ASTILLERO Ť Julio Hernández López
Es difícil entender los mecanismos que mueven el sentido del humor del presidente Zedillo. Ayer, en Tonalá, Jalisco, se ganó fuertes alocuciones adversas al mezclar (queriendo hacer bromas) asuntos políticos con deportivos, y consiguió en su contra un coro masivo gritando: "šChivas!, šChivas!, šChivas!", cuando presumió los triunfos de su equipo de futbol favorito, el Necaxa, sobre el jalisciense Atlas.
Siempre contento, el presidente Zedillo explicó a los reunidos en un acto educativo que el gobernador Alberto Cárdenas Jiménez se había quejado de que ya llevaba varios meses sin visitar aquella entidad occidental.
El reclamo, aseguró el Presidente de la República, se lo hizo el gobernador con un estilo "entre muy formal y medio enojado, por no decir más feo". El juego de palabras provocó risas entre la audiencia, por lo que el Presidente preguntó, como si le extrañase la reacción: "ƑPor qué se ríen ustedes?"
Alentado por la actitud de su público, el presidente Zedillo avanzó en su elaboración humorística (rutina tan grata y tan usada en Estados Unidos en las reuniones políticas y sociales, y tan inusual en México en actos políticos y, sobre todo, en los presidenciales), y dijo que le había explicado al gobernador Cárdenas Jiménez que la falta de visitas era culpa del propio mandatario estatal, debido a "su resentimiento por las repetidas victorias del Necaxa sobre el Atlas".
"Voces inaudibles"
Según el boletín de prensa elaborado por la oficina presidencial, a esas palabras del doctor Zedillo correspondieron "voces inaudibles" que, escuchadas por oídos menos oficialistas, correspondieron en realidad a una rechifla y a abucheos.
Contento, alegre, el Presidente quiso revertir el sentido de la reacción: "ƑYa oyó, gobernador, lo que dicen del Atlas?". Entonces se levantó un coro que repetía el sobrenombre de batalla del Guadalajara.
"ƑTodavía tengo vestigios de provocador, verdad?", continuó el Presidente. "Pero, en fin --prosiguió, y al darse cuenta de que alguien defendía a las Aguilas de Televisa, señaló: Uno del América, šPamba!". Al ver que había gente dispuesta a cumplir las indicaciones presidenciales, frenó: "šNo, no, no!"
El episodio terminó cuando Zedillo dijo entre risas que el gobernador jalisciense le había asegurado que "mañana va a expedir un decreto mediante el cual ya no se le permitirá al Necaxa jugar en tierras jaliscienses".
Otros momentos de buen humor
Los reporteros de la fuente presidencial tienen una amplia colección de anécdotas en las que se muestra lo difícil que es combinar la fuerza de la máxima investidura oficial con los retozos verbales.
Días atrás, por ejemplo, en un estremecedor momento de diversión, el Presidente hizo al secretario de Salud, Juan Ramón de la Fuente, anunciar que los candados pirístas en materia de candidaturas presidenciales (y de gobernadores) serían derogados. Luego, al final de esa gira por Campeche, el Presidente alzó los brazos de tres de sus secretarios, el de Salud (virtualmente destapado como aspirante ese mismo día), el de Desarrollo Social y el de Comunicaciones y Transportes.
El Félix...
Meses atrás, en una escena que resultaría premonitoria, el presidente Zedillo también haría una broma en Acapulco, cuando visitaba el estado de Guerrero para supervisar la aplicación de fondos para damnificados del huracán Paulina.
Cuando un pequeño, mal vestido, le hizo saber al Presidente que no le gustaba la comida que le daban los soldados, y que le gustarían cosas diferentes, el doctor Zedillo dijo al niño (frente a sus acompañantes, que celebraban las palabras mayores), que no hiciese osos, que no le hiciese al Félix Salgado Macedonio.
