n Nosotros no quisimos llegar así al 2000: Marcos

Interesa a Zedillo dejar al EZLN como tema electoral

Ap, La Realidad, Chis, 23 de mayo n El gobierno mexicano no está interesado en poner fin al conflicto con el Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) porque desea utilizarlo como tema de campaña para las elecciones del 2000, declaró el subcomandante Marcos en entrevista con AP.

"El EZLN no apostó llevar la solución del conflicto al 2000, quisimos llegar con una solución avanzada como lo propusimos en 1996, porque el proceso de paz no iba a estar sujeto a la volatilidad de la sucesión presidencial", declaró.

Pero el presidente Ernesto Zedillo "quiere hacer capital político teniendo en impasse el conflicto indígena de Chiapas, ya que de esa manera asegura un factor de desestabilización en el sureste de México.

"El gobierno mexicano mandó a último término la pacificación de Chiapas porque lo que le interesa ahora es la selección del candidato de su partido, el Revolucionario Institucional, a la Presidencia del país."

Marcos fue entrevistado sentado a la sombra de un gigantesco árbol ceibo, en medio del trinar de pájaros selváticos, escoltado por el comandante zapatista Tacho. La entrevista fue concedida a AP después de cinco días de espera en la sede del cuartel del EZLN, donde la pobreza se refleja en las humildes chozas de madera.

Con el rostro oculto tras su clásico pasamontañas, vestido de pantalón negro, chaquetilla café y gorra, su pipa en mano y un fusil AR15 cruzando su espalda, Marcos advirtió que el gobierno está preparando una ofensiva militar para aplastar a los zapatistas.

"El gobierno no ha abandonado la opción de las armas y espera el momento oportuno para soltar el golpe, pero el EZLN tiene la capacidad militar para responderle", declaró.

No obstante, vaticinó que "llegue quien llegue a la Presidencia del país deberá cumplir los acuerdos en materia indígena, abandonar la opción militar y entrar al proceso de paz de manera definitiva".

Marcos fue entrevistado en esta aldea enclavada en la selva Lacandona, donde el EZLN se sublevó en 1994 reclamando mayor respeto a los derechos de las empobrecidas comunidades indígenas del sur mexicano.

Dijo que los zapatistas insistirán en cualquier acuerdo en que se respeten los derechos de los indígenas, y denunció que "la apuesta del gobierno es desaparecer a los indígenas de Chiapas porque son anacrónicos, que no tienen que existir a fines del milenio, ya que ven la tierra no como mercancía, sino como historia y cultura".

Negó versiones de ruptura en las filas zapatistas, y afirmó que "fue el gobierno quien vendió esta versión. No, dentro de las filas zapatistas no existen disputas ni cuestionamientos, menos fracturas.

"Lo que pasa es que el gobierno no logra entender por qué después de cinco años de golpeteo con su manual de contrainsurgencia norteamericana, el EZLN no se desfonda".

Marcos insinuó que de llegar a un acuerdo con el gobierno, el EZLN podría convertirse en partido político: "en el momento que los pueblos indígenas conquisten los reconocimientos de sus derechos y su cultura, el EZLN habrá saldado su cuenta principal y se enfrentará a otro futuro como fuerza política, social y militar.

"Los indígenas ya no quieren ser víctimas de la historia, no quieren seguir siendo gente retrasada e ignorante, quieren ser actores de la historia, que los respeten y reconozcan como lo que son".