n Entregará hoy el Kremlin a EU una nueva propuesta para detener la agresión
Insuficiente, el ofrecimiento serbio; los bombardeos continuarán: OTAN
n Sostiene Rusia que comparte con China la demanda de que deben cesar de inmediato los ataques
Afp, Ap, Dpa, Reuters y Xinhua, Moscú, 11 de mayo n Rusia entregará este miércoles a Estados Unidos una nueva propuesta para alcanzar una solución pacífica en la guerra no declarada de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) contra Yugoslavia y sostuvo que comparte con China la demanda de que los bombardeos contra la nación balcánica deben cesar, aunque rechazó haber integrado junto con Pekín una alianza contra el mecanismo transatlántico.
A pesar de que Moscú afirmó que luego de que Yugoslavia anunció ayer el retiro parcial de sus tropas de la provincia serbia de Kosovo le toca a la OTAN dar un paso hacia la paz, la alianza occidental calificó nuevamente esa decisión unilateral como insuficiente y aseveró que los bombardeos continuarán, al tiempo que subrayó que no hay evidencias de un repliegue militar en esa convulsionada región.
El enviado ruso a los Balcanes, Viktor Chernomirdin, regresó esta noche a Moscú luego de haber sostenido consultas con la dirigencia china en Pekín, y dijo que tenía "nuevas propuestas" para hacer al gobierno de Estados Unidos, y aunque no dio precisiones sobre las iniciativas, confirmó que las planteará al subsecretario de Estado, Strobet Talbott, cuando se entreviste este miércoles con él.
Rusia y China, dijo el ex primer ministro ruso, comparten la misma postura acerca de cómo finalizar el conflicto en la provincia de Kosovo, y resaltó que la condición principal para llevar a cabo conversaciones de paz es el cese de los bombardeos de la OTAN contra objetivos yugoslavos, pero rechazó que exista una "alianza entre Rusia y China contra la OTAN", refirió la agencia Interfax.
Poco antes de partir desde Pekín, Chernomirdin, quien se reunió con el presidente chino, Jiang Zemin, dijo que Pekín está dispuesta a analizar el plan del Grupo de los Ocho, integrado por los siete países más industrializados y Rusia, aunque subrayó que únicamente después de que hayan cesado los bombardeos.
El vocero de la cancillería china, Zhu Bangzao, dijo que si no se suspenden los bombardeos "no se puede hacer nada".
La iniciativa del Grupo de los Ocho contempla la participación de la Organización de Naciones Unidas, pero China, que tiene poder de veto por ser uno de los cinco miembros permanentes del Consejo de Seguridad, advirtió desde el pasado lunes que antes de cualquier discusión deben cesar los bombardeos aliados.
El canciller ruso, Igor Ivanov, instó a la OTAN a "que ofrezca una repuesta más seria" ante la decisión de Yugoslavia de comenzar a replegarse de Kosovo.
Occidente desea administrar Kosovo
El canciller francés, Hubert Vedrine, con quien Ivanov se encontró en Moscú, dijo que la Unión Europea desea encargarse de la futura administración provisional de Kosovo, junto con la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa.
Pero la alianza noratlántica advirtió que mantendrá su campaña aérea de bombar-deos contra Yugoslavia, que comenzó el pasado 24 de marzo.
El vocero civil de la OTAN, Jamie Shea, sostuvo que "no hay ninguna prueba de que el separatista Ejército de Liberación de Kosovo (ELK) haya sido derrotado, así como tampoco hay pruebas de un retiro parcial de fuerzas serbias de Kosovo".
Más aún, añadió el vocero militar de la OTAN, general Walter Jertz, las fuerzas serbias incrementaron sus operaciones contra los milicianos del ELK.
A todo esto, el diario Washington Post comentó que las fuerzas armadas yugoslavas pueden permitirse una retirada especial de Kosovo sin perder el control de la provincia serbia, pues durante su campaña de ocupación de la región alcanzaron la mayoría de sus objetivos y están en una posición de fuerza.
Shea reiteró que las cinco condiciones para cesar los bombardeos son la suspensión de los actos de violencia en Kosovo, el retiro verificable de esa provincia serbia de las fuerzas armadas, paramilitares y de la policía yugoslavaS, el retorno de los refugiados, la presencia internacional de seguridad para garantizar ese regreso y la definición de un marco político para el futuro de la provincia.
Y aunque Shea no lo dijo, la alianza noratlántica mantiene también el objetivo de derrocar al presidente yugoslavo, Slobodan Milosevic, lo que salió a flote cuando el primer ministro británico, Tony Blair, descartó la apertura de negociaciones con el mandatario balcánico y señaló que una Serbia sin Milosevic podría ser incluida en la Unión Europea y en la OTAN.
Por su parte, la secretaria de Estado estadunidense, Madeleine Albright, en un mensaje al pueblo serbio dijo que el presidente Milosevic y sus fuerzas armadas cometen atrocidades en Kosovo "en nombre del pueblo serbio".
La jefa de la diplomacia de Estados Unidos dijo que la OTAN lamentaba profundamente las pérdidas de vidas humanas, pero que la campaña aérea continuará hasta que cesen las atrocidades.
En el mensaje grabado en inglés, pero que será traducido al serbocroata, Albright indicó que Serbia pertenece a la comunidad democrática euroatlántica, pero que no podrá ser incluida en la misma mientras Milosevic y sus "corruptos compadres" no sean alejados del poder.
Victoria de Milosevic, el retiro parcial
El jefe del Pentágono, William Cohen, sostuvo que "no hemos visto evidencia de ningún retiro parcial, y en segundo lugar, un retiro parcial sería una victoria total" para Milosevic.
Así las cosas, los 28 países vinculados a la Unión Europea Occidental coincidieron en Bremen en la "imperiosa necesidad" de continuar los bombardeos de la OTAN a Yugoslavia a fin de imponer los objetivos políticos de la comunidad internacional.
De su lado, Alemania rechazó ante la Corte Internacional de Justicia de La Haya las acusaciones formuladas por Belgrado contra 10 naciones de la OTAN.
"Ni Alemania, ni ningún otro país de la OTAN han cometido ningún acto que esté relacionado con genocidio", afirmó, y rechazó "el intento de Yugoslavia de utilizar esta corte como plataforma para (lanzar) acusaciones falsas".
Y mientras el presidente checo, Vaclav Havel, manifestaba su confianza en una pronta solución a la guerra, el canciller griego, George Papandreu, advirtió contra un cambio de fronteras en los Balcanes,
En tanto, el portugués José Saramago, premio Nobel de Literatura, hizo un llamado a la movilización contra la guerra en Yugoslavia, como lo hicieron millones de personas hace 30 años contra la agresión estadunidense en Vietnam, en tanto que el cineasta ruso Nikita Mijaalkov, director del filme Ojos Negros, dijo que "desencadenar una guerra en Yugoslavia ha sido un dramático error" de Occidente.
n Condena Human Rights Watch el uso aliado de las bombas racimo
Intensifica la alianza atlántica sus incursiones aéreas
Afp, Dpa, Reuters y Ap, Belgrado, 11 de mayo n La Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) intensificó este martes sus ataques aéreos contra Yugoslavia y reanudó los bombardeos sobre Belgrado, que no había sido atacada desde el viernes pasado cuando fue alcanzada la embajada china.
La emisora independiente Studio B dio cuenta que dos altos responsables del gobernante Partido Socialista, Dusan Matkovic y Goran Aleksic, resultaron heridos en los bombardeos contra la zona industrial de Nis, 220 kilómetros al sur de Belgrado, a donde fueron inspeccionar daños ocasionados por los ataques del domingo.
En Nis se reportó además la muerte de un hombre y heridas a otras cinco personas, mientras que en la localidad de Staro Gradsko, en la provincia serbia de Kosovo, tres personas perdieron la vida, entre ellas una niña de cuatro años.
Una pareja murió al ser bombardeado un puente en Vladicin Han, en el norte de Serbia, y un número indeterminado de personas fallecieron en el poblado kosovense de Svetlje, mientras que en el campamento ubicado en Paracin, en el sur de Belgrado, de refugiados serbios procedentes de Croacia y Bosnia, se escucharon esta noche unas 15 explosiones.
Los blancos atacados este martes incluyeron fábricas en Belgrado y en la sureña ciudad de Nis, la tercera del país.
Mientras, la organización humanitaria Human Rights Watch condenó el uso de las bombas racimo en la campaña contra Yugoslavia, y dijo que "las cargas que no hacen explosión dentro de las bombas racimo se convierten en minas terrestres".
"Al igual que las minas terrestres antipersonales, estas armas matan a los civiles hasta años después de concluido el conflicto bélico", sostuvo el director de la División de Armas de Human Rights Watch, Joost Hiltermann.
Pero un vocero de la OTAN, el capitán Mike Doubleday, indicó que la alianza "ha llegado a extraordinarios extremos para evitar hacerle daños a los civiles inocentes", y agregó que las armas son escogidas cuidadosamente "tomando en cuenta donde se encuentran los blancos y el posible daño eventual".
Doubleday consideró que Human Rights Watch debería concentrar sus críticas en las atrocidades que, a juicio de la alianza noratlántica, realiza el presidente yugoslavo, Slobodan Milosevic.
Las autoridades yugoslavas han atribuido a bombas racimo, que arrojan explosivos luego que estallan nuevamente, la muerte de al menos 15 personas, en días pasados, cuando estallaron cerca de un centro hospitalario y un mercado en la sureña ciudad industrial de Nis.