n Drucker Colín encabeza nuevamente el equipo
Descubren una nueva técnica para reducir síntomas del Parkinson
n Lo padece 1 por ciento de los mayores de 50 años: el neurofisiólogo
Patricia Vega n Aunque se desconocen las causas, cuando en el cerebro la sustancia nigra deja de producir el neurotransmisor llamado dopamina, provoca el desorden motriz conocido como Mal de Parkinson, en- fermedad que en cifras globales afecta aproximadamente a uno por ciento de población de más de 50 años de edad.
Si hace poco más de una década el neurofisiólogo René Drucker Colín saltó a la fama mundial al iniciar los trasplantes autólogos de médula suprarrenal para dotar al cerebro de células productoras de dopamina, ahora el científico mexicano vuelve a encabezar a un grupo de investigadores de diversas instituciones que reportan una nueva técnica que reduce los síntomas del Mal de Parkinson: cultivar en el laboratorio células cromafines a las que se aplican campos magnéticos de baja frecuencia para que se conviertan en células tipo neuronal y produzcan dopamina.
"Una vez que tenemos esas células ya diferenciadas--explica Drucker Colín-- hacemos una suspensión que ese día se lleva al quirófano; se le hace al paciente un pequeñisimo trépano en el cráneo y se le inyectan las células que se prepararon en el laboratorio. Es un procedimiento quirúrgico muy sencillo practicado con anestesia local y que no dura más de media hora, a diferencia de los trasplantes iniciados hace 12 años, que implicaban dos cirugías muy agresivas sobre todo para personas que a causa de la enfermedad han perdido cierta calidad de vida".
Leticia Verdugo-Díaz, Consuelo Morgado-Valle, Gonzalo Solís-Maldonado, Rodolfo Ondarza, Catherine Boll, Bariela Miranda, Gene-Jack Wang y Nora Volkow son los coautores de reporte de investigación que, sin ser considerado como panacea o solución definitiva, es presentado por el jefe del departamento de Fisiología de la Facultad de Medicina de la UNAM como una opción "razonablemente buena" para reducir los síntomas del Parkinson un tiempo más prolongado, sin usar los medicamentos cuya efectividad es reducida. "Lo que queremos hacer en un futuro --agrega-- es determinar si nosotros podríamos congelar las células ya diferenciadas para después implantarlas en el paciente. Si el procedimiento tiene éxito podríamos tener un banco de células congeladas que funcionarían como si fueran frescas. Ya hemos probado el procedimiento en ratas, y pensamos que en el ser humano sería igual, pero aún no lo sabemos".
Por lo pronto, éste es el tema del reporte preliminar que se incluye como uno de los artículos originales en la revista Archives of Medical Research, que hace 29 años se iniciara como una publicación local bajo el nombre de Archivos de Investigación Médica, y que este año inicia una nueva etapa en la que, gracias a la calidad de sus artículos y edición totalmente en inglés, ha sido incluida por la compañía Elsevier Science en el grupo de sus publicaciones biomédicas internacionales. Es así como a partir de este año la revista será dirigida y editada desde México (con financiamiento del Instituto Mexicano del Seguro Social y apoyo del Consejo Nacional para la Ciencia y la Tecnología) y publicada por Elsevier Science en Nueva York, mediante un convenio IMSS-Elsevier que garantiza la distribución mundial de sus cinco mil ejemplares.
El primer número de esta nueva época se presenta hoy a las 19:30 horas en el Colegio de San Idelfonso con la participación de Juan Ramón de la Fuente, secretario de Salud; Genaro Borrego Estada, director general del IMSS; Marie McVeigh, del Institute for Scientific Information (ISI); Paul Weislogel, de Elsevier Science; René Drucker Colín en su calidad de vicepresidente de la Academia Mexicana de Ciencias y Mario Madrazo Navarrro y Onofre Muñoz Hernández, por parte del IMSS.