n No convocar al Consejo Universitario, plantean 24 de sus miembros


Piden a Barnés de Castro realizar una consulta sobre el alza de cuotas

n Reiteran estudiantes invitación al rector a participar en un debate el próximo 2 de marzo

María Esther Ibarra n A través de una misiva, un grupo de 24 integrantes del Consejo Universitario solicitó ayer al rector Francisco Barnés de Castro no convocar a ese órgano y abrir una consulta durante tres meses para debatir el incremento de las cuotas, si quiere evitar una confrontación entre la comunidad universitaria.

Asimismo, representantes de organizaciones estudiantiles ratificaron su emplazamiento al rector Barnés de Castro, para que este próximo martes 2 de marzo asista al auditorio Che Guevara, de la Facultad de Filosofía y Letras, y debata de cara a la comunidad su iniciativa de modificar el Reglamento General de Pagos. De no hacerlo, "estará colocando a la UNAM en un conflicto que puede alcanzar otras dimensiones", advirtieron.

Luego de entregar la carta en la oficina del rector --ubicada en el sexto piso de la torre de la rectoría--, José Luis Cruz, consejero universitario de la Facultad de Ingeniería, instó a Barnés de Castro a frenar la "línea dura" que --dijo--existe entre algunos miembros de su staff, que "están apostando" a un enfrentamiento entre los universitarios ante la falta de consenso por el alza de las cuotas.

Bolívar Huerta, de la Red de Estudiantes Universitarios, e Higinio Muñoz, del Comité Estudiantil Metropolitano (CEM), también alertaron sobre una posible provocación por parte de algunas autoridades universitarias con miras a dividir al movimiento. Sin embargo, el primero identificó a Francisco Ramos Gómez, secretario de Asuntos Estudiantiles, como el autor de intentar montar una confrontación; mientras que el segundo responsabilizó a Salvador Malo, secretario de Planeación.

Uno de los académicos que públicamente se han manifestado en contra de la actualización de las cuotas, Javier Torres Parés, de la Facultad de Filosofía y Letras, coincidió con los estudiantes. Sin embargo aclaró que no se puede hablar de una provocación.

"Mas bien, el rector Barnés está mal asesorado, porque hay gente (funcionarios) que no han comprendido el rechazo al proyecto de modificar las cuotas", expuso el académico.

Al margen de los matices, tanto los estudiantes como el académico Torres Parés, fundamentaron sus temores a un conflicto como consecuencia del poco tiempo destinado a la "consulta" --se realizó durante una semana en el seno de los 26 Consejos Técnicos, un día hábil después de que Barnés presentó el pasado 11 de febrero su proyecto-- al igual que a la premura para que sesionarán las comisiones de Presupuestos y de Legislación del Consejo Universitario.

Huerta incluso manifestó que desde dentro del movimiento estudiantil, algunas autoridades pretenden "reventarlo" recurriendo a grupos de choque, de porros, como el 2 de marzo, o a sectores de estudiantes con posiciones "ultrarradicales", y comentó que hasta ahora ha prevalecido la prudencia para no llegar a situaciones extremas.

Torres Parés complementó: "Creen que con apresurar su aprobación y presionar a los estudiantes con declaraciones amenazantes como las de Ramos, van a detener las inconformidades y al movimiento estudiantil. Por el contrario --agregó--con esas posiciones van a empeorar la cosas, además de que no calcularon bien el momento, y sería un gravísimo error que lo hayan pensado en el contexto del juego político electoral".

Cruz señaló que el debate sobre la iniciativa de Barnés ha rebasado a los universitarios y convinó en no descalificar las opiniones emitidas por los distintos sectores de la sociedad, incluidas las de secretarios de Estado, funcionarios públicos y los partidos políticos. "Si el rector las quiere descalificar es su boleto, pero así como le solicitó al jefe del gobierno capitalino no intervenir, lo mismo debe exigir directamente al Presidente de la República".

Al abundar sobre la solicitud hecha al rector Barnés, el representante de Ingeniería indicó que en el debate se deben analizar cuatro puntos esenciales: el reglamento de cuotas, las formas de gobierno, el manejo y uso del presupuesto universitario y el papel que actualmente tiene la UNAM en el contexto de vida nacional.

La misiva fue signada por 22 consejeros estudiantiles --propietarios y suplentes, de igual número de escuelas y facultades; el representante de los académicos del Instituto de Fisiología Celular, Rolando Hernández Muñoz, y el del STUNAM, Carlos Espinoza. Rodrigo Figueroa, del Consejo Estudiantil Universitariao (CEU), informó que sus integrantes se suman a la carta y a la demanda de que el rector retire su propuesta de aumentar las cuotas.