n Destruye el agua casas y vehículos al desbordarse el arroyo Topo Chico


Doce muertos y 33 desaparecidos deja una tormenta en Monterrey

n Acusan de negligencia a las autoridades n El gobernador Canales pedirá apoyo a la Federación

David Carrizales, corresponsal, Monterrey, NL, 15 de junio n Al menos 12 muertos, 33 desaparecidos y cuantiosos daños materiales por la destrucción de vehículos, casas y muebles, así como más de 11 mil usuarios de la CFE sin energía eléctrica, ocasionaron las lluvias que se abatieron sobre la zona metropolitana durante la noche del lunes y la madrugada de este martes.

Ante las críticas de los damnificados, que acusaron de "negligencia" a las autoridades, el gobernador Fernando Canales Clariond aseveró que si bien técnicamente la responsabilidad sobre el arroyo Topo Chico, que se desbordó, corresponde a la Comisión Nacional del Agua (CNA), "no voy a lavarme las manos porque tengo una responsabilidad, moral, social y política".

El mandatario demandó apoyo de la Federación, y argumentó que la entidad, con una deuda de más de 8 mil millones de pesos, carece de recursos para emprender las obras de drenaje pluvial que requiere la zona metropolitana de Monterrey, que tendrían un costo superior a 3 mil millones.

Lluvia-en monterrey En tanto, el Ejército Mexicano puso en práctica el Plan DN-III con el fin de apoyar a la población civil en las áreas aledañas al arroyo Topo Chico y en las avenidas Fidel Velázquez y Miguel Barragán, donde se presentaron los mayores problemas por las fuertes corrientes de agua que arrastraron unos 40 vehículos, algunos incluso con sus ocupantes a bordo.

Numerosas personas lograron salvar la vida gracias al apoyo que les brindaron civiles y trabajadores de la Universidad Autónoma de Nuevo León, que rebasaron la respuesta de las autoridades.

El gobernador Canales recorrió la zona afectada horas después de que había pasado el peligro y tras de haber departido en un desayuno con los banqueros de Nuevo León en el Club Industrial.

Juan Emilio García, subgerente técnico de la CNA, señaló que las precipitaciones alcanzaron 70 milímetros, pero la situación se agravó por el deficiente sistema de drenaje pluvial ųque se mantiene sin mejoras desde hace 30 añosų, lo cual provocó que el arroyo Topo Chico, canalizado parcialmente hace 15 años, tuviera un gasto de 298 metros cúbicos por segundo y la corriente alcanzara una velocidad de 60 kilómetros por hora.

Diversos voceros de oposición criticaron la "negligencia" e "incapacidad" de las autoridades estatales y municipales para prevenir la pérdida de vidas humanas.

El gobernador aseguró que los automovilistas no acataron las instrucciones de militares y agentes de tránsito. De haber obedecido, agregó, "algunos de los muertos estarían ahorita con nosotros".

Oswaldo Flores Gómez, director de Protección Civil, informó que se tenía confirmado el fallecimiento de 12 personas y la desaparición de 33, aunque la Cruz Verde de Monterrey tenía los nombres de 101 personas extraviadas.

Señaló que el chubasco rebasó la capacidad de respuesta de las autoridades, y argumentó: "son fenómenos completamente inesperados, no se tenía un pronóstico de que (la lluvia) sería de esa magnitud, se esperaban de diez a 15 milímetros".

El alcalde de Apodaca, Rafael García Garza, reportó inundaciones y daños materiales en viviendas de las colonias La Teresita, El Mezquital y Nuevo Mezquital.

En Monterrey, las colonias más afectadas por inundaciones fueron La Ferrocarrilera y Simón Bolívar, donde unas 350 familias sufrieron la pérdida de muebles, ropa y hasta la despensa.

La CNA pronosticó más lluvias y chubascos para las próximas horas.

Se generalizan las lluvias entidades afectadas por la sequía

Las lluvias se generalizaron en el resto de los estados afectados por la sequía, como Durango, Sonora, Tamaulipas, Coahuila y Chihuahua, aunque en algunos municipios hubo cientos de damnificados y en las ciudades anegamientos y caos vial.

En Chihuahua, la Secretaría de Desarrollo Rural informó que en la región sur el temporal afectó 70 por ciento de la siembra de chile, cebolla y nogal. En el Valle de Allende, los productores de algodón reportaron daños totales, y en el noroeste al menos 30 por ciento de la fruta fue derribada de los árboles. (Miroslava Breach, corresponsal, y Notimex)