CLASE POLITICA ŤMiguel Angel Rivera De resultar ciertas las encuestas realizadas en Nayarit, la sola unión de los partidos opositores no garantiza en forma automática la derrota del PRI.

En Nayarit, por primera vez se unieron PAN y PRD -- así como el PT y el local PRS -- con el agregado de lo que parecía un excelente candidato: el empresario y ex funcionario estatal Antonio Echevarría, considerado el hombre más rico del estado.

Por el lado contrario, el PRI tuvo muchos tropiezos en el proceso de selección de su candidato. El obstáculo número uno lo fue el gobernador saliente, Rigoberto Ochoa Zaragoza, de estilo rudo, con tendencia a llevar el control absoluto, por lo que pretendió erigirse en el gran elector, en franca oposición al proceso democratizador en su partido.

Como resultado de los problemas internos quedaron al margen los precandidatos en apariencia más fuertes, como el presidente municipal de Tepic, Félix Torres Haro, y el senador y general Alvaro Vallarta, medio hermano de quien finalmente resulto vencedor. No hubo elecciones internas, pues los aspirantes decidieron escoger a uno entre ellos, de- cisión que recayó en Lucas Vallarta, hace seis años desplazado a última hora.

Cuando Antonio Echevarría logró reunir en torno suyo a PRD y PAN, y dada la aparente debilidad del abanderado del PRI -- al cual ni siquiera se ha acusado de tener a su disposición los recursos gubernamentales -- en muchos medios se dio por hecho que sería el triunfador.

Pero no fue así. Lejos de que el pueblo entero se sumara al aparente vencedor, la sociedad nayarita está dividida, con el PRI como primera fuerza, según las encuestas. Apenas el sábado anterior apareció en la prensa local una realizada por la empresa Ingeniería Avanzada de Guadalajara, en la cual el PRI recibió 46 por ciento de respuestas favorables y la alianza 32 por ciento. Los otros tres candidatos, postulados por PVEM, el local PMEP y lo que queda del PPS, no llegan, sumados, ni a 5 por ciento.

Las elecciones de gobernador del estado de México, que se realizarán el mismo domingo 4 de julio que las de Nayarit, son consideradas un laboratorio de lo que podría suceder en los comicios presidenciales del 2000. Pero Nayarit tal vez resulte más aleccionador, por los intentos opositores de formar un frente común que supuestamente acabaría con la prolongada hegemonía del tricolor.

 

La cosecha

Antes de que se defina el destino de la coalición opositora en Nayarit ya se perfila otra alianza PAN-PRD, con el agregado de PT y PVEM en Coahuila...Hoy, el ex presidente del PRI Humberto Roque Villanueva renunciará a su cargo de director de la Aseguradora Hidalgo para dedicarse de lleno a su campana electoral...Mañana martes, el proceso interno del PRI para nominar a su candidato presidencial tendrá otro vigoroso impulso a partir de la entrevista conjunta de los cuatro precandidatos visibles -- Manuel Bartlett, Francisco Labastida, Roberto Madrazo y Humberto Roque Villanueva -- con el presidente de la comisión reguladora del proceso interno, Fernando Gutiérrez Barios, respecto a las reglas para la contienda interna...De seguro el encuentro se facilitará por el anuncio del presidente nacional del tricolor, José Antonio González Fernández, de que pedirá la renuncia a los dirigentes partidistas que ya se han manifestado a favor de alguno de los precandidatos, quienes tampoco podrán ser funcionarios electorales en el proceso interno...

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