n Moctezuma: la atención a ese grupo, en los próximos años
Excluidos del Progresa, 13 millones de pobres
n Los beneficiarios quedarán al margen de subsidios a leche y tortilla
Angélica Enciso L. n El Programa de Educación, Salud y Alimentación (Progresa) dejará de atender este año a la mitad de la población que vive en extrema pobreza, 13 millones de mexicanos de un total de 26, por lo que "el esfuerzo deberá continuar" para incluir al resto en los próximos años, señaló el titular de la Secretaría de Desarrollo Social (Sedeso), Esteban Moctezuma, al presentar los lineamientos que regirán las acciones del plan, para hacerlas "más transparentes".
Agregó que es imparcial la selección de localidades a las que se orienta el programa, por lo que los cuestionamientos sobre su manejo electoral no tienen fundamento.
El apoyo mensual del Progresa para alimentación será, durante el primer semestre, de 115 pesos al mes, poco menos de 4 pesos al día, y las becas mensuales por educación no serán superiores a 580 pesos por familia. En total, un solo núcleo no podrá percibir más de 695 pesos mensuales.
El programa cuenta con un presupuesto de 7 mil 700 millones de pesos y está orientado a 2.3 millones de familias, a las cuales se prevé llegar en junio o julio de este año, antes de que empiece el próximo ciclo escolar.
El Progresa se dio a conocer en agosto de 1997, y en los lineamientos expuestos ayer se destaca el hecho de que será auditable y más transparente. Se reitera también que el abasto social de leche y de tortilla no será otorgado a las familias beneficiadas con el Progresa, y a partir de que éstas reciban el primer apoyo monetario de ese programa se suspenderán los otros subsidios.
En la presentación del documento, en la que no se admitieron preguntas de los reporteros, estuvo el titular de Educación Pública, Miguel Limón; el subsecretario de Hacienda, Santiago Levy; el de Salud, José Narro, y el responsable del Progresa, José Gómez de León.
Ese programa, dijo Gómez de León, "no es asistencial"; "esencialmente busca incidir en las causas estructurales de la pobreza en México y de su transmisión intergeneracional". Destacó que se pretende evitar la duplicidad de subsidios.
Por su parte, Limón Rojas refirió que "el círculo pobreza-ignorancia, que en países con problemas sociales como el nuestro es tan dramático y se convierte realmente en el obstáculo más notorio para que grupos sociales tan numerosos puedan alcanzar el bienestar que merecen", se podrá romper con el Progresa.
El funcionario precisó que actualmente se tienen resultados, ya que en este año habrá un incremento de 200 mil alumnos en secundaria respecto a lo que se tuvo el año pasado, y tan sólo en los últimos cinco años se ha presentado un aumento en la matrícula de ese nivel educativo de 100 mil estudiantes.
Santiago Levy detalló que los lineamientos establecen las obligaciones de las diferentes instancias que operan el programa. En lo que se refiere a la Secretaría de Hacienda, ésta tiene la responsabilidad de realizar una evaluación del Progresa de acuerdo con el calendario de desembolso de los recursos y la mecánica de operación.
A su vez, Esteban Moctezuma destacó que la focalización de las acciones de Progresa orientadas a la población en extrema pobreza asegura una mayor eficiencia del gasto destinado a su combate, y "crea condiciones de racionalidad y equidad social".
Agregó que se trabaja desde la nutrición, la alimentación, la salud y la educación. "No podríamos tener niños verdaderamente bien educados y desarrollados en sus capacidades si no tienen una salud que así se los permita". Mencionó que las consultas médicas en las zonas donde existe el programa han registrado un incremento de aproximadamente 40 por ciento.
En el documento se establece que los apoyos monetarios se ajustarán cada seis meses, en enero y julio de cada año, de acuerdo con la inflación, y se precisa que los criterios para la selección de localidades en que opera parten del nivel de marginación y se da prioridad a las que tienen una posición más crítica.