Lugar ocupado
(Ayer, en Tonalá, se atravesó otro niño en el discurso presidencial. Decía el doctor Zedillo: "Por eso, el gobierno de la República considera el fortalecimiento de la educación... šOye, te vas a caer, eh!... Que bueno que te bajaste. Además, me dis- traes... A ver: bajen a ese chaparrito para acá. Sí, tú, párate ahí. No se vaya a caer. Vente para acá, aquí en mi lugar. Cuídame ese lugar, que nadie lo vaya a querer ocupar mientras estoy ocupado")
Pero, también, momentos
de gran seriedad
Ayer mismo, en Los Pinos, al tomar la protesta a la nueva directiva del Congreso del Trabajo, que ahora encabeza el ínclito Leonardo Rodríguez Alcaine (de quien, en esta ocasión, nos ahorraremos los sobrenombres de La Güera, El Periquín, El cuñado de los periodistas y otros por el estilo), el presidente Zedillo habló de la apertura del sector eléctrico (electricistas, Necaxa) a particulares.
Dijo el Presidente que hay quienes, "por ignorancia o por dogmatismo, se equivocan" al suponer que con la reforma en el sector eléctrico el Estado mexicano perdería su capacidad rectora y descuidaría sus responsabilidades sociales.
Por el contrario, aseguró el doctor Zedillo, "la reforma se plantea fortalecer la capacidad de conducción de la política energética y de regulación de la industria".
Mientras el Presidente así hablaba, crecía la oposición a esa reforma. No sólo desde el flanco perredista, donde se anuncia una manifestación de protesta el próximo 18 de marzo, sino también desde las filas priístas, tanto de grupos como de la Corriente Renovadora como de diputados y senadores, que no están de acuerdo con las propuestas del presidente Zedillo y del secretario Luis Téllez.
El día del Ejército; el general Gallardo
Hoy, Día del Ejército, se realizará un acto en el Zócalo de la ciudad de México, a las 5 de la tarde, para solicitar al gobierno mexicano, y en especial al presidente Zedillo, que se dé cumplimiento pleno a la recomendación 4396 de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, referida a las múltiples y graves violaciones al estado de derecho cometidas para mantener en prisión al general José Francisco Gallardo, a quien se ha castigado con cárcel y aislamiento por demandar un ombudsman que defienda los derechos de los militares.
Después de que, en febrero y marzo de 1998, un consejo de guerra sentenció a 28 años y 8 meses de cárcel al general Gallardo, se solicitó la apelación ante el Supremo Tribunal Militar. Tal apelación debería haberse desahogado en quince días después de ser tramitada, pero con obvio sentido dilatorio fue ratificada la sentencia luego de nueve meses de un supuesto estudio de la causa penal.
Ahora, el general Gallardo, junto con el abogado Félix Garza Martínez, prepara una solicitud de amparo de la justicia federal. Mientras tanto, el general ha sido sacado del aislamiento en el que se le mantuvo durante largo tiempo pero, según sus familiares, los demás internos son amenazados para que no tengan ningún contacto con él. Tampoco, según esa fuente, le dejan pasar libros ni periódicos, y se trata de impedir que siga escribiendo artículos. A raíz de la aparición del Comando Patriótico de Concientización del Pueblo, el alto mando ha querido involucrar al general Gallardo con tales hechos, sin poder demostrar nada hasta la fecha.
Hoy, pues, a las 5 de la tarde, en el Zócalo de la ciudad de México, un acto más de apoyo a un hombre que ha sido víctima de las más increíbles aberraciones jurídicas para mantenerlo en prisión y para que sus castigos den ejemplo a otros oficiales de lo que sucede a quienes defienden sus ideas dentro del cuerpo castrense.
Astillas: El corresponsal de La Jornada en Guanajuato, Manuel Carrillo, reporta que el gobernador Vicente Fox no podrá presentar su examen profesional hoy, como estaba previsto, debido a la huelga de la Universidad Iberoamericana, en cuyo plantel Santa Fe, de la capital del país, se realizaría el trámite escolar. El retraso permitirá que los adversarios del aspirante presidencial insistan en la versión de que es totalmente irregular que el mandatario presente su examen profesional 30 años después de haber cursado la licenciatura en administración de empresas, cuando en ese lapso habrían cambiado --según esa versión-- los programas de estudios, los contenidos de las materias y los enfoques académicos.
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