n Los reyes de la sierra refleja la cosmovisión de ese pueblo mixe
El mural de Alotepec, creación al alimón de la comunidad y el pintor
n Antonio Ortiz, Gritón: el verdadero mundo indígena me causó una revolución mental y creativa
Arturo Jiménez n Los del pueblo de Alotepec, en la región mixe de Oaxaca, ya tienen su mural: Los reyes de la sierra. Mientras, el detonador de esa obra conjunta, el artista plástico Antonio Ortiz, Gritón, experimenta ''toda una revolución mental y creativa" a partir de su acercamiento al ''verdadero mundo indígena".
El mural, creado con la participación directa de los pobladores, tiene 300 metros cuadrados y se ubica en las cuatro paredes y el techo del salón de cabildos del palacio municipal. Pintado al acrílico, en él se observa el presente de la comunidad, la producción de café, la naturaleza, la vida cotidiana, la organización comunal de ''un municipio autónomo en la idea zapatista".
Como aspectos fundamentales, aparecen una banda de músicos y la fiesta local de la Santa Cruz, el 3 de mayo. Pero también su historia, pues los mixes han resistido a los aztecas, a los españoles y, en los años cincuenta, a los soldados del Ejército, a quienes derrotaron. Uno de los sobrevivientes de aquella batalla puso la fecha final de la obra, durante la inauguración el pasado marzo.
Crear nuevos signos mixes
Esta historia comenzó hace tres años, cuando el intelectual mixe Adelfo Regino le propuso al Gritón que pintara un mural en Alotepec. Tras un segundo intento, el creador consiguió una beca del Fonca y se fue a vivir al poblado de mayo a diciembre de 1998.
Al principio, llegó con la idea de todo artista de plasmar ''su rollo", pero luego advirtió que los habitantes ni siquiera sabían qué era un mural. ''Cuando terminé de preparar las paredes con pintura blanca me dijeron que la obra estaba 'bonita', pero les dije que faltaba lo principal: los dibujos.
''Entendieron que se haría una pintura sobre ellos, acerca de las cosas que me dijeran. Pero aun así hubo un bache, un momento tenso, incluso pensé que el proyecto se suspendería, pues muchos se preguntaban qué iba a pintar y por qué. Después, en una asamblea del pueblo, ofrecí una explicación más amplia.
''A partir de ahí se involucraron, con ideas, pintando partes y sugiriendo lo que debía aparecer y lo que no. Es decir, ya no estaba ahí solito pintando mis rollos, sino que todo el tiempo los del pueblo permanecían encima, viendo, pintando, opinando".
Por eso el artista sostiene: ''La comunidad participó en la obra, son ellos los que están ahí. Es un mural del pueblo. No es uno que el Gritón pintó en Alotepec, sino el mural de Alotepec. Se sienten orgullosos, no es como aquí en la ciudad, cuando, por ejemplo, una señora pasa junto al Caballito, de Sebastián, y ni sabe qué es".
-ƑTuviste algún problema técnico cuando ellos pintaban?
-No. Muchos no sabían hacerlo pero yo los iba dirigiendo. A veces me preguntaban qué colores usar para algún aspecto y yo les hacía sugerencias.
-Sin embargo, el trazo era tuyo.
-A veces de ellos, a veces mío. El techo, sobre todo, es de ellos.
-ƑAhí no hubo trazo previo de tu parte?
-No, en ese caso yo era el de la idea y ellos la pintaban.
Y explica que, como al parecer los mixes no cuentan con testimonios pictográficos de su pasado, la intención fue que ellos elaboraran nuevos signos para representar sus ideas. ''Por ejemplo, una chava puso tres triángulos negros en medio de pintura rosa, y para ella eso simboliza un pueblo. Todo el techo es eso, signos nuevos hechos por ellos".
Vivir en el paraíso
Los reyes de la sierra se llama así, dice, porque en Alotepec ''viven como reyes", debido a sus propias condiciones geográficas e históricas. ''No es el mundo indígena que conocemos por medio de la prensa o desde la ciudad, sino que observé cómo, en condiciones óptimas, una comunidad se transforma en todo un paraíso".
-ƑPor qué?
-Porque la gente de ahí vive muy bien. Claro que tienen carencias, pero como ser humano alcanzas una realización mayor, un desarrollo personal más amplio, desde el punto de vista espiritual y filosófico. Es un pueblo con problemas normales, pero casi todos ahí se muestran muy contentos.
-Eso es en lo humano, pero a nivel plástico, Ƒqué te dejó esa experiencia?
-Me provocó toda una revolución mental. Además, el mural quedó como un resumen de los diversos momentos de mi trayectoria plástica, lo que sucedió de manera inconsciente: desde lo figurativo y näif hasta lo abstracto. A partir de eso, ahora trabajo con signos en mis cuadros.
El pintor confiesa que tras la lectura en Alotepec de Estética marxista, de Adolfo Sánchez Vázquez, trata de rescatar el sentido humanista del arte, ''la expresión misma del ser a la hora de pintar, la expresión pura de las personas". Y asegura que tanto él como los habitantes de la comunidad pintaron con toda libertad, ''embebidos, expresándose totalmente".
Como artista, afirma, ''eres un ser privilegiado de la sociedad. Todo esto es como un experimento y en cada cuadro que pinto ahora trato de estar consciente de ese momento, pues cada lienzo es un espacio de tiempo en que puedes expresarte como ser humano". Por eso, agrega, hay que alejarse un poco de los atavismos de las galerías, de las vanguardias.
Antonio Ortiz, Gritón, tiene el proyecto de una instalación y unos pequeños murales para la comunidad zapatista de Morelia, en Chiapas, por lo cual busca otra beca del Fonca. Propone, también, que los pintores traten de conseguir fondos para ir a trabajar en las comunidades. Ha expuesto de manera individual en los museos Carrillo Gil, de Arte Moderno y en galerías de Canadá, además de participar en muestras colectivas en varias partes del mundo.
Critica el poder de los compradores de arte y de los curadores de museos y galerías, pues unos imponen los criterios del mercado estético y otros deciden quiénes exponen. ''Ya no son los artistas los que determinan cómo evoluciona el arte, sino los curadores. Ante ello te quedas solo y te preguntas: ƑYo qué hago aquí? Y te comienzas a cuestionar hasta el acto mismo de pintar".
Por eso, prevé que a partir de este año, pero sobre todo del 2000, habrá una ''neorruptura" plástica en México. ''Se van a dar muchos movimientos de tipo callejero, en los que todo este arte que ahorita no tiene ninguna forma de salida hacia el espectador, la encontrará por sí mismo".
-ƑEn qué consistirá esa neorruptura?
-En estar muy al margen de lo que es el mercado del arte, es decir, de algún modo en trabajar para ti mismo, tratando de expresarte. Y si la obra que haces no se vende, no importa, es expresión y eso la hace válida.