n La fianza, de $164 mil; se desvanecen los cargos
Obtienen su libertad bajo fianza los líderes presos de la sección 9
Claudia Herrera Beltrán n A 34 días de haber sido apresados por irrumpir en el Senado de la República, los cinco maestros dirigentes de la sección 9 obtuvieron en la madrugada su libertad provisional mediante una fianza de 164 mil pesos, después de que el juzgado primero de distrito declarara el desvanecimiento de los cargos de secuestro y robo.
En medio de la algarabía de decenas de profesores congregados frente al Reclusorio Norte, los docentes salieron, aunque seguirán procesados por el delito de motín. Además, la negativa del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) a reconocer a los dirigentes de la sección 9, origen del problema magisterial, aún no se resuelve después de casi siete meses y numerosas movilizaciones. Así, después de tres marchas, dos de ellas a Los Pinos y una a Gobernación, así como numerosos plantones frente a la PGR y una huelga de hambre de cuatro profesores, los maestros Blanca Luna (secretaria general de esa sección), María Refugio Jiménez (secretaria de Prensa) y los profesores Elio Bejarano, Néstor Trujano y Alonso Vargas salieron libres.
El excarcelamiento de los docentes se agilizó una vez que la Procuraduría General de la República (PGR) se manifestó a favor de que se desvanecieran los cargos de secuestro (el más grave sin derecho a fianza) y robo, mientras que ratificó el delito de motín, cuya penalidad es de seis meses a siete años de prisión y que será impugnado por la defensa de los profesores.
Las diligencias para la liberación de los profesores duraron casi 12 horas, tiempo en el que decenas de maestros permanecieron en plantón, y por la noche llevaron a cabo una colecta para juntar 20 mil pesos para completar la suma de la fianza.
Desde temprano, el ambiente de nerviosismo que privaba en el magisterio capitalino se tornó optimista y por la tarde, festivo. A las 10 horas, el subprocurador de Averiguaciones Previas de la PGR, Everardo Moreno, se presentó a la audiencia y declaró que no estaba justificado procesar a los maestros por el delito de secuestro, pues para que ocurriera esto, "los profesores debieron exigir un rescate o amenazar de muerte" a los senadores y trabajadores, lo cual fue negado por los legisladores en su ampliación de declaraciones.
Por su parte, el diputado perredista Jesús Martín del Campo, quien participó en las gestiones para el excarcelamiento de los profesores, declaró que con este hecho se hacía justicia a la sección IX y se ponía fin a un encarcelamiento de tipo político.
En cambio, el suprocurador Moreno rechazó que el juicio en contra de los maestros fuera un asunto político y de que el propósito fuera dar un escarmiento a los mentores. "No son los gritos, no son los adjetivos los que les van a dar contenido a los delitos, es la esencia de las conductas", señaló el funcionario.
Durante la audiencia y en presencia de un grupo de maestros, la PGR había reiterado su acusación de motín al considerar que la irrupción de los profesores en el Senado de la República --el pasado 11 de noviembre-- fue tumultuario y se hizo violentando el orden público.
Esta movilización se realizó en el marco de las protestas de la sección 9, que agrupa a 58 mil profesores de prescolar y primaria, para exigir el reconocimiento de su dirigente.
Ante la postura de la PGR y del abogado defensor, el juez primero de distrito en materia penal, Miguel Angel Aguilar López, indicó que daría a conocer su resolución en el transcurso de ayer, lo que motivó que a las 11 horas los profesores que se aglutinaron en el juzgado se retiraran a las puertas del reclusorio a aguardar el dictamen.
Después de casi siete horas de espera, casi a las siete de la noche, el juez Aguilar notificó a los profesores el desvanecimiento de los delitos de secuestro y motín y les informó que podrían salir en libertad provisional; sin embargo, fijó una fianza de 300 mil pesos, cantidad que según la defensa de los profesores era muy elevada.
Al no aceptar pagar esta suma de dinero, los abogados volvieron a dialogar con el juez, que finalmente reconsideró y determinó que cada maestro pagará 32 mil 834 pesos, cantidad que sumó por los cinco profesores 164 mil 171 pesos. Poco después de las 22 horas, los profesores recibieron su acta de libertad y a la media noche y al grito de "presos políticos, libertad", salieron de la penitenciaría en medio de efusivas porras, y entre cantos y música de mariachi.