma'' en el análisis y discusión de la iniciativa presidencial. Sostuvieron que a fin de estar en posibilidades de modernizar ese sector, y consideraron importante evaluar los pros y los contras de abrir algunas áreas fundamentales de la producción de energía eléctrica a los capitales privados.

Mientras, entrevistado en el aeropuerto, el senador Hugo Andrés Araujo planteó que las fracciones partidistas en el Congreso de la Unión pugnarán porque el gobierno mantenga el control fundamental de la industria eléctrica.

Y consideró: ''los diferentes partidos no podrán evadir los debates, pero debemos reconocer que existe un elemento común que es una preocupación nacionalista, que consiste en que esta reforma cuide el interés fundamental de la nación''. (Víctor Ballinas, Enrique Méndez, Ciro Pérez y Gustavo Castillo)