n Persiste la disputa entre priístas por el control de espacios en el Centro


Trifulca entre ambulantes y toreros deja 3 heridos graves

n Se reforzará la vigilancia en la zona: autoridades n Corresponde al MP delimitar culpas, señalan

José Galán, Ricardo Olayo y Bertha Teresa Ramírez n Comerciantes ambulantes afiliados al PRI, que son lidereados por Silvia Sánchez Rico, protagonizaron ayer, a un costado de Palacio Nacional, una trifulca contra organizaciones de comerciantes toreros disidentes, a quienes agredieron con palos, piedras, machetes y armas de fuego, en un capítulo más de la pugna por los espacios del Centro Histórico, y cuyo saldo fue de varios heridos, tres de gravedad, por arma de fuego.

La policía detuvo a Andrés Martínez Sánchez, quien según los toreros afectados es hijo de Sánchez Rico, aunque ésta se negó a comentar respecto a su parentesco. El hecho se suma a la decena de averiguaciones previas que hay en la Procuraduría de Justicia del DF, por los delitos de lesiones, amenazas y otros que se investigan de presuntos integrantes del grupo priísta.

Las autoridades anunciaron que incrementarán la vigilancia para evitar la violencia, pues se reportaron en la zona del bando que prohíbe la presencia de ambulantes en la vía pública. Para el subdelegado jurídico en Cuauhtémoc, Francisco Saucedo, el gobierno no tiene responsabilidad alguna en la trifulca y ahora corresponde al Ministerio Público delimitar culpas.

El enfrentamiento de toreros y ambulantes se dio alrededor de las 13:30 entre las huestes de Sánchez Rico --quien fue acusada de utilizar golpeadores profesionales-- y de otra dirigente, Jovita Cruz. Por la noche, a las 19:30, en una conferencia de prensa citada con cinco minutos de anticipación, el subsecretario del Trabajo, Saúl Escobar, y el delegado en Cuauhtémoc, Jorge Legorreta, informaron que la pelea fue entre grupos de vendedores y que la presencia de granaderos sólo sirvió para distender los ánimos.

Para contener la violencia tuvieron que llegar más de 50 granaderos, luego que ambos bandos en conflicto se lanzaron piedras y proyectiles, precisamente en la misma zona en que infinidad de ocasiones han sido también agredidos los reporteros que se animan a entrar a la calle de Corregidora y Correo Mayor.

Algunos ambulantes sacaron machetes, palos y tubos para perseguir a los toreros, y éstos también se defendieron.

Uno de los comerciantes desenfundó una pistola nueve milímetros y disparó en ocho o nueve ocasiones hiriendo a Víctor Manuel Angeles, de 22 años; Macario Mondragón, de 23, e Isaac Corona, de 26, quienes fueron hospitalizados y horas más tarde dados de alta.

Los comercios establecidos aledaños a Palacio Nacional, ubicados sobre Corregidora, Jesús María y Correo Mayor, bajaron sus cortinas y la vigilancia de los granaderos continuó hasta la noche.

Los grupos priístas de la zona pretenden mantener la hegemonía del espacio y en particular, según las acusaciones tras el enfrentamiento, hay comerciantes disidentes que ya no están de acuerdo con el cobro de cuotas que les hace Sánchez Rico.

El conflicto comenzó a gestarse días atrás luego que la organización de Jovita Cruz decidió dejar de plegarse a las exigencias de la gente de Sánchez Rico, y decidió establecerse por la libre sobre la calle de Corregidora, entre Correo Mayor y Pino Suárez, sobre la acequia izquierda de Palacio Nacional.

A las 13:30 de ayer, las huestes de Sánchez Rico decidieron desalojar a la competencia en esa codiciada zona. Actuaron entonces presuntos golpeadores de la organización, en el marco de más de una decena de denuncias presentadas ante el Ministerio Público por parte de las agrupaciones de comerciantes fijos y semifijos por amenazas, robo, secuestro y agresiones en contra de la propia Sánchez Rico y de su hijo, Julio César Ramos Sánchez.

Apenas unas cuantas horas después de que se escucharon los disparos, Legorreta informó en exclusiva a una estación de radio que ya se había establecido un acuerdo con la lideresa Silvia Rico para sentarse a negociar. "No volverán a darse más actos de violencia en las calles del Centro Histórico", aseguró el funcionario.

Dijo que se trataba de un enfrentamiento entre organizaciones de la señora Silvia Sánchez Rico que "están muy inconformes con la forma en que operan, pero nosotros actuamos, desde hace unos días, de manera preventiva porque ellos ya tenían algunos conflictos y se preveían enfrentamientos". El funcionario señaló que la delegación mantiene a cerca de 200 elementos de la policía desde hace varios meses en esa zona altamente codiciada.

A pesar de que el enfrentamiento y el hecho de que se hubieran escuchado disparos atrajo el interés de diversos medios informativos, las autoridades delegacionales no atinaban a ponerse de acuerdo sobre la realización de una conferencia de prensa o un boletín. Finalmente fue lo primero en el edificio de gobierno del Zócalo.