n El suministro de los fondos se inició en 1996
En 3 años, EU destinará 134 mdd
para la lucha mexicana antinarco
Jim Cason y David Brooks, corresponsales, Washington, 23 de febrero n El gobierno de Estados Unidos trasladará unos 32 millones de dólares en asistencia antinarcóticos a México durante el año fiscal 1999 y, en un periodo de tres años, que concluye en septiembre próximo, habrá otorgado un total de 134 millones en apoyo de programas antidrogas en el país vecino, según datos compilados por La Jornada, provenientes de las diversas agencias que participan en estos programas de asistencia.
Estos fondos incluyen lo invertido en capacitación y equipo por el Departamento de Estado y el Pentágono, así como las compras hechas por México de equipo estadunidense a precios subsidiados por medio del Programa de Ventas Militares al Exterior.
Empezando en 1996, el Pentágono ha otorgado el monto más grande de la asistencia estadunidense a México por medio de su programa para brindar equipo y capacitación a militares mexicanos para operaciones antinarcóticos.
El programa de capacitación para militares mexicanos vence en septiembre del año en curso, y funcionarios estadunidenses informan que todavía no se ha llegado a un acuerdo sobre un nuevo programa de capacitación.
Funcionarios con conocimiento del programa refieren que el Pentágono también brinda a los participantes equipos personales, como chamarras de vuelo, trajes para paracaidistas y equipo de visión nocturna y de comunicaciones.
Un vocero del Pentágono informó a La Jornada que esa institución espera gastar 7.9 millones de dólares en este programa en el año fiscal 1999 (octubre 1998 a septiembre 1999), y ya gastó 13.1 millones en 1998 y 10.7 millones en 1997. Estados Unidos también otorgó equipo militar "sobrante", principalmente helicópteros UH-1H, valuados en 24 millones de dólares en 1997.
México también ha sido el participante más grande de América en el Programa Internacional de Educación y Capacitación Militar en el que oficiales mexicanos son capacitados en escuelas militares en Estados Unidos (este programa no es exclusivamente para operaciones antinarcóticos). En el año fiscal 1999, el presupuesto asignado para este rubro fue de un millón de dólares, el mismo monto que se le dedicó en 1998 y 1997.
Bajo el programa Ventas Militares al Exterior, al gobierno mexicano se le permite comprar equipo directamente al Pentágono para la lucha antidrogas. Según la oficina de Asuntos Político-Militares del Departamento de Estado, que monitorea este programa, el valor calculado de ventas a México en 1999 será de 15 millones.
El otro canal principal de la asistencia antinarcóticos estadunidense a México se ofrece por medio de la oficina de Asuntos de Narcóticos Internacionales del Departamento de Estado, y consiste de capacitación y programas de intercambio entre oficiales y funcionarios de ambos países y apoyo e intercambios para permitir que integrantes del Poder Judicial mexicano puedan visitar Estados Unidos, así como financiamiento para la capacitación en temas de lavado de dinero de la Secretaría de Hacienda.
El presupuesto para esos programas del Departamento de Estado se ha incrementado de 5 millones de dólares en 1997 y en 1998 a unos 8 millones para el año fiscal 1999, y 10 millones programados para el año 2000.
Sin embargo, la efectividad de toda esta asistencia es precisamente lo que se encuentra sujeto a un intenso debate en Washington en estos días, donde el gobierno de Clinton y el Congreso se preparan para el proceso anual de la certificación de la cooperación antinarcóticos de México y otros países.
Según las agencias de seguridad pública estadunidenses, el nivel de la corrupción del Poder Judicial mexicano continúa siendo alto. Un funcionario de una de esas oficinas declaró al diario Washington Times que uno de los banqueros arrestados a raíz de la operación Casablanca, Alfredo García Suárez, informó a agentes encubiertos que él manejaba cuentas bancarias secretas para agentes de la policía mexicana que protegían a narcos en México.
Varios funcionarios de las agencias estadunidenses consultados por este diario han expresado preocupación ante versiones de que Clinton otorgará una "plena certificación" a México cuando anuncie su decisión en los próximos días.
Sobre el tema, un funcionario declaró al Washington Times esta semana: "Esta certificación no es más que una bofetada a la cara" para los agentes que conocen México. Otro citado por el mismo rotativo expresó: "Es desmoralizador ver a funcionarios de Washington volar a México para dar abrazos y besos y decirle a los funcionarios mexicanos que están haciendo una gran labor".