n Obra de Fernando del Paso que dirige Ibáñez


Por fin estrenarán La muerte se va a Granada, en el Helénico

n El próximo octubre será montada en el festival Cervantino

Yanireth Israde n Prevista originalmente para estrenarse el año pasado en el Festival Internacional Cervantino, pero frustrado su montaje luego que el director Mario Espinosa decidió retirarse del proyecto, La muerte se va a Granada, obra teatral escrita por Fernando del Paso, inicia por fin temporada en el Centro Cultural Helénico a partir del viernes 18, bajo la batuta escénica de José Luis Ibáñez. El próximo octubre será montada en el Cervantino de Guanajuato.

El Consejo Nacional para la Cultura y las Artes, institución encargada de la ''gran producción" ųque costó un millón de pesosų, consideró que la obra ''llegó a las manos apropiadas". Un texto de esa naturaleza ''requería la forma y visión de un director capaz de coordinar a un equipo integrado por 40 personas, entre elenco y producción. Por ello, quién mejor que un hombre de teatro con la experiencia en el montaje de obras difíciles de resolver técnicamente", como Ibáñez.

Comenzar desde el principio

''Las circunstancias en que la obra funcionó antes de que llegara a mi responsabilidad son ajenas a mi experiencia y totalmente respetables", señaló José Luis Ibáñez.

''En mi caso, también hubo proyectos que dejaron de estar en mis manos y pasaron a otras; para esta puesta en escena comenzamos el trabajo desde el principio porque sería un error de mi parte tratar de ligar mi experiencia con la que existió anteriormente, de manera que son dos esferas bien separadas y es tan legítimo del otro equipo haber detenido o dejado el proyecto, como legítimo de parte de nosotros tomarlo si está libre.

"Vi la lectura en atril dirigida por Mauricio Jiménez ųprosigue Ibáñezų y en ese entonces estaba ya comprometido a hacerme cargo de la obra; inicié otro camino y no pensé seguir lo que él había hecho."

foto1 En ese sentido, dice, ''es bueno que haya matices" y añade que el texto de Del Paso seguramente generará muchas versiones, lo cual es beneficioso porque las obras mexicanas se representan muy poco.

Ibáñez se define como gran admirador de Fernando del Paso; por eso, cuando vio publicado el anuncio en el que el escritor solicitaba director para su obra, se puso en contacto con él y ahora anuncia felizmente la culminación de su trabajo.

La muerte se va... ciertamente es una obra poco ordinaria. Está escrita en un lenguaje ''desacostumbrado", es decir versos (octosílabos, endecasílabos y alejandrinos) y aunque recoge pasajes de la vida del poeta y dramaturgo andaluz, no es una reconstrucción histórica ni se recita un solo poema de García Lorca, tan sólo una línea: ''Y la vida no es noble, ni buena, ni sagrada''.

Por un lado ųaclara el director teatralų narra la historia real de los últimos días del poeta y, por otro, ''sus propias visiones, sus pesadillas, sus sueños que ha imaginado de manera singular Del Paso. Ambos mundos se integran y forman una sola experiencia escénica".

El autor de Noticias del Imperio concibió la obra en verso como un homenaje al autor de Bodas de sangre, ''quería celebrar su vida en ella y condenar la imperdonable infamia de que fue víctima".

En 1996 cumplió su propósito con el libreto de La muerte se va a Granada, publicado por Alfaguara.

El novelista mexicano escribe los versos con tal naturalidad, que bien podría pensarse que fueron creados por el mismísimo García Lorca, opina Ibáñez.

El montaje transcurre en tres actos; es una puesta en escena con grandes recursos literarios, artísticos, músicales y plásticos. Del texto original se hicieron algunos cambios en el orden de las escenas, con plena autorización de Del Paso, quien asistió incluso en febrero pasado a una presentación en la que se le mostró la continuidad escénica de la obra. El escritor acudió a petición de Ibáñez, pues no quería intervenir ni determinar el sentido de la obra. Luego ofreció la posibilidad de ir una segunda vez, pero ya no fue posible. ''Nos dio su bendición" y dijo que llegaría al estreno. Por lo demás, indica el director, hubo entera libertad.

''La participación con el autor en el teatro en México es una de las cosas menos frecuentes, por lo menos en mi caso, mientras que en otros países los directores y los autores trabajan juntos."

foto2 La vida de García Lorca, su infausta persecución y su trágica muerte son elementos que bien podrían sustentar una tragedia. Sin embargo en su libreto, Fernado del Paso decidió que tuvieran cabida la alegría y los sueños porque el poeta, a pesar de la fatalidad, llegó a un estado de gracia.

Para crear tal atmósfera se incorporan a la obra más de 50 trajes y objetos de papel de china elaborados por el artista plástico Humberto Spíndola. La propuesta logra llenar de color y candor el escenario.

Privilegiar el lenguaje hablado

El elenco lo conforman intérpretes de teatro universitario (egresados de la Facultad de Filosofía y Letras y del Centro Universitario de Teatro de la UNAM), que ya han trabajado con Ibáñez en montajes como La vida es sueño.

''Los actores universitarios siempre están abriéndose a lo que no conocen, experimentan", mientras que en las ''estrellas" no siempre hay la misma disposición, respondió a pregunta expresa el director al cuestionársele, Ƒpor qué no había llamado a actores de reconocido prestigio para una obra de esta importancia?

Además, los tiempos no resultaron coincidentes con las actividades de algunos actores y se quedaron ''los que fueron congruentes con el plan de trabajo que se planteó".

La muerte se va a Granada comenzó a ensayarse desde mediados del pasado enero. Transcurre de manera muy cinematográfica, con muchos saltos de tiempo y lugar. Se le da prioridad al lenguaje hablado, rico en imágenes y poesía.

Destacan, entre los actores, Diego Jáuregui, Oscar Altamirano y Patricia Marrero. El resto del reparto lo integran David Antón, escenógrafo; Juliana Fester, iluminadora; Diego Ordaz, compilador y pianista; Jorge Neri, realizador musical; Enrique Erstardam, asesor de movimiento; Marco Liramark, asistente de la producción, y Susana Valera, coordinadora de producción.

(La muerte se va... se escenifica en El Teatro, del Centro Cultural Helénico (avenida Revolución 1500), los jueves y viernes a las 20:30 horas, sábados a las 19:00 y domingos a las 18:00 horas.)