n Serfin, una crisis tras otra
n Salinas y la privatización
n Abogados: Ƒvendidos o bandidos?
Tiene algún simbolismo el hecho de que la visita de Salinas de Gortari coincida con la crisis final de Serfin. En su sexenio se crearon las condiciones que más adelante atrajeron, sobre el sistema bancario nacional, los problemas que lo quebraron, al sobrevenir la devaluación del peso realizada por el presidente Zedillo, en diciembre de 1994. Fue el tiro de gracia. Ahora que vino a México por primera vez en varios años,a Salinas se le preguntó sobre muchos asuntos, particularmente de orden político, y apenas hubo un par de preguntas sobre la crisis bancaria. Vale la pena rescatar lo que dijo sobre el tema:
''Nosotros llevamos a cabo la privatización de la banca ųpuntualizó Salinas de Gortarių se hizo por métodos transparentes en subastas públicas; cuando la hicimos nos dijeron que se vendían baratos los bancos; ahora dicen que se vendieron caros. Pero me parece que lo más importante fue que ese proceso se llevó a cabo precisamente con reglas claras''.
''La banca ųagregóų tenía problemas en noviembre de 1994, pero creo que es importante precisar de qué magnitud, en qué consistían: hay reportes muy precisos que muestran exactamente cuáles eran los niveles en noviembre de 1994 de cartera vencida, de perfiles de los bancos, y eso es, en todo caso, lo que creo que ilustraría un debate sobre esas circunstancias''.
Salinas forever
Como es costumbre, mintió. La transparencia de la venta ųahora se sabeų consistió en reunir a un grupo de financieros amigos, en el que estaban Cabal, Lankenau y El Divino, entre otros, para decirles: ''Fórmense, muchachos, porque vamos a entregar los bancos''. Los problemas que ya enfrentaban éstos no eran mínimos: la cartera vencida sobrepasaba los niveles que recomiendan la prácticas internacionales. Pasan los años y Salinas sigue siendo el mismo rollero de siempre.
Tenemos un fax
Me llegó este mensaje: ''Leí con gran interés el comentario publicado el 8 de junio que se refiere a la posibilidad de que hayan prescrito adeudos bancarios. Lo que más atrajo mi atención es lo dicho por su corresponsal respecto al cuidado que debe tenerse con los abogados. Coincido, ya que me considero víctima de un abogado a pesar de que venía con todas las recomendaciones del mundo. Además de sacarme una lana, nunca me ha devuelto la documentación relativa al asunto (un despojo) que le había encomendado. Incluso, recurrí a Hacienda, tratando de probar, con los depósitos que había efectuado,de los que el susodicho jamás me había entregado recibos, lo que permití, dada la confianza de quienes lo recomendaron. A su amigo le sugiero: unámonos, comencemos un movimiento nacional para conseguir una defensoría frente a los abogados vendidos o bandidos.
Elena Milán
R: ƑNo sería un buen comienzo compartir con el público el nombre de este bribón? Aunque sólo sea para el efecto de que la próxima víctima no sea sorprendida tan fácilmente.