Horacio Labastida

La convocatoria de Cárdenas

La propuesta de Cuauhtémoc Cár- denas ha conmovido a partidos políticos e importantes agrupaciones civiles, pues responde a una profunda reflexión sobre lo que hoy es la política en México; es decir, el poder y sus manipulaciones por elites opuestas al florecimiento de la democracia. Ha vivido Cárdenas muy de cerca los complejos fraudes que le arrebataron el triunfo en las elecciones de 1988 y 1994, experiencias amargas que el pueblo contempló aperplejado porque nada se pudo hacer contra la imposición oficial. Urgente es por tanto plantear desde ahora los posibles escenarios comiciales del 2000 con objeto de procurar condiciones mínimas que hagan posible el sufragio efectivo en nuestro país.

No es difícil señalar los factores que han reproducido el autoritarismo presidencialista en los periodos que van de 1947 al presente, y muy especialmente en los recientes 16 años de vida pública; en todas estas épocas con mayor o menor intensidad aparecen las estrategias comunes del presidencialismo autoritario: A.- El uso patrimonial de los recursos del Estado y su asignación al aseguramiento del dominio presidencialista, valiéndose frecuentemente de sofisticadas interpretaciones de la ley con el propósito de encubrir la indebida aplicación de los recursos que tangencialmente enriquecen a las altas burocracias y corrompe masivamente el sufragio ciudadano. Cabe acentuar que esta patrimonialización es intrínseca en el sistema, sin la cual indudablemente abortaría. B.- La conversión de la decisión presidencialista en dogma político no es peculiar del presidencialismo mexicano, sino propia de totalitarismos avanzados o subdesarrollados.

La palabra del führer hitleriano era suprema verdad en la ideología nazi, al igual que la palabra del presidente mexicano pretende ser una verdad inapelable que el juicio independiente no alcanza a entender.

Pongamos ahora un punto y aparte para romper la monotonía del texto. C.- El partido oficial es instrumento sine qua non del presidencialismo. Quizá por temor a explosiones internas y al rechazo que provocaría en la Casa Blanca, los gobiernos autoritarios no han hecho del partido oficial un instituto constitucional, según el ejemplo de los totalitarismos europeos y soviético, pues tal paso connotaría audacia inviable e intolerable; sin embargo, el partido del gobierno ha cumplido muy bien con el papel de simular la intervención oficial en los comicios, distorsionándolos por todos los medios imaginables y aniquilando el sufragio efectivo para garantizar la victoria de sus candidatos; así es como se ha logrado reproducir sexenalmente el presidencialismo contrademocrático que ha regido al país. D.- El uso de fuerzas militares, paramilitares y policiales es otro medio irrenunciable en la conservación del autoritarismo mexicano; si otros procedimientos fallan o bien si es necesario implantar el fraude contra la movilización de los defraudados, la fuerza armada o desarmada cumple la tarea de diezmarlos corrompiendo o asesinando a sus líderes y persiguiendo, aterrorizando o encarcelando a quienes defiendan las libertades ciudadanas. Sin la coerción brutal, el presidencialismo habría caído hace largo tiempo. E.- La real, activa o velada infiltración del superpoderoso gobierno de Washington, personero del capitalismo trasnacional interesado en los mercados mexicanos, es un poder configurado en gobierno de los gobernantes del país, instalado en el centro invisible de las decisiones del presidencialismo autoritario, cuya supeditación lo obliga a transgredir el estado de derecho y todo lo que restrinja o bloquee el mandato extranjero. En verdad, la potencia foránea asociada a las élites económicas y políticas del interior substancia en su totalidad el ser mismo y el hacer del presidencialismo autoritario como causas eficientes del desgarramiento de México entre su vocación democrática y su opresión antidemocrática.

ƑNo es gigantesco el poder que la oposición enfrentará en las elecciones del año 2000? ƑAcaso no es urgente dotar a David de una buena honda en su lucha contra Goliat? ƑLa propuesta de Cuauhtémoc Cárdenas no lleva a este alentador propósito?

Las deseadas primarias en que se elija al candidato único de la oposición revelan una serena y valiosa esperanza de que al fin el pueblo se gobierne conforme a su soberanía, y al hablar de esperanza recordamos lo que el poeta Ricardo Reis dijo a la enferma Marcenda, en la célebre novela de Saramago. Al enterarse el poeta de que probablemente la delicada Marcenda no tenía remedio, le recomendó mantener la esperanza; Ƒcuál esperanza, preguntó Marcen- da?; la esperanza, nada más que la esperanza, contestó Ricardo Reis, porque con la esperanza "descubrimos que aún lo tenemos todo". ƑAcaso no es la esperanza mexicana, la que abrirá las puertas del 2000 a la libertad?

Marzo 5 de 1999.