n Preparativos en Polhó
Pese a la diáspora indígena, avanzan los trabajos de la consulta zapatista
Hermann Bellinghausen, enviado, Polhó, Chis., 23 de febrero n Siendo Polhó un pueblo de muchos pueblos, resumidos en nueve campamentos de desplazados del propio municipio de Chenalhó, los delegados que salgan de aquí para la consulta nacional zapatista provendrán de muchas comunidades. De esta manera, aquí se designan 130 delegados, en asambleas por pueblo y por campamento. Para que se entienda, se puede mencionar un caso: la comunidad de Tzanembolom estaba conformada por 140 familias, hasta el momento en que aparecieron los grupos paramilitares priístas y se inició el éxodo de los seguidores del municipio autónomo. Ahora viven allí menos de 50 familias. El resto, 96 familias, o sea, la mayoría, viven en los campamentos de Polhó; 365 personas en total.
Del mismo modo, hay delegados que representarán a Chimix, Canlolal y otros pueblos hoy en poder de los paramilitares, y rodeados por el Ejército federal y la Seguridad Pública.
Santana, representante del Concejo Autónomo de Polhó, informa que los paramilitares de Tzanembolom ``ya se aprovecharon de toda la cosecha de café de los compañeros desplazados''. Así como antes ``se aprovecharon de las pertenencias que quedaron'', al salir los hoy desplazados.
``También destruyeron las casas, sacaron y vendieron la lámina de los techos''. En este saqueo, ``lo mismo hay un campamento del Ejército federal que otro de la Seguridad Pública'', apunta Santana.
``Los compañeros que van a ir a la Consulta se están preparando con grupos de estudio'', refiere Santana. ``Lo que ora se está trabajando también son las brigadas de promotores. También van a los pueblos priístas, para explicar a todos.
Claro que algunas comunidades son inexpugnables para estas brigadas. Como apunta Santana, ``hay pueblos donde no pasarán las brigadas porque siguen amenazados de los paramilitares''.
Y otra vez pone el ejemplo de Tzanembolom: ``Allí son unos 15 los paramilitares armados, pero hacen amenazas, y hace poco golpearon unos compañeros en Pantelhó'' (la cabecera del municipio vecino a Chenalhó), y les dijeron que en Tzanembolom (próximo a Pantelhó) no permitirán la presencia de brigadas para la Consulta.
``Por eso no es necesario ir allí, mejor se evitan problemas'', dice Santana. Y señala que los paramilitares de dicha comunidad son Agustín Arias Hernández, Javier Pérez Gómez y los hermanos Gómez Guillén: José, Eulogio, Ovidio, Celso y Jacobo. ``También son de los que hicieron la preparación de lo de Acteal''.
Toda esta carga llevarán los delegados tzotziles de Chenalhó hasta los lugares de la República donde los lleve la realización de la Consulta. Testimonios de carne y hueso, podría decirse.
``Muchos hablan poco castilla'', advierte Santana, ``pero igual van a hablar con la gente de otros lugares''. Como en todas las comunidades rebeldes, aquí también operará la solidaridad de los que se queden para con las familias y las faenas de los que se van.
Santana anuncia que en las próximas semanas se realizarán concentraciones informativas de la Consulta en otras comunidades del municipio. ``Presentarán al público teatro, bailes, canciones y algo de explicación para la Consulta. Esperamos que no haya problemas, no tenemos esa intención''.
Los delegados de Polhó para recorrer el país ``todavía no se terminan de preparar'', apunta Santana. ``De la Consulta esperamos que haiga resultados para nuestros derechos indígenas. Y ojalá que salgan los militares de nuestras comunidades. Están nomás para chingarnos y apoyar los paramilitares''