ASTILLERO Ť Julio Hernández López
Las reglas que
dará a conocer el PRI el próximo lunes serán la
clave para entender la manera como la voluntad presidencial pretende
resolver el enredo de la sucesión.
Tales reglas habrán de establecer los nuevos candados (prácticos) que se impondrán a los precandidatos indeseados (sobre todo a Roberto Madrazo Pintado) y las llaves del tesoro que se tratará de entregar a los precandidatos de la casa (Francisco Labastida Ochoa y Miguel Alemán Velasco), además de definir el papel que jugará el precandidato comodín (Esteban Moctezuma Barragán) y el precandidato tigre de papel (Manuel Bartlett).
Las citadas reglas serán, en ese contexto, tanto una estrategia de campaña como una declaración de guerra. Para los beneficiados con el beneplácito de Los Pinos, el libreto les irá llevando a los tiempos y las circunstancias deseadas por el DAR (siglas de Dedo Amputado y Reinjertado). Para quienes desde ahora están vetados (o vetado, en singular), las nuevas normas serán trampas sembradas.
Madrazo: el enojo (profundo) presidencial
Por ser más emocionantes los escenarios de guerra, se dará preferencia al caso tabasqueño. Para empezar, hay que decir que don Roberto Madrazo Pintado goza del más profundo de los desafectos presidenciales, con todo y aquella arenga famosa en la que el doctor Zedillo hubo de ir a Villahermosa para asegurar que él y Madrazo gobernarían juntos hasta el 2000.
Como es sabido, Madrazo fue el primer gobernador que detectó la grave debilidad política del presidente Zedillo y que fue capaz de oponerse a sus decisiones y afianzarse en un camino diferente al pensado y ordenado desde Los Pinos.
Roberto se levantó en armas cuando el doctor Zedillo, por la vía de Esteban Moctezuma Barragán, entonces secretario de Gobernación, quiso quitarlo del poder estatal para hacerlo secretario de Educación Pública y, con su cabeza en bandeja, finiquitar una alianza de oportunidad con el PRD que impugnaba su triunfo electoral.
Con un priísmo local sublevado y pertrechado desde la Quinta Grijalva, el presidente Zedillo se vio obligado a mantener a Madrazo en la gubernatura. Un damnificado de ese episodio fue el propio Moctezuma, quien salió de Bucareli no renunciado, sino renunciando.
Los agravios de aquellas fechas siguen vivos, pero multiplicados por las osadías del tabasqueño, quien no se conformó con seguir como gobernador sino que con toda claridad desplegó desde siempre una estrategia clara de posicionamiento como precandidato presidencial.
En la consecución de ese propósito, Madrazo ha usado el dinero público con un absoluto desprecio no sólo por el bienestar de sus paisanos, a los que sustrae obras y servicios para convertirlos en anuncios de televisión en cadena nacional, sino también de la palabra presidencial, que se ha expresado en varias ocasiones en contra del uso del erario para promociones personales sin que en Villahermosa haya gobernador alguno que se dé siquiera por enterado.
Con tales antecedentes suena natural que haya personajes totalmente identificados con el Presidente, y responsables de la definición de las citadas reglas, que aseguran que Madrazo no será candidato presidencial de ninguna manera.
Este columnista motivó enérgicos aspavientos en uno de esos personajes cuando comentó la posibilidad de que Madrazo pudiese ganarle a los gallos del Presidente en una consulta priísta abierta.
Según ese importante hombre del Presidente, Madrazo nunca, "šnunca!", podría ganar la elección tricolor. La sentencia fue invariable aun cuando se le comentase a ese político que Madrazo le ha ganado otras partidas al Presidente, y que en estos momentos tiene un ejército de operadores electorales esparcidos por todo el país para apoyar su precandidatura.
(Es más, en esos círculos de la alta especulación política, se estudiaba la posibilidad de encajonar a Madrazo con reglas que le obligasen a alejarse del poder estatal de tal manera que se pudiese nombrar a un interino cuyas primeras tareas fuesen las de revisar las cuentas públicas.)
Los amigos
Respecto a los precandidatos que gozan del afecto presidencial, una duda importante se refiere a la posibilidad de hacer alianzas en una segunda vuelta.
Quienes impulsan esa variable hablaban de la importancia de contar con una ronda inicial, en la que participarían todos los aspirantes, y que luego de una depuración inducida, quedasen sólo los políticos amigos.
En ese escenario, la figura de Moctezuma Barragán cobraría un peso especial pues, suponiendo que los gemelos Francisco Labastida y Miguel Alemán fuesen instalados en la segunda ronda, y el joven Esteban también, entonces este secretario tendría un papel sustancial para inclinar las votaciones internas en un segundo encuentro.
De Manuel Bartlett, para su fortuna, no se oyen cosas demasiado escandalosas en esos niveles superiores. Simplemente se le descalifica por su pasado apabullante y por los resultados de encuestas que le colocan siempre en lugares inferiores. Entre más se da a conocer Manuel, más cae en las encuestas, dijo uno de esos personajes que hablan pero que no aceptan ser identificados.
La clave
En fin. Serán las reglas priístas la primera rendija por la que los ciudadanos podrán asomarse al gran patio presidencial en el que se cocinan las decisiones del 2000.
Abierto de verdad, es decir, democrático aun a costa del propio interés presidencial, o cerrado y con dedicatoria para favorecer a los de casa, tal es el dilema respecto al proceso priísta interno que este lunes tendrá su primera definición importante.
Astillas: La violencia política siempre será censurable, de tal manera que en ninguna consideración es posible desestimar el episodio en el que el senador perredista Héctor Sánchez apareció como víctima de un atentado en un pueblo oaxaqueño. Sin embargo, será importante aclarar y precisar los términos exactos de ese incidente, pues la lucha partidista en aquella entidad está teñida de tonos que obligan siempre a la prudencia para analizar hechos como los mencionados... A ver, a ver, Ƒcómo está eso de que un ex diputado federal priísta, Guillermo González Díaz, dice que Fernando Gutiérrez Barrios está dispuesto a buscar una senaduría para apuntalar la candidatura presidencial de Miguel Alemán Velasco? ƑY que la CNOP veracruzana ųque, como todas las del país, sólo se mueve por voluntad del gobernadorų se manifiesta en favor de que el ex secretario de Gobernación regrese a la actividad política militante?... A propósito de aquellas tierras, don Jorge Saldaña, quien desde París escribe por correo electrónico a Astillero de vez en cuando, le entra ahora a la polémica sobre la X o la J para escribir el nombre de la capital veracruzana. Así dice el texto del respetado periodista: "Estimado Julio, que no Xulio: En mi vertiginosa incursión folklo-política en Veracruz y como jalapeño viejo, me empeciné en escribir Jalapa con su original ortografía. No le haga caso a Felipe Ehrenberg, que tanta virtud y simpatía tiene en otros menesteres. Imagínese un Congreso de diputadillos paleros que se atrevan a cambiar lo que la tradición y la historia han hecho costumbre. No escribo Jalapa con X porque, en este caso... la X... algo tiene de cruz y de priísmo".
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