El temblor más fuerte desde 1864, en Puebla

Aunque Puebla no es una de las ciudades más castigadas por los sismos en México, tiene una historia importante en este terreno.

Según información proporcionada a este diario por la doctora Virginia García Acosta, especialista en el tema, entre los movimientos más fuertes se cuentan los siguientes: el del 30 de junio de 1667, el del 16 de agosto de 1711, el de 1937, y el más reciente, en 1973. Todos ellos produjeron cierto daños de consideración en las personas y en las construcciones.

Pero el que se registra como el de mayor intensidad es el del 3 de octubre de 1864, conocido como el "Temblor de San Gerardo", que impactó la ya de por sí entonces sufrida ciudad, seis minutos antes de las 2 de la mañana. Las crónicas lamentaban la muerte de 20 personas, "entre ellas, varios soldados franceses" y muchos heridos.

Fueron varias las poblaciones de los estados de Puebla y Veracruz afectadas por el fenómeno natural, pero los mayores daños se produjeron en la ciudad capital. Fueron afectados edificios públicos, como el de la Aduana; el colegio Carolino; el seminario; el manicomio de San Roque, el de San Juan de Dios, el de San Pablo y el de San Pedro; así como el palacio de Gobierno, el palacio municipal (que era un edificio distinto al que conocemos hoy, ya que éste se fundó en 1896) y la Santa Escuela, entre otros

Hubo otros recintos eclesiásticos dañados, como la Catedral, las Capuchinas, la Concepción, San Agustín, el Palacio Episcopal, la Compañía de Jesús, San Javier, La Soledad, La Concordia y Santiago.


n Tuvo una duración de un minuto con 47 segundos, recuerda especialista


Otro de intensidad 7 ocurrió en la misma zona en 1980

Carlos Valdez, investigador del Departamento de Vulcanología y Sismología del Servicio Sismológico Nacional (SSN), recuerda que el 24 de octubre de 1980 se registró un sismo de 7 grados en la escala de Richter, con epicentro en la misma zona que el de ayer, entre los estados de Puebla y Oaxaca, donde al menos 40 personas perdieron la vida.

El sismo se presentó un viernes a las 8:54 horas, recuerda el investigador, y tuvo una duración de un minuto con 47 segundos, lo que provocó algunos daños importantes en la ciudad de México, como el derrumbe de un muro en el campus de la Universidad Autónoma Metropolitana, daños en la cúpula de la iglesia de San Antonio Abad, rotura de ductos de agua potable y cuarteaduras en otros edificios.

Sin embargo, explicó, no ha sido el único sismo de fuerte intensidad que ha afectado a la capital del país. En 1957, recordó, otro movimiento telúrico, con epicentro en las costas de Acapulco, provocó la caída de la Victoria Alada, conocida como el Angel de la Independencia, y derrumbó las escaleras del multifamiliar Juárez, el mismo que se vino abajo con el terremoto de 1985.

Asimismo, en 1979 se dio el sismo de Petatlán --nombre que adquirió por la ubicación de su epicentro en el estado de Jalisco--, el cual tiró un edificio de la Universidad Iberoamericana.

El SSN señala que los sismos más peligrosos son los que ocurren a lo largo de las costas del Pacífico, entre las ciudades de Puerto Vallarta y Tapachula, donde no sólo se presentan con mayor frecuencia, sino los de mayor intensidad y que por su cercanía a las costas representan un peligro para la población asentada en la región costera y que también afectan al valle de México. (AB)