n Preside ceremonia en Los Pinos por el Día Internacional de la Mujer

Zedillo: la violencia intrafamiliar, "inadmisible para los mexicanos"

n "Cada día somos más quienes trabajamos para que las mujeres tengan acceso pleno a la justicia", dijo

Rosa Elvira Vargas n Cada día "somos más quienes trabajamos para que las mujeres tengan acceso pleno y efectivo a la justicia'', a la educación, la salud y el trabajo, aseguró el presidente Ernesto Zedillo en la ceremonia por el Día Internacional de la Mujer. Lamentó sin embargo que hasta hoy, sólo siete estados y el Distrito Federal cuenten con legislaciones sobre violencia familiar y sexual contra las mujeres, y giró instrucciones para que se atienda la "verdadera tragedia social'' en que está convirtiéndose el elevado número de embarazos no deseados de adolescentes en las ciudades industriales emergentes del país.

En el salón Adolfo López Mateos de Los Pinos, el mandatario se refirió a la violencia intrafamiliar como un fenómeno inadmisible para los mexicanos pero que, ''para vergüenza de todos sigue manifes- tándose de manera pertinaz en nuestra sociedad''. Son conductas, dijo, que dañan la dignidad de las personas y atentan contra la integridad de las familias.

Por ello defendió la ley respectiva, porque con la misma se abren mejores oportunidades de acceso a la justicia, y aunque la consideró un valioso instrumento, asumió que aún falta mucho por hacer en la materia, sobre todo ante el hecho de que menos de la tercera parte de las entidades del país han procedido en consecuencia. Hizo entonces un llamado para que se inicie o se acelere en su caso la elaboración, presentación, debate y aprobación de las reformas legales, y convocó a la tarea a gobernadores, congresos locales, juristas, partidos políticos, organizaciones sociales e incluso a los procuradores de justicia de todo el país.

Y es que, desde la visión presidencial, ''en la lucha contra la violencia hacia las mujeres no podemos permitirnos ni un paso atrás, y la demora en esta tarea significa dar pasos atrás''. Realizar cambios legales es apenas el primer paso, indicó, pues es menester tener medios idóneos que permitan cumplirla, tales como ministerios públicos especializados, centros de atención, de asesoría y apoyo a las víctimas de la violencia. "Juntos podremos fomentar o arraigar una nueva cultura de respeto a la integridad de las mujeres y las familias'', expuso entonces.

Dijo también que la identificación precisa de las desigualdades existentes entre la población masculina y femenina es de la mayor importancia para tomar decisiones más eficaces a favor de su superación.

Unidos, indicó entonces, trabajaremos y haremos cada vez más por la causa de las mujeres, que es la de todos los mexicanos, y "con el esfuerzo de todos, seguiremos dando uno a uno los pasos que nos acerquen al ejercicio pleno de los derechos de las mujeres de nuestra patria''.

De ese modo, el mandatario fue recorriendo la agenda de las acciones oficiales hacia la mujer. Destacó que en los años recientes se han fortalecido los programas preventivos del cáncer cérvico-uterino y el mamario; que ya existe una nueva norma oficial en la materia y que se lanzará una nueva campaña preventiva en los medios masivos de comunicación. Informó entonces que para la detección de esas patologías en 1998 se abrieron 46 nuevas clínicas, con lo que ya llegan a 150 en el Sistema Nacional de Salud, y se realizaron 4.2 millones de estudios, 40 por ciento a mujeres que nunca se habían hecho la prueba.

Enseguida, el mandatario habló de los embarazos no deseados en mujeres "muy jóvenes'', problema antes ubicado en el ámbito rural y que hoy se ha vuelto "particularmente grave'' en las ciudades industriales emergentes. Incluso comentó que en sus frecuentes giras a provincia, ha encontrado "testimonios verdaderamente dramáticos de lo que ocurre''. Instruyó entonces a la coordinadora del Programa Nacional de la Mujer, Dulce María Sauri Riancho para que actúe de inmediato al respecto; confió en tener buenos resultados en un año y ofreció: "yo estaré listo para apoyar también en lo que a mí corresponda este proyecto tan importante''.

Más adelante, el jefe del Ejecutivo instruyó también a la directora del ISSSTE, Socorro Díaz, para que al igual que ocurre ya en el IMSS, la institución determine los mecanismos más convenientes que permitan a las mujeres cotizantes y pensionistas tener derecho de afiliación a los servicios médicos a favor de su cónyuge. De igual manera, dijo que en el Infonavit están adecuándose las reglas para que las mujeres puedan acceder a créditos para vivienda considerando a su pareja como uno más de sus dependientes económicos.

Zedillo también habló de la evolución femenina en la matrícula escolar de todos los niveles, y de que en bachillerato general y profesional medio es ya superior a la de los hombres. Mencionó que los materiales didácticos para educación básica en ciencias naturales ya incluyen capítulos específicos sobre educación sexual, y que los de educación cívica que se usarán en el próximo ciclo escolar en secundaria incluirán apartados completos sobre la importancia de la equidad de géneros.

Todo ello, resaltó entonces, es fundamental para fortalecer las bases para eliminar conductas discriminatorias, pues "el esfuerzo por igualar las oportunidades de progreso económico para las mujeres ocupa un sitio destacado en las estrategias para la superación de la pobreza dentro de nuestra política social''. El mandatario repasó también las políticas específicas para la mujer campesina y los apoyos que se le dan mediante el Programa de Educación Salud y Alimentación (Progresa); destacó también las acciones que se impulsan en el terreno laboral mediante la Secretaría del Trabajo y el que en 1998, 291 mil mujeres recibieron becas Probecat.

Ante representantes de diversas organizaciones sociales femeninas, legisladoras y mujeres que participan en la política y la administración pública, así como su esposa, Nilda Patricia Velasco, el presidente Zedillo dijo que la unidad lograda por todas ellas es una muestra de que la pluralidad política y la comunión de objetivos son convergentes cuando responden a un compromiso serio con la atención a las más sentidas causas sociales.

Por su parte, la coordinadora del Programa Nacional de la Mujer, Dulce María Sauri, detalló las acciones emprendidas durante el último año, entre las que destacó el que México haya ratificado la Convención Interamericana para Prevenir, Sancionar y Eliminar la Violencia contra las Mujeres, y dijo que a tres años de creado aquel instrumento se refrenda que el próximo deberá ser "el siglo de la equidad''.