n Amenazas de muerte contra él y Rodrigo Figueroa

Secuestran y navajean a un estudiante del CCH Sur

Víctor Ballinas n El estudiante del CCH Sur, Juan Carlos Zárate, de 17 años, activista en el consejo de huelga, fue secuestrado ayer por cuatro horas y media, de las 18 horas a las 22:30, cuando salía del plantel y se dirigía a su casa. En ese lapso, lo golpearon con pistola, y con un cuchillo le navajearon el abdomen, el pómulo derecho y la espalda.

Es la segunda ocasión que este joven estudiante es secuestrado por sus actividades en el consejo de huelga. La primera vez, lo subieron a un Cavalier verde, cuatro puertas, y fue el martes por la tarde. En esa ocasión sólo lo retuvieron hora y media y lo amenazaron: "Bajénle de huevos. Dile a Rodrigo Figueroa que le baje, que lo tenemos bien identificado, que lo vamos a matar, pero primero vamos a agarrar a pendejos como ustedes, y si siguen, también te vamos a matar".

Ayer por la tarde, nuevamente Zárate fue secuestrado y amenazado. Entrevistado a la una de la mañana de hoy en la 50 agencia investigadora del Ministerio Público , donde presentó denuncia por los hechos , aún se le veía nervioso, intranquilo y somnoliento, por la sustancia que le dieron a inhalar sus secuestradores.

Juan Carlos narra lo siguiente: "Cuando salí del CCH Sur, un Jetta guinda abrió la puerta. Me pegaron, me tiraron al piso, me dijeron que por qué había levantado el acta anterior, que ya me habían dicho que "le bajáramos de huevos. Que ahorita a mi principal líder no lo podían tirar, pero ya lo iban a hacer pronto; que primero empezaban por pendejos como yo.

"Me ponen una gasa, me da mucho sueño. Recibí una llamada de mi mamá, al celular; me dicen que me calle, que no le diga nada. Yo no digo nada. Cuando suena el teléfono, me pegan con un arma en la cara -aquí, se lleva la mano al pómulo derecho-. Después me empezaron a poner una bolsa de supermercado en la cabeza. Me dicen que ahí están las consecuencias; que no proceda ante lo que habían hecho. Que me mataban si yo levantaba acta.

"Con una navaja, bueno, eso supongo, me dicen: vamos a jugar a que se muere. Como estaba yo boca abajo, me hacen un rasguño en la espalda. Luego me voltean, me tapan los ojos con sus manos. Me ponen el arma en la boca; como no quiero abrirla, me golpean con la pistola -muestra el labio hinchado".

Juan Carlos se lleva las manos a la cabeza, se recarga en el mostrador. Cierra los ojos y trata de recordar.

"De la calle de Cataratas, cerca del CCH Sur, me secuestraraon. Iba yo a mi casa. "Un tipo gordo, de bigote, pelo chino, de traje negro, me jaló y me tiró al piso. Fue la misma táctica que en el Cavalier, en el anterior secuestro. El Cavalier no tenía placas; en éste, no vi".

-ƑQuiénes eran, cómo eran?

-No los vi. Eran cuatro, parecían policías.

Rodrigo Figueroa, quien acompañó a Juan Carlos a levantar la denuncia. dijo a este diario: "Secuestraron a mi amigo, pero la lógica de la intimidación no nos va a hacer dar ningún paso atrás. Tenemos la fuerza y la razón. Exigimos a las autoridades dejen la lógica de la provocación e intimidación".