n Aduce falta de recursos económicos


La Semarnap suspendió curso

de protección contra incendios

Matilde Pérez U. n Por falta de presupuesto, la Secretaría de Medio Ambiente, Recursos Naturales y Pesca (Semarnap) suspendió el curso de protección contra incendios forestales que impartirían delegados de la dependencia en la ciudad de México, Morelos y Guerrero, e instructores de la Comisión de Recursos Naturales del gobierno capitalino (Corena), de la Dirección Forestal y de la Red Mexicana de Organizaciones Campesinas Forestales a integrantes de diversas organizaciones campesinas.

El director Forestal de la Semarnap, Víctor Sosa Cedillo, informó que el curso "se suspendía hasta nuevo aviso", debido a la falta de autorización del ejercicio presupuestal para este año.

En un documento aprobado en la novena sesión del Consejo Consultivo Nacional para el Desarrollo Sustentable, aceptado por la titular de la Semarnap, Julia Carabias Lillo, se señala que la persistencia de los conflictos agrarios ųparticularmente en las regiones indígenasų, el impulso y el apoyo institucional a la ganadería extensiva, la falta de vinculación del programa Alianza para el Campo con otros instrumentos de planeación y la "tardía e insuficiente" asignación de recursos para prevenir y atender los incendios forestales, contribuyen a que el número de conflagraciones se incremente.

Otros de los factores que inciden en el problema, señalaron los consejeros en el documento, son: expansión acelerada del cultivo, tránsito y tráfico de estupefacientes en las regiones marginadas, extrema pobreza de la mayoría de los propietarios de las zonas boscosas e inaccesibilidad física a esos lugares. Por ello, señalaron que su análisis y recomendaciones pretenden ser un llamado a la sociedad y a las instituciones sobre la urgente necesidad de integrar un gran movimiento nacional dirigido a la defensa, conservación y aprovechamiento de los recursos naturales.

Urgieron al gobierno federal a tener un mayor control y conducción de los procesos de producción en el campo, a fin de evitar los fuegos descontrolados, pero también advirtieron que mientras persista una insuficiente e inadecuada valoración de los servicios ambientales del sector forestal no será posible un aprovechamiento sustentable de esos recursos.

"Los esfuerzos para revertir las tendencias han sido insuficientes. Además, las acciones aplicadas no están enmarcadas en una estrategia integral y articulada" dirigida a resolver las causas que llevan a los campesinos a utilizar el fuego como recurso para limpiar sus parcelas.

Las regiones indígenas son las menos atendidas ų"son una parte de la franja sin control ni alternativas en la que por supervivencia se produce la deforestación y los incendios"ų, pues los recursos de fomento agropecuario se han concentrado hacia los sectores "más pudientes de la economía agropecuaria", se agrega en el documento Causas estructurales de los incendios forestales.

Se advierte: la "falta de una estrategia de rescate, fortalecimiento, modernización, cambio e intercambio tecnológico, especialmente de la economía campesina, frente a los procesos de globalización, liberación y apertura, producto del TLC", son parte de las causas por las que se han agudizado los incendios forestales.

A eso se agrega la insuficiencia del tratamiento de los aspectos de orden ecológico y de un esquema integral de protección y manejo de los recursos naturales en los reglamentos agrarios, estatutos comunales y normas municipales ųincluso en la propuesta de la Procuraduría Agraria esos aspectos quedaron marginadosų y la falta de reconocimiento a la estrategia oficial de combate a los incendios.

Por su parte, la Semarnap reconoció que es insuficiente la infraestructura para la detección oportuna de los incendios, que hay una carencia tecnológica en los sistemas de monitoreo y evaluación y que faltan recursos humanos calificados para detectar a tiempo las conflagraciones.

Tras el análisis de las causas de los incendios, los consejeros presentan 18 recomendaciones a la Semarnap, entre ellas: revisar y modificar la norma de uso del fuego, la cual incluya medidas para corresponsabilizar a los propietarios de los terrenos forestales y contenga las particularidades de las zonas y tipos de vegetación; integrar un gabinete de desarrollo rural y un sistema de consejos para lograr un desarrollo rural sustentable; elaborar un programa nacional de mejoramiento de los sistemas agropecuarios para disminuir sus impactos ambientales negativos; solucionar los conflictos agrarios, y realizar estudios interinstitucionales para evaluar el impacto de las políticas en el desarrollo del campo y, a partir de ello, determinar si procede la revisión de las estrategias de apertura comercial y un nuevo programa de modernización del agro que privilegie la seguridad alimentaria y cambie las relaciones comerciales, sobre todo en las regiones campesinas e indígenas.

Sugieren que el presupuesto para el sector se entregue de manera ágil, suficiente y oportuna, y a la vez se elabore un programa de gastos escalonados, para que se apliquen de acuerdo con la intensidad con que se presenten los incendios forestales cada año.

Enfatizaron la necesidad de que la campaña contra los incendios en 1999 se convierta en "una gran movilización del conjunto de la sociedad rural para la defensa y manejo de los recursos naturales, y que apunte hacia la construcción de un proyecto nacional estratégico de desarrollo rural integral y sustentable, con miras a la transformación del campo mexicano".

 

Se incrementa 75% el presupuesto

del Fondo Nacional de Desastres

 

En tanto, a fin de combatir catástrofes naturales, y en especial los incendios que el año pasado provocaron estragos en los bosques del país, para 1999 se incrementó el presupuesto 75 por ciento, por lo que el Fondo Nacional de Desastres ejercerá 3 mil 640 millones de pesos, informó el coordinador nacional de Protección Civil de la Secretaría de Gobernación, Guillermo Ruiz de Teresa.

Agregó que las dependencias y organismos del gobierno federal integrados al Sistema Nacional de Protección Civil ya se encuentran preparados para enfrentar la temporada de incendios forestales, de los cuales, en lo que va del año, se han registrado 37, afectando a 98.3 hectáreas.

Comparativamente, en 1998 ya se habían registrado 409 incendios, con una superficie dañada de mil 486 hectáreas, según cifras oficiales. Esto representa un decremento en el número de incendios de 91 por ciento y de 93 puntos porcentuales de la superficie afectada.

La dependencia informó que la mayor parte de los nuevos recursos se canalizará a la difusión, a fin de prevenir posibles incendios. Esto es, se espera realizar una campaña para que la población sea más cuidadosa e impida mayores conflagraciones en este año.