n Está integrada por representantes de 26 universidades del país
Conforman la Coordinadora Nacional de Estudiantes
Alma E. Muñoz n Representantes de 26 universidades del país conformaron ayer la Coordinadora Nacional de Estudiantes para defender la gratuidad de la educación pública superior y luchar en contra del modelo neoliberal impuesto a la nación.
Este es el primer acuerdo que alcanzaron en el tercer Encuentro Nacional de Estudiantes ''en rebeldía'', como plasmaron en una pancarta de presentación dentro del auditorio Ché Guevara de la Facultad de Filosofía y Letras.
A la coordinadora nacional también accederán representantes de algunas instituciones privadas como las universidades Iberoamericana, Lasalle y el Tecnológico de Monterrey. Una alumna de la primera señaló que se debe establecer un frente común entre estudiantes de todas las instituciones para superar los conflictos académicos que también involucran a los de la iniciativa privada, y buscar que el subsidio federal llegue a todas las escuelas.
De acuerdo con los planteamientos, la Coordinadora Nacional de Estudiantes no permitirá en ninguna universidad pública del país el aumento de cuotas y, para ello, los alumnos de la UNAM les dieron la pauta con la suspensión de actividades que hoy cumple 26 días.
Para iniciar los trabajos, se acordó conformar comisiones de enlace con un mínimo de dos y máximo de cinco representantes en cada una de las instituciones. Tendrán como objetivo realizar brigadeos en sus respectivos planteles para informar sobre la plataforma de lucha y el plan de acción, que hoy se definirá en la continuación del encuentro.
La educación pública del país, para los representantes escolares, presenta un ''grave riesgo de extinción'', y ante ello es necesaria la solidaridad estudiantil a nivel nacional y, de ser posible, establecer contactos con similares fuera del país.
Esta nueva agrupación deberá tener carácter de asamblea permanente y constituirse en un órgano de resistencia civil ante el ''desmantelamiento y agresiones que sufren las universidades en todo México''.
Con esto, para el Consejo General de Huelga de la UNAM se reafirma que su movimiento tiene una gran aceptación y, por tanto, no cabe la posibilidad de un ''resquebrajamiento''. La suspensión de labores representa la urgencia por defender la educación pública y gratuita. La fuerza adquirida pretenden inicialmente presentarla en la marcha del 21 de mayo, en donde se unirán estudiantes, maestros y electricistas.
Hubo el pronunciamiento por que más adelante se refuerce la idea de desconocer a Francisco Barnés de Castro como rector de la Universidad Nacional Autónoma de México, por sus intenciones de ''privatizar'' la educación en la máxima casa de estudios.
También queda pendiente la posibilidad de vincularse con grupos de investigadores que ''ayuden a clarificar en qué contexto se dan las luchas estudiantiles''.
Lo cierto es que en este encuentro, el consenso se avizoró desde los primeros momentos para conformar la coordinadora y luchar, además, por la abrogación del reglamento de pagos. ''El movimiento estudiantil requiere para ello de un frente nacional que vaya en contra de las políticas privatizadoras del gobierno'', y con esta nueva agrupación pretenden impedir aquellas disposiciones oficiales que pueden representar un peligro para la gratuidad en la educación superior.
Por otra parte, quedó pendiente de discusión la propuesta de David Lozano, profesor de Economía, quien habló de la posibilidad de que una comisión del CGH se traslade a Chiapas para sostener un encuentro con la comandancia del EZLN, a fin de cumplir con el compromiso de mantener contacto permanente con el grupo insurgente. Entre los anuncios para refrendar el apoyo a los paristas, resaltó el de la UAM Iztapalapa, en donde sus estudiantes realizarán un paro activo de labores el próximo jueves y trabajan para consensar que los alumnos de los tres planteles de dicha institución protesten frente a la rectoría de la misma, por las políticas emprendidas por su titular, José Luis Gázquez.