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Padece la educación superior rezago de dos décadas: experto
María Esther Ibarra n Por lo menos desde hace dos décadas existe un rezago presupuestal para educación, cultura y ciencia y tecnología, a pesar de que el gobierno federal intentó recuperar el año pasado la caída del gasto en esos rubros al proponer un aumento de 11.2 por ciento. Sin embargo, por las repercusiones de la baja en el precio internacional del petróleo sólo pudo incrementarlo 9.2 por ciento, lo cual representa 3.85 del producto interno bruto que tenía hace 16 años el país.
Al señalar lo anterior, Gonzalo Badillo Moreno, asesor parlamentario de educación del PRD, precisó que la Universidad Nacional Autónoma de México no escapó a los efectos de la disminución presupuestal vía el subsidio federal, pues el año pasado enfrentó una reducción de los fondos públicos de 7.8 por ciento en términos reales, no obstante la demanda de incrementar los recursos a la máxima casa de estudios.
En su ponencia que presentó en el Foro Estado, Economía y Educación, efectuado ayer por la tarde en la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UNAM, Badillo Moreno sin embargo cuestionó que con los 678 millones de pesos destinados al Fobrapoa, con un interés mensual de 12 millones 400 mil pesos, se hubiera constituido un fondo de rescate para la educación media y superior.
De esa manera, consideró, se hubieran tenido recursos para 85 instituciones como la UNAM, para otras 4 mil 370 universidades autónomas similares a la Benito Juárez de Oaxaca y a la de Chiapas.
Otras reducciones
El también integrante de la Fundación para la Democracia Alternativa y Debate explicó que la reducción del gasto en el sector educativo se extendió a la enseñanza básica y provocó, entre otras cosas, la suspensión de 15 millones 100 mil libros gratuitos, afectó la adquisición de equipo de cómputo del Programa Educación a Distancia, y la edición e impresión de material didáctico para alfabetización.
En otras áreas educativas, indicó que la afectación se tradujo en la reducción, por ejemplo, de programas como el de Becas de Posgrado y el de Apoyo a las Ciencias, la suspensión de 90 proyectos de investigación para este año, así como el ingreso o continuación de sus estudios a alumnos inscritos en maestrías y doctorados.