n Aumentaron 10% los ingresos públicos


Difícil, un acuerdo sobre reforma fiscal integral en 99, advierte Ruiz

César Martínez n Tomás Ruiz, subsecretario de Ingresos de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), advirtió que será ''difícil'' alcanzar un acuerdo sobre la reforma fiscal integral en el presente año, debido al clima político prelectoral que prevalecerá.

Entrevistado luego de participar en el foro Hacia un nuevo pacto fiscal, organizado por el Colegio Nacional de Economistas (CNE), el funcionario anunció que en el primer trimestre de 1999 los ingresos impositivos aumentaron 10 por ciento y las finanzas públicas registraron un superávit, aunque no precisó la cifra.

Señaló que para los diputados, la discusión de la reforma fiscal no es una prioridad y recordó que ni los legisladores de Acción Nacional ni de la Revolución Democrática han presentado aún una propuesta de trabajo conjunto al respecto. Convocó a los legisladores a no hacer propuestas ''simplistas'' y ''populistas''.

Consultado sobre las discrepancias del gobierno con el sector empresarial en materia fiscal, se limitó a responder que comparten los objetivos generales de mantener las finanzas públicas sanas y de que la reforma afecte lo menos posible a la actividad productiva, pero admitió que no hay consenso en propuestas concretas.

Al referirse a las recomendaciones del Fondo Monetario Internacional (FMI) para que México reduzca aún más el déficit público para el año 2000, aseguró que sólo se trata de una ''coincidencia'' con los objetivos de su administración, puesto que planea alcanzar un desequilibrio menor a 1.25 por ciento del producto bruto interno en los próximos años.

Ruiz afirmó que no habrá en este fin de sexenio causas económicas que desemboquen en una de las viejas crisis recurrentes, pero aclaró que sí habrá incertidumbre en ese sentido, debido a la época política que se vivirá, frente a las elecciones presidenciales.

Aseguró que México no necesita sustituir su actual sistema tributario, y por lo tanto no requiere un nuevo pacto fiscal. Lo que sí necesita, agregó, es el establecimiento de un ''pacto de responsabilidad social'' entre los poderes del Estado, los distintos órdenes del gobierno, las fuerzas políticas y la sociedad.

Según Juan Pablo Arroyo, presidente del CNE, la discusión fiscal debe incluir no sólo el tema de la recaudación, sino también el de la asignación del gasto, porque hace falta transparencia en la aplicación de los recursos. ''Cuando vemos cosas raras, vemos de pronto deformaciones muy importantes en la asignación de los recursos públicos, es cuando los ciudadanos cuestionan la posibilidad de pagar impuestos'', puntualizó.

Arroyo reclamó que el Legislativo promueva una ''gran discusión nacional'', para recoger el sentir de toda la sociedad. Llamó al debate fiscal, porque sostuvo que hay una nueva conducta en México, expresada, por ejemplo, en la actitud de un grupo de diputados ''no identificados con un partido, sino con una causa'', que en la discusión legislativa de diciembre pasado defendieron a las empresas maquiladoras para que no pagaran más impuestos.