n En sobrevivencia, 3 millones de micro, pequeños y medianos empresarios


El estancamiento crediticio, sin precedente en el país: CNBV

n La banca debe dejar atrás su reticencia a tomar riesgos

Roberto González Amador n En el segundo llamado de atención en esta semana, autoridades financieras criticaron hoy la incapacidad de la banca mexicana para reactivar el crédito a empresas y particulares del país. ''Nunca en la historia del país había ocurrido un estancamiento crediticio de tal envergadura'', afirmó Patricia Armendáriz, vicepresidenta de supervisión de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV).

En un encuentro auspiciado por la firma estadunidense Moody's, la funcionaria urgió a la banca mexicana ''a dejar atrás su reticencia a tomar riesgos crediticios''. Lamentó que cuatro años transcurridos desde que estalló la crisis financiera no hayan sido tiempo suficiente para que la banca ''se sienta segura para prestar''.

Las declaraciones de Armendáriz ocurrieron dos días después de que Guillermo Ortiz, gobernador del Banco de México, calificara al estancamiento del crédito como ''el más grave en la historia del país''.

En el seminario organizado por Moody's, la funcionaria afirmó que tomar riesgos crediticios ''es tarea fundamental de los bancos. De la voluntad de ellos para tomar riesgos depende su propia sobrevivencia, porque solamente el regreso a una actividad crediticia sana les generará los beneficios de haber luchado por una base de depósitos estable y de bajo costo''.

Armendáriz sostuvo que de poco sirve que las instituciones de crédito mexicanas cuenten con una base estable de depósitos, si no los prestan para financiar actividades productivas.

De hecho, afirmó, la estrategia de aumentar el saldo de los depósitos y disminuir el monto de los préstamos ha sido contraproducente para los bancos que la adoptaron. ''Para obtener los recursos del público ahorrador han tenido que crecer y aumentar su red de sucursales, lo que eleva costos, pero sin crédito, esto ha afectado la rentabilidad de los bancos'', señaló.

Indicó que los recursos estables y de bajo costo para financiar la entrega de crédito están disponibles. Pero añadió que es la voluntad de los bancos mexicanos de tomar riesgos la que tiene que sentar las bases de un sistema productivo que sea capaz de generar el desarrollo económico que el país necesita.

El miércoles pasado, Carlos Gómez y Gómez, presidente de la Asociación de Banqueros de México, afirmó que la reactivación del crédito bancario no ocurrirá sino hasta la segunda mitad del año, siempre y cuando se mantenga la tendencia a la baja en las tasas de interés.

n El financiamiento privado privilegia a la industria extranjera y a la dedicada a la exportación, coinciden CEMAI y ANIT

Antonio Vázquez n El financiamiento privado en México atraviesa una de sus etapas más críticas, que se prolonga desde 1982, y por ello ha colocado a casi 3 millones de micro, pequeños y medianos empresarios en una situación de ''sobrevivencia'', pues sólo privilegia a las industria extranjeras o a las orientadas a la exportación y desprecia a las pequeñas y medianas (Pymes) que representan, por lo menos, el 90 por ciento de la actividad económica en México.

Juan Morales Doria, presidente del Consejo Empresarial Mexicano para Asuntos Internacionales (CEMAI) y Adán Rivera de la Asociación Mexicana de Industriales de la Transformación (ANIT), comentaron que el escaso financiamiento que hay en México, no sólo es difícil de encontrar, sino también caro. ''Es tan difícil la situación, que para el inversionista mexicano parece no haber más alternativas. Sin embargo, nuestra situación no es tan mala como la del resto de América Latina'', dijo Morales Doria.

Mientras, cifras publicadas por la Encuesta de Micronegocios que realizaron el Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática (INEGI) y la Secretaría del Trabajo, demuestran que la escasez de crédito que ha enfrentado el empresariado mexicano en los últimos cinco años provocó que durante 1996, de casi 3 millones de apoyos solicitados, sólo 37 mil 695 acudieron a los bancos con resultados ''nada positivos''; 21 mil 804 lo hicieron a cajas de ahorro; un millón 879 mil 861 echó mano de ahorros personales o vendió parte de sus bienes; 538 mil 309 solicitaron apoyo a familiares o amigos; 197 mil 687 utilizó sus liquidaciones de trabajos anteriores; 28 mil 888 recurrieron a pagos anticipados, y 87 mil 74 se financió por pago a proveedores.

De acuerdo al presidente de la ANIT, la contracción del financiamiento privado en México inició desde 1982, cuando el gobierno del entonces presidente José López Portillo determinó nacionalizar la banca, pues ''le fue quitada a los verdaderos banqueros y fue utilizada para fines particulares del Estado''. Posteriormente, Miguel de la Madrid la puso en manos de neobanqueros bolsistas ''que menos entendían el manejo de instituciones financieras'' y ahora, ''ahí están los resultados''.

Morales Doria no compartió el pensamiento de Adán Rivera, pues señaló que el financiamiento privado en el país ha tenido ''altibajos''. Coincide en afirmar que, aunque la situación ''es mala'' para las empresas del país, ''no estamos menos mal que la mayor parte de América Latina''.

Admitió también que para las empresas grandes, que orientan su actividad a la exportación, este problema no existe. En cambio, dijo, ''aunque resulte difícil admitirlo, para las pequeñas y medianas empresas, simplemente no hay crédito''.

Rivera lamentó que cada vez sea mayor la asimetría entre la gran empresa y las Pymes. Mientras aquellas reciben apoyos en dólares por dedicarse a la exportación e incluso en algunos casos subsidios, las Pymes se hacen cada vez más pequeñas, al no contar con recursos suficientes.

para lograr reconvertirse industrial y tecnológicamente.