n Opera prima de Antonio Serrano
Auguran éxito para la cinta Sexo, pudor y lágrimas
n Varias empresas se disputaron la distribución del largometraje
Raquel Peguero n Si la magnitud del reventón tiene una relación directamente proporcional con el éxito de una película, el celebrado anteanoche para Sexo, pudor y lágrimas, de Antonio Serrano, no deja la menor duda de que el filme será un cañonazo. Y todo mundo lo espera, no sólo eso, lo augura, como si fuera el jinete de la Divina Providencia que abrirá los ojos del espectador mexicano hacia su cine -después de la gruesa venda que le ha endilgado la industria de Hollywood- y lo lleve de la mano de retorno a las salas.
La noche en el teatro Metropólitan, donde se realizó la premier, fue apenas una probadita de los alcances de este largometraje que fue disputado, cosa insólita para un producto nacional, por varias empresas para su distribución, hasta que ganó el colmillo de la Twentieth Century Fox, que se encargará de llevarlo a todo el país.
Y es que la opera prima de Antonio Serrano tiene con qué seducir al espectador: se trata de una producción cuidadosa, con actores de primera, inclusión de diálogos inteligentes y divertidos y una dirección tan ágil que hace olvidar que contienen demasiadas palabras para una película, pero que sin duda la astucia del realizador las vuelve una cualidad.
Primer filme producido por Argos
Como obertura para la proyección, Aleks Sintek interpretó la música que escribió especialmente para la película protagonizada por Demián Bichir, camaleónico actor que detona esta comedia de enredos, junto con la estupenda Susana Zabaleta y los estrenos en la pantalla grande de Mónica Dione, Víctor Huggo Martín, Cecilia Suárez y Jorge Salinas.
El aplauso con que Sexo, pudor y lágrimas fue celebrado después de su proyección, fue tan largo como la fila que esperaba para felicitar tanto a Serrano como a los actores, durante la fiesta que se ofreció en el Salón México.
Con una escenografía a base de globos y la música interpretada por dos orquestas para una multitud que apenas podía moverse, se brindó por el éxito y los que vienen para la primera película producida por la empresa Argos, que anunció además que ya prepara su segunda aventura cinematográfica, Los relámpagos de agosto, basada en la novela homónima de Jorge Ibargüengoitia.
El estreno nacional será el 18 de junio.