n Se requieren más inversiones para mantener la confiabilidad de la industria, dice en un comunicado


Existen reservas de electricidad hasta el 2000, reconoce la SE

El país cuenta con el margen de reserva de electricidad necesario para satisfacer la demanda hasta el año 2000, como resultado de la aplicación de medidas, desde 1997, que han representado la inversión de recursos públicos por 10 mil millones de pesos ''que no se tenían programados'', así como ampliaciones presupuestales para la Comisión Federal de Electricidad (CFE). Sin embargo, afirmó la Secretaría de Energía, es necesario invertir más en el sector para mantener la confiabilidad del sistema eléctrico nacional y contar con un adecuado margen de reserva operativo.

La Secretaría de Energía y la CFE emitieron ayer un comunicado conjunto como parte de la campaña para justificar la privatización del sector eléctrico, con la intención de aclarar la información difundida en relación al margen de reserva en la capacidad de generación eléctrica y el riesgo de que se presente un eventual desabasto en el país.

En este sentido, argumentaron que ante el imprevisto crecimiento de la demanda, a mediados de 1997 se detectaron requerimientos adicionales de generación y de infraestructura de transmisión y distribución, cuyo desarrollo se inició con ''un esfuerzo extraordinario en materia presupuestal que afectó otros rubros del gasto público y que permitió minimizar el riesgo durante la presente administración''.

Asimismo, ambas dependencias explicaron que para mantener la confiabilidad del sistema eléctrico nacional se requiere tener un margen de reserva operativa adecuada, es decir, la capacidad no utilizada pero disponible en todo momento para hacer frente a constantes cambios en la demanda de energía,''porque el sistema debe ser capaz de soportar fallas y accidentes mientras continúa suministrando electricidad normalmente".

Por lo anterior, en abril de 1997 se puso en marcha el Programa de Acción Inmediata (PAI), que incluyó la construcción de cinco plantas generadoras de energía de 150 megawatts (MW) cada una, y que ya se encuentran en operación, con los nombres de El Sauz, Hermosillo, Huinalá, Río Bravo y Rosarito.

Asimismo, se aceleraron los trabajos de 13 obras ''críticas'' en el sistema de transmisión y se realizaron 39 obras de subtransmisión, lo que representó un gasto por más de 10 mil millones de pesos entre 1997 y 1999, ''que no se tenían programados''.

 

Diagnóstico presentado por la CFE

Durante 1998, por disposición de la Secretaría de Energía la CFE presentó un diagnóstico sobre la situación de la generación y demanda de energía, en el que se concluyó que de no emprender acciones inmediatas durante el verano de 1999 no se alcanzarían las condiciones de margen de reserva en el norte y noreste del país, al igual que durante el invierno, en el área central.

Por ello, se iniciaron obras para mejorar el margen de reserva, entre las que sobresalen la repotenciación de la central termoeléctrica Valle de México, la instalación de una nueva planta generadora a turbogas en el área central y la rehabilitación de la planta generadora Jorge Luque, de Luz y Fuerza.

Además, se definió la necesidad de fortalecer las inversiones en transmisión y distribución, por lo que en 1998 se otorgó una ampliación presupuestal para la Comisión Federal de Electricidad por mil 500 millones de pesos y en 1999 se otorgaron recursos adicionales por 436 millones de pesos.

Sin embargo, señaló la Secretaría de Energía, es necesario continuar con la modernización de la capacidad de generación, la infraestructura de transmisión y distribución y hacer frente a ''los grandes retos que impone el año 2001'', a lo que responde la propuesta de apertura del sector eléctrico. (Miriam Posada)