n Autor del libro En la más honda música de selva
Compatibles, la globalidad y las capacidades nacionales: Alcaraz
n Explora la obra de 13 prestigiados compositores mexicanos
Arturo Jiménez n La globalidad y las capacidades nacionales no están reñidas, sostiene el músico y crítico José Antonio Alcaraz, autor de En la más honda música de selva, libro en el que explora la obra de 13 compositores de nuestro periodo nacionalista. Plantea Alcaraz: ''Diría que fue la etapa decisiva en este siglo, pero eso es una valoración personal".
El afán del también narrador es difundir la música de concierto escrita en México, ''por desgracia muchas veces ajena para el consumidor nacional, empeñado en sólo oír a Beethoven, Schubert y Brahms".
Señala que el nacionalismo en nuestro país fue un momento ''de apogeo y congruencia, no sólo en la música sino en las artes y en la cultura. No todos sus productos fueron esplendorosos, pero los que dieron en el blanco han sido de los más importantes".
En la más honda... (CNCA) surge de revisar un trabajo concebido en un principio para comentar una serie de discos sobre el tema, ideada por René Solís. El libro contiene un ''preludio" de Héctor Anaya y dos textos introductorios de Alcaraz, uno sobre el nacionalismo musical europeo.
Los compositores abordados son Manuel M. Ponce -en un sentido convencional el precursor de esta corriente-, José Rolón, Julián Carrillo, Candelario Huízar, Antonio Gomezanda, Carlos Chávez, Silvestre Revueltas, Eduardo Hernández Moncada, Luis Sandi, Blas Galindo, Miguel Bernal Jiménez, José Pablo Moncayo y Carlos Jiménez Mabarak.
Estos, como dice Anaya, exploraron ''los recursos de la vanguardia" y supieron ''mirar hacia atrás", como Bach, Haydn o Mozart al recrear su música popular.
Se considera como año del surgimiento de la música nacionalista mexicana de concierto a 1928, con la creación de la Orquesta Sinfónica de México, y el de 1958 su término, con la muerte de José Pablo Moncayo.
-Uno de los aspectos más novedosos del libro es el rescate de Antonio Gomezanda.
-Hay dos capítulos nuevos, Gomezanda y Eduardo Hernández Moncada. Ambos me parecen importantes y es una desgracia que su música no se oiga tanto.
Alcaraz recuerda a Gomezanda ''como un caballero bondadoso y gentil, correcto y cariñoso". Con el paso del tiempo, dice, ha corroborado con agrado que ''más allá de los chismorreos y partidarismos", es un músico de gran valor y ''merece estar al lado de los compositores más conocidos".
-Pero también se habla de cierto pintoresquismo en Gomezanda.
-Creo que él no supo trascender por entero ese pintoresquismo. Con frecuencia osciló entre sus convicciones y sus placeres, y no siempre salió bien librado en la batalla. Pero hay otras veces que šqué bárbaro! No he oído nunca una versión tan esplendorosa de La bamba, como la suya.
Arte sonoro para la introspección
-ƑY Eduardo Hernández Moncada?
-Es una de las figuras, un hombre de una solidez impresionante, ahí está la grabación de su primera sinfonía, que acaba de sacar Eduardo Diazmuñoz, prueba del gran creador que fue. Este año es el centenario de su nacimiento.
-ƑQué se puede sentir o reflexionar hoy a partir de escuchar la música de aquellos compositores nacionalistas mexicanos?
-Puede ser un orgullo justificado y legítimo, como me ha sucedido al oírlos en Londres, La Habana, Amsterdam, Madrid. Puede ser un placer enorme porque en mucha de esta música hay una sabrosura jugosa y evidente. Puede ser también motivo de introspección: ellos encontraron los términos óptimos que establecieran una congruencia entre su época, las necesidades del país y sus ánimos individuales. Tendríamos que ser capaces, hoy, de hacer otro tanto, Ƒno?
-De la música nacionalista mexicana se dice que es más externa que interna.
-No lo creo. Hay obras de Sandi, Galindo, Rolón, donde la introspección está presente con mucha fuerza. Lo que pasa es que la apariencia vistosa, colorida, nos seduce más. Y si hay un compositor introspectivo en México, pues ése sigue siendo Chávez.
-Cuando se escucha ''nacionalista" o ''nacionalismo", la evocación choca un poco en este presente globalizador.
-Es cierto. Pero no creo que la globalidad y las capacidades nacionales estén reñidas. En la globalidad reside el hoy, pero éste no sería posible si no hubiera una acumulación de circunstancias históricas, sociológicas, artísticas, ideológicas, que desembocan en la actualidad.
''Nuestro siglo fue forjado a finales del XIX. Pensadores y artistas como Darwin, Marx, Nietszche, Wagner, Strindberg están inmersos en el XIX, viven ahí, ahí nacieron y fueron educados, y sin embargo ellos forjaron la acción del XX.
-Entonces, Ƒel nacionalismo en el arte sigue vigente?
-Por supuesto, sobre todo desde un punto de vista histórico.
-ƑY desde un punto de vista estético?
-No tiene vigencia, perdió su virulencia. El impresionismo, el romanticismo, el rococó, el Renacimiento, la Edad Media (deslumbrante, pese a las leyendas negras), tienen vigencia diferente de la que disfrutaron en su momento.
-Son creadores a los que la gente del presente se puede seguir acercando.
-Uno debe seguir acercándose. Para asomarse al futuro hay que consultar nuestras raíces.
(En la más honda... se presenta hoy, a las 19:30 horas, en la Casa del Poeta, Alvaro Obregón 73, Roma, con Maya Ramos, Anaya, Enrique Diemecke y el autor